Volver
  • Índice

Julio Meinvielle, De la cábala al progresismo

INFORMACION BIBLIOGRAFICA
Julio MeinvieUe: "DE LA CABALA AL PROGRESISMO(*).
Desde muy temprano Julio Meinvielle comenzó .a luchar pcr
la buena causa: la defensa de la pureza e integridad de la verdad
católica. Dondequiera que surgieran voces opuestas _al credo ca­
tólico,
allí estaba él para defenderlo; y si las voces eran senci­
llamente disonantes o expuestas a que la verdad sufriera detri­
mento, allí estaba él también, para
dar la
voz de alerta. Recuér­
dese lo que escribió cuando el racismo de Hitler, cuando la guerra
civil de España y, sobre.todo, cuando Maritain .comenzó a darnos
sü versión de la nueva cristiandad con su hunianistno integral.
Ahora nos ofrece este grueso volumen acerca de la cábala y el
progresismo, cuyo objetivo lo señala él mismo en el prólogo: de­
mostrar que la gran tentación del homhre de todos los tiempos
ha sido la de equipararse a Dios, "seréis como dioses", o ponerse
en ·el lugar de Dio&, quer.iendo. con su saber y su hacer desmentir
la revel¡¡ción y probar que él se basta a sí mismo.
Mientras la tradición cristiano-católica afirma, ante todo y
sobre todo,- la existencia de _.un Dios trascenderité y personal, que
por creación y gracia se comunica a sus criaturas sin qué: éstas
sean nada de su substancia, pero en las que deja un destello o
imagen de Dios, con verdades naturales y racionales que son pa­
trimonio metafísico de la humanidad, y verdades sobrenaturales,
que son regalo de una gratuita revelación divina, la tradición
gnóstico-cabalística propende a meter
a· Dios en

cuadros pura­
mente
humanos, haciendo

de él algo indeterminado e impersonal
y haciendo del hombre la culminación del proceso emanativo del
universo. En la tradición católica el ·hombre es esencial y primor­
dialmente un ser receptivo
y abierto; en la gnóstico-cabalística se
erige en
constructor d_e-SÍ-mismo, del mundo y de Dios, a traVés
de todo un sistema de ficciones que no parten de la realidad, sino
del furor de la mente humana. "Por eso en la tradic~ón gnóstico-
(*) Editora Calchaqui Salta, Argentina, 1970, 44 págs.
Fundaci\363n Speiro

INFORMAC/ON BIBLIOGRAFICA
cabalística predominan -lo subjetivo y lo inmanentista sobre lo ob­
j etivo y lo trascendente."
Por
Cábala se entiende, pues, todo el empeño puesto por el
hombre
en hacerse con la clave de la ciencia sin necesidad de Dios
ni de estar a lo que Dios ha revelado, apelando no sólo a las cien­
cias ocultas, sino· a una inteligencia: gn6stiéa: de -far "fe, que queda
medida por la razón humana. Esta cábala arranca de la primi­
tiva tradición judía
y llega hasta nuestros días, con manifesta­
ciones en
el humanismo renacehtista, el idealismo, el marxismo
y el progresismo, que hace nuevo el modernismo.
, El .autor hace un excurso histórico -por las tradicj.on.es de todos
los
pueblos·y civilizaciones, asi-1;omo por lás sistemas representa­
tiv.os del. saber filosófico. del ,hombre, desde

la cábala judía y el
gnosticismo ·cristiano
de )os

priineros siglos,
:-hasta._ el
idealismo
germánico
Y .el progresismo,de hoy, para señalar, en -cada momento
histórico
,la presencia

de una cábala que
v.a desvirtuando
la verdad
cristiana ya en _nombre del ocultismo, ya de la ciencia,
ya d·e la
filosofía, ya de la mayor edad del hombre,
En el capítulo XII de su libro, Meinville estudia la influencia
de la cábala en el
progresismo cristiano.
Influencia que
no· cree di­
rect@, sino indirecta, pero no por eSo menos real y efectiva. Porque,
dice,. en
el fondo

de este movimiento, surgido en el seno de la Igle­
sia católica, lo que hay es la búsqueda o pretensión de "una nueva
religión, substancialmente diversa de la que dejó Cristo y que ad­ quiere
los caracteres de una gnosis pagana y cabalística- perfecta­
mente -configurada".
De la 1~.evelación s_e tiene un concepto sumamente relativo, pues
se la
condiciona a
la limitación y condicionantes
psico-so~iológicos
del

entendimiento humano; la inmutabilidad de los dogmas se
reduce a un
n,ero supuesto.

cultural; la teología es
historiódaa
pura o bien pura antropología; la exégesis, filosofía y ciencia religiosa, sin respeto alguno para el Magisterio; la religión no
supone.
Iglesia; se

ponen en entredicho. la piedad y las formas ins­
titucionales, mientras
se revaloriza

el ateísmo
y se da un sesgo
temporalista

y politizante a la predicación del mensaje. Todos los
misterios cristianos son entendidos con muchas reservas
y de un
modo distinto a como los viene entendiendo la tradición;
y lo
mismo que se habla de un cristianismo anónimo; s_ufi-ciente para salvarlos a todos, se habla del
am0r al

prójimo como la palabra
clave y

_primigenia. del cristianismo, reduciendo a segundo plano el
amor directo al Dios personal y trascendente, que _siempre se
creyó
il primo atm(}Ye que todo lo mueve y al que se ordena todo.
La secularizadóll, la moral de situaci6fl-,>el,-ad:iVismo, .'la promo-
Fundaci\363n Speiro

/NFORMACION BJJ,LIO(ill;AFICA
ción .temporal valién¡lose . incluso de la rebelión y la reyolucip11,;
todo

esto no
es más ·que. un

reflejo
y una manife,tl¡cíón eje _e,se
saber éábálístic<>
y gni>stico que quiere hacer, predominar lo propiQ
del hombre y

del
mundo profano
sobre. lo
propio, de Qios y ,sobre
lo
que

acerca
dé Dios ye.su . revelación própone. 1~ Iglesia. ·Ese
tamos ante ese metacrist1iánisino ,desque nos hablara Teil)um;I _de
Chardin-·con su Cristo cósm-iCo, punto omega de la emanación ev9-
lutiva. Lo ''vertical'' del cristianismo quéda. sacrificado al·-''ha~
rízontalisIIlo"
que
impone
el ·hombre. El Catecismo holandés es
un caso típico de-este cristianismo ·gnóstico, como _otrQ ._caso típieq
lo es el teilhardismo.
En concltiSíonj ríos dice el autor, al postergar a Dios y la
contemplación, el hombre se ha convertido en el hamo faber,
aten_to a mirar sólo por sus necesidades perentorias y materiales.
De ahí el predominio de lo psicológico y sociológico, de la economía
y d~ la __ técnica, Ni razón _ni l~y, sino técnica y co1,1ciencia. El hom­
bre se es

a sí
ni.ismO nor11:1:a~_Y- fin_ .. La. ciu4aCL secular dÍviniza el
esfuerzo
técnico.
"La tecnol6gía -se córtvierte en tecnocracia y en
tecnolatría". El antropocentrismo
y el naturalismo triunfan en
toda línea bajo el signo del progresismo.
Es éste un gnosticismo del peor cuño porque es la extrapo­
lación del misterio cristiano y, además, una degradación de lo
cristiano.
El progresismo ·estab!ece en .el hombre y en el mundo la
111eta final de la historia. No trabaja en el_tieriip0 sub sp•ecie aeter­
nita.tis,
sino que quiere etemiza~?.e en el tieµipo, soñando con tina
edad

feliz en una· progresiva perfeéción
· de
la humanidad
Sin · Ias
alienaciones perturbadoras y adormecedoras de la Creencia eti una
ciudad celestial.
Hoy dertamente Parece preva1ecer esta concepción gnóstico­
cabalística de la fe y de la religión cristiana. ¿ Es esto ccmj>'ltible
con

la promesa hecha por Cristo a
su Iglesia
de estar con ella
hasta el
fin de

los tiempos?
Cíertainente, y

las puertas del
infiere
no no prevalecerán. Pero eJ}o no obsta, como dice él autor, para
que la Iglesia
·pase por momentos g~avéS, momentos' de apuro,
de

los que
sól()_ D;ios· sabe cómo

va a
,salir. Jup.tO al "no ·prevale~
cerán" tenemoS que
poner aquel' otro

texto evangélico: "Cuando
venga el Hijo del
Hom)Jf'e~ ¿ encontrar_á fe· en la tierra:?"'· Y la
eclesiología enseña que
puéde __ la Iglesia l_)etinaúecer siempte· como
un

núcleo auténtico de verdad, aunque sea_profesada por pocos,
sufriendo la apostasía' y fa defección de muchos o de la mayoría.
Puede
ser el ¡,usillus gre:r de que nos habla el Evangelio.
A nosotros empero lo que compete es luchar
denodadamente
por

que
la:Iglesia0~tezca hasta llenar la tierra;;sin conces/ones al
Fundaci\363n Speiro

INFORMACION BIBUOGRAPICA
error y evitando. el trocar la Iglesia católica por nna Iglesia gnós­
tica. Del éxito no
nos pedirá
Dios cuentas_,
como decía
nuestro
Donos.o, pero sí de si luchamos o n_o por conseguirlo. _A luchar, pues.
El libro, en general, se lee con gusto. Resulta, empero, un
poco difuso y complicado, con bastantes repeticiones debido, en
parte, a la proligidad del excurso histórico y al hecho histórico
de que los errores suelen repetirse. No obstante, lo creemos uti­
lísimo
y es una buena contribución a la e.a.usa de la verdad_ cató­
lica
y a su defensa integral. La que ha de hacerse con ideas cla­
ras
y sin hechos equívocos. Cosas que hoy no siempre van juntas.
B. MoNSECÚ
Marcel Clé-: LE COMMUNISME FACE A DIEU
(Marx, Mao, Marcuse) (*).
Este libro de Marce! Clénient condensa en las palabras de su
título lo esencial del comunismo, esto es, su carácter intrínseco de
ir dirigido contra Dios. Es un libro de· fácil lectura y compren­
sión y me atrevería a decir que, eti cierto modo, es apasionante.
¡¡Es posible la resistencia al comunismo -nos dice su autor
a poco de comenzar la lectura-. En primer lugar, es una lucha
espiritual,
pero no

únicamente.
Es también una resistencia, en el
orden temporal, a las técnicas
de la guerra psicológica. Para ser
capaces
de oponer eficazmente esta resistencia há.ce falta estlldiar"
lo que es el comunismo. Estas palabras son un aliento para todos
aquellos_
que. np creen_ ql!e el _comunismo sea inevitable, por la im­
po,sibilidad de combatir un pretendido
"sentido de
la historia", que
tan sólo es i_rreversible para las mentes de quienes quieran trazar ese surco por el que discurre la historia y para aquellas que cons­
ciente o inconscientemente han digerido sus doctrinas. Para opo­
nerse
a ese sentido de la historia es necesario estudiar y conocer
lo que es
el

comunismo,
y éste es el propósito del libro. Propósito
en nuestra opinión, ampliamente alcanzado.
La comprensión del libro, como el mismo autor advierte, está
al alcance de la persona de conocimientos medios, sin amplios co­
nocimientos de filosofía, aunque no por ello deja de ser útil al
estudioso.
(*) Nouvelles editions latines, 2.ª -ed., París, 1968, 252 págs.
40Ó
Fundaci\363n Speiro