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Oración, actividad cultural y actividad apostólica

Oración, actividad oultural y actividad apostólica.
"¿Qué decir de quienes distinguen .la actividad de la Iglesm
"en cultural y apostólica, separando una de otra, prefiriendo, la
"s8'fJWW{la con mer,oscabo de la primera? ¿ Y qué decir de qu,ie­
nnes creen artificiosa, enofosa e inútil l,a vida 1'nterior., y pr&ctica,­
"m,ente indican que es tiem,po perd«to y vano el esjuer,io, consa,­
"grado al silencio exterior pw-a brindar al diálogO' interior su, V0'1
"intima? ¡Podrá alguna vez el cristiamsma docwmen,tarse a sí
nm Stn"()1 ante el mundo necesitado de verdad vital, si no se pre­
" senta como arte de explorar la pr<>fundidad del esp,ír#u, de ,:on­
"versar
con Dios y de ad1estrar <1 sus seguidores para la oración?
"¡Habrá alguna vez un cristianismo, privado de una profunda,
"sufrida y amada vida de oración, la in~p'iración prujéllica, que
uze es necesaria para imJ.poner entre tas miles de voces que, se oyen
"en el miwndo la suya que grita, que canta, que apa.sronu y que
"salma? ¿Podrá tener lüs cwrism "Sa,.to
una actiwidad que pret'endwse testimomar a Cristo e in­
" fundir en la humanidad e'i fB'Ym,miPo de la novedad regeneradora
"que "" mcontrase en la hum " ción el secrrlo de su certeza y de su fieerza?
nos decimos estas cosas} queridos hi':jos, PGJTa que esté-.rietm­
" p.-e en vosotros presenlel el conx:ep•to de la necesidad, de la
"prioridad de la oración, y p-a,ra que sep&i.s corresp•onder a la
"soilem'!ne iinvi'itación det Conciüa Ecwmiéniico, que a tO"dos inrmta
"a ret<>rnar a las aguas puras y vitales de la oración de la Jg/,esia;
"ya sabéis el esfuerzo que está rea!Mando pw-a, devolver al, ,puel,/,o
"de Dios el sentido y la capacidad de orar co" ellt1,, y wn ella
"celebrar y vi.m'r sus misterios de gracia y de presencia divina."
Alocución del Papa en la Audiencia General (20
de julio de 1966; texto francés e italiano en
L'Osservato-re Romano del 21; de Ecclesia, sábado
6 de agosto. Madrid, 1966. Año XXVI. Semana-
rio número 1.303).
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Fundaci\363n Speiro

Cultura católica.
"Nos gusta que busquéis en el ,:am,po de. '1/'ll!ilstra cultura ca­
"Mlica y de '/JUIJstra vida cristiana el objeto de vuestro estuxl1lo.
nco_n demasiada frecuencia e~ que quiere adqu.irir cuUura som-ete
na e.xa'l'nen) te1'11){],S, estudios, exp'eriendas, ideas ajenas; al,g,mos no
n se creew sufiicúrnte-m1ente cwltos y avezados si ffiJ si[!Ue1JJ la es­
'' cUJe/a de maestros miás a menos extrañO's a la cultura de nuestra
"casa; la novedad, la orig,nalidad, la fórmiula dinwmica y resolu­
"tiiva de los pro>blemas es preciso tomarla prestada de casa ajena;
"en /,a propia casa todo parece estático, pobre ,acabado. De mrves­
"tigadores se conrviei'ten en· discípulos, luego en seguuJ.ores y! mris
ntarde en rep>e'tidores de teorías ajenas, haciendo u,n, gran esfuer­
,,zo por represenJtarlas CO"m!O·sanas y asimilables. VosO't-ros, no. No
ndec'llmios, desde lueg·o, que es preciso c'Wcwnscril:lir el fnterés cul­
"twraiJ at catecism'O domiéstico y cerrar /,as ventwnas a las ilimita­
"
das y con fre·cuencia 1/nstructivas teorías de quienes están fuera
"de n,westro casa, mejor -sig,,,iendo otro aspecto-no hay nada
"e.xtra:.ño, nnlnigwntt doctrina nos deja indiferentes: «El hmnbre es­
"piri~al ju,zga de todas las cosas» (1 Cor., 2, 15), «Todas lasco­
"sas son vuestras.» (1 Cor., 3,22). Pero ahora nos referimt0s a que
"vosotros da,Js prueba de inteligencia al busca,< en la esfera de los
"probll!M1'aS y de las doctrinas de la vida cató.Z-ica los lemas que os
ninteresan; tmlestigá~s el patrimonio de nuestra. casa1 que tan mag­
"mficamente ha ilustrado el C oncilío, riquezas vi:vas e mm,en;sas de
"pensamiento, de estudw y de rvida".
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Discurso del Papa al ·XXVIII Congreso Na­
cional de los Graduados de Acción 1Católica
Italiana {4 de enero de 1966, texto italiano en
L'Osservatore Romano del 6); texto castellano
Ecclesia, núm. 1.275.
Fundaci\363n Speiro