Para una acción eficaz frente a la subversión

PARA UNA ACCION EFICAZ FRENTE A LA SUBVERSION
POR
}EAN DE SAINT CHAMAS.
La acc10n pide método; una táctica adaptada a los objetivos.
Siendo así ¿qué vemos demasiado a nrenudo?
La corriente subversiva que cada día parece marcar hitos, es obra
de
una minoría de ideólogos, privadoo de toda participación en las
responsa!füidades reales. Sin embargo, avanza y juegan a ganar.
Los verdaderamente competentes, los vetdaderammte responsables,
por

el
contrario, son
legión. Tienen experiencia
y formalmente, por
lo menos, detentan los
poderes concretos. Sin embargo, van para
atrás
y juegan a perder.
Y es así porque no ponen reo. acción ninguna táctica, ningún
método pensado seriamente.
Hasta tal punto ocurre,

que los mejores llegan a
creer en una
fatalidad, en un sentido irreversible de la histotia ...
En
cambio, dada
su posición, podemos atestiguar por experien­
cia

que no sólo es posible, sino relativamente
fácil, dominar esta pre­
tendida

fatalidad, e invertir el curso de las
cosas, dat vida a la so­
dedad devolviendo los poderes a los que tienen competencia y res­
ponsabilidad.
A condición de poner en acción una táctica adaptada al objetivo,
un método seriamente pensado.
Y, primeramente, es condición:
-conocer el =nismo habitual de la subversión,
-sacar de éiJ las lecciones positivas,
-y deducir el método que permita obtener resultados inversos.
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Fundaci\363n Speiro

JEAN DE SAINT CHAMAS
J. EL MECANISMO DE LA SUBVERSIÓN.
Emplea la táctica sugerida pot Trotsky, vuelta a seguir pot la
mayotla de

los líderes de
la revolución y que es confirmada pot
casi todos los acontecimientos de suqversión a través del mundo des­
de hace cincuenta años. Puede analizarse en
ciru:o puntos.
l. Disponer de pequeños equipos de hombres formados y ejer­
citados.
Se trata de un punto fundamental en el que han insistido todos
los
maestros de
la revolución.
La acción oo se realiza con masas. Todo reposa sobre pequeños
equipos formados ideológica
y tácticamente.
En la historia del partido romunista de la Unión Soviética, publi­
cada en Moscú, se lee: "Bl partido romunista de la Unión Soviética
ha nacido de fos grupos marxistas que se habfun lig,ido con di movi­
miento
obrero al que aportaban
la consciencia socialista".
El
partido comunista ha subrayado siempre la mayor impottancia
de las células, y se sabe que actualmente, para preparar las vías a la
"'sección política de empresa", se ha dado la consigna de dirigir todo
el esfueno al desarrollo de l,us c&uJas de empre.,a, desarrollo cuan-·
titativo y sobre todo cualitativo.
Las otras tendencias y organizaciones revolucionarias han recurri­
do

a
ws miamos mmios de base: apoy..,., sobre pequeños equipos
intensamente
formados.
En

mayo del 68,
O>hn-Bmdit escribía: "fu preciso, ahora, aban­
donar
los maniliestaciones ,espectaculares y ocuparnos de la consti­
tución de
grupos de trablljo y de eiccMn". (Publicado en el No,wel
Obst!1'11ateu, del 20 de mayo de 1968).
Bl movimiooto de

mayo
del 68 había nacido partiendo de los
pequefios equipos

de
trabajo prácticos

de
sociología en Nanteme. La
formación

de
estos pequeños equipos es "idrológica y táctica".
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Fundaci\363n Speiro

PARA UNA ACCION EPICAZ FRENTE A LA SUBVERSION
Son precisos hombres giiiados por una estrategia global y también
ejercitados ,en los métodos de acción.
No es sino
ron el

apoyo de
tales equipos
como puede preverse
el
proceso de maniobn, sobre el terreno que se desarrolla en confor­
midad con las etapas
siguient.es.
~:~.
2. Montar pequeñas operaciones que bloqueen el funciona­
miento de las in.stituciones.
El

primer
objetivo táctico
de los pequeños equipos
formados,
es

el
de organizar acciones con el fin de demostrar que es posible
oponerse impunernent!e a
las leyes, a los poderes en ,ejercicio y al
funcionamiento norm,d de la sociedad. Una huelga es evidentemente
una operación
de ese tipo, pero otros muchos actos tienden a resultados
análogos.
Por ejemplo:
-
Distribuir en la empresa panfletos de contenido político.
~ Poner catteles en sitios distintos de los reservados.
-Tomar más de quince horas de delegación, cuando no se tiene
derecho
más que a quiooe horas.
-
Conseguir que sea tratada una cuestión personal por la jerar­
quía superior, cortacircuitando el escalón competente.
-Crear

una
siruación tal, que aquello., a quienes competa no

se
atrevan a ordenar la evacuación de una fábrica ocupada, o
que el
gobernador no se atreva a hacer cumplir un decrero ...
Hay otras acciones que surgen de ese mismo espíritu y de
la
m!isma táctica.
Por ejemplo:
- Vender relojes robados sin que las
autoridades inte -

Impulsar a
los cultivadores a tirar una valla (bien entendido
que se habrá elegido la de un pernonaje que sea poco simpá­
tico).
-
Paraiizar los

cursos en una Universidad.
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/EAN DE SAINT CHAMAS
-Organizar un aborto público cuando la ley lo prohíbe.
-Realizar un -secuestro, etc.
Geis.mas, explicando cómo se secuestra a un mando intermedio,
cómo

se
obliga a U!JJ director a mairchar a cuatro patas, precisa:
"No se trata de una &,ersión, de una locura, es una violencia
profundamente poilítica."
En efecto, ¿qué es lo que de autoridad resta
a un direaor a quien se le haya visto someterse de esta manera?
(Publicado en el Nouvel-Observateur, núm. 288, de mayo del 70).
Tales acciones deben valorarse, sobre todo, por su alcance ideo­
lógico, es decic, por su influencia sobre los espíritus. Pues se rrata
principa:lmente de

provocar ios
efectos que se producen en la tercera
etapa siguiente.
3. Suscitar, en la mayoría, la duda, el miedo, el silencio.
Los
mooios de info,mación se pondrán masivamente en acción
para que
se

conozcan
las operaciones que han bloqueado las reglas
sociales.
Entonces las gen""-' honestas romienzan a poner en duda el valor
de
las instituciones. Se pierde ronfianza en ellas.
Se duda de las intenciones de la jerarquía cuando se le ve corra­
circuirada
por jerarquías paralelas.
Se duda del valor de las leyes cuando impune y públicamente son
violadas.
Se duda del derecho de propiedad cuando las vallas se han derri­
bado.
No solamente se duda, sino que se va desarrollando un temor
latente. Temor de no estar con los tiempos, temor de parecer defensor
de "tabúes burgueses", tem0r de ver girar el viento, tem0r de no ser
escuchado

o
romprendido en adelante. Esa maia conciencia paraliza.
Ese temor es a veces mantenido o provocado hasta grados muy avan­
zad.os. Puede llega,r hasta el terror.
Un

alto
funcionario americano, encargado por el Senado de los
Estados Unidos de una encuesta en el Vietnam, indicaba en 1970:
"Ha llegado a ser un axioma entre los comunistas que sus éxitos
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PARA UNA ACCION EFICAZ FRENTE A LA SUBVERSION
son proporcionales aJ grndo de linseguridad que parece sentir el pue­
blo...
Así, los programas que aterrorizan son el útil que permite a
los
romunistas conseguir sus triunfos" (R,,pport Douglas Pike, en
el
Senado Americano, pág. 9).
""La intox"" puede intervenir •en ~e clima. Es el juego de las
noticias contradictorias, a menudo falsas, que ooplan calor y frío,
espetanz.a y desencanto, gastan los nervios. (Véase Climat, de mayo
del 68.)
Cuando la duda
y el miedo se han apoderado de los espíritus;
enrone,,. las gentes honestas son reducidas a:l silencio.
Los notables, las gentes responsables se sienten aislados, impedidos
die ejercer su influencia.
Es el fenómeno de la mayoría silenciosa.
Como lo
explica Ro_ger Mw::chielli: ""La estrategia fundamental es
obtener
'.la apatía popular, la inhibición, la no intervención, el silencio
de

la
gran mayoría". (""La Subver~ión", pág. 73). Este resultado es
obtenido por medio de pequeñas operaciones renovadas, que han te­
nido pot objeto engendrar la duda.
4. Acreditar las apariencias de una nueva mo.-alidad y, oon
ello, de nna nueva legitimidad.
Todas las operaciones subversivas deben ser apoyadas con una
propaganda,
pot la cual sean hostigados moralmente los principios
·en los que reposan las instirudiones; y, en cambio, las operaciones
emprendidas en contra de ellas reciban calificativos morales.
""Contra
la
política de
regresión social, de autoritarismo, de aban­
dono nacionai... se invocada derecho a las legítimas aspiraciooe.s, a
las justas reivindicaciones, a los poderosos movimientos muy mayo­
rit.ar.ios ... "
Se obsevatá un estilo constantemente mora:lizador eo la mayor
parte de

los documeotos que apoyen a los pequeños
grupos subver­
sivos

antes refetidos.
Se
trata de romper la

reflexión
y la roncieocia persona:! en benefi­
cio de
la conciencia colectiva.
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Fundaci\363n Speiro

IBAN DE SAINT CHAMAS
Se amotlina a la población contra el "complot de podet", y se
le hace creer ail pueblo que es él qui,,n decide, cuando en realidad es
manipulrulo. F.sta nueva mo nueva legitimidad. Vendet relojes robados ha podido set considerado
durante muchas semanas como un al:to heroico, adelantado a sus tiem­
pos. Esta nueva mo que decidan, por ejemplo, llevar una
expedicióo punitiva
contra un
acaparador, acusar,

tratar de imponet a los estudiantes
la prohiM­
cióo

de
petmanecet en

sus facultades, o lograr que
ejetzan sevicias
contra

algunos de
sus profesores

o de sus faroiliares. Más adelante
esta nueva legitimidad
Setá la base de nuevos poderes.
5. Suscitar nuevos poderes fuera de las eompetencias y de las
responsabilidades.
En este punto de desarrollo de la accióo subversiva, al qualar neu­
trail.izadas
y reducidas al sillencio las gentes honestas, y al serles im­
pllestas u.nas nuevas justificaciones de aquella acción, se desarrollan
y se refuerzan contrapodetes y se aJiirman natu paralelas.
Lo

que no etan ayet sino infracciones de
las leyes, hoy son
derechos adquiridos; y por medio de estos nuevos
derechos será
posi­
ble suscitar
nuevas operaciones destinadas a

bloquear
las instituciones
normales, haciffido crecer ron ello el temor, la duda, el silencio de las
gentes honestas, etc .•••
Cuando se ha visto varias veces a un delegado subir su crédito
en
horas, esto llega a ser para él un derecho adquirido, del que usará
para realiza, nuevas operaciones, para aumentar la duda y el silencio
de las
,jerarquías naturales.
Af término die la común crítica, la sección sindical, el soviet, se
convierten en los poderes dominantes tanto en
la base como en el
vértice.
La práctica de este procedimiento ha puesto progresivamente todo
el poder entre las manos de grupos políticos que así restan a los com­
petentes las responsalfüidades de

su
funcionamieinto. As~ la doble
jerarquía,
instrumento prefetido

de
los totalitarismos, se ha instalado.
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Fundaci\363n Speiro

PARA UNA ACCION EFICAZ FRENTE A LA SUBVER:sION
El sistema realiza así un espirai1. que progresa sin límites hacia
la revolución. Es la aplicación de la consigna de Stalin: "Para el
revolucionario, lo

principal
es el ttaba,jo revolucionario, no la reforma.
Por

eso una
reforma llega a ser naturalmente un instrumento de

dis­
gregación del poder, un instrumento de refuerzo de la revolución, un
punto de apoyo
para el desenvolvimiento revolucionario". (Principios
del Lenm,smo ).
11. LAs LECCIONES POSITIVAS.
l. Conocer el mecaniemo.
Esta es [a rondidón previa pan,. oo ser engañosa y pan,. evitar qne
otros sean víctimas de ello. Cuando se sabe que se trata de una ~-­
concertada,
pacientemmte e!abor,ula en el seno de pequeños equipos
de acción de células, es más difícil atribuir sus efectos a un movi-
miento
fatai de la historia, a una evolución ineluctable, al curso
iuevetsible
de las cosas.
No estamos en presencia de

una
fatalidad, sino
de una
táctica que
puede
ser contrarrestada por otra táctica.
2. Observar el rigor sicológico del esquema así trazado.
a) No son las «»rías las que hacen huella en los espíritus, sino
los
hechos.
Por eso una realización concreta, hasta de pequeña envergadura
(punto 2), influye sobre los espírirus más que los discursos. Son
las mentes las que oon así influidas: "Toda gran revolución co­
mienza por una fase de revolución de los espíritus"" (A. GEISMAR:
Nouvel Observateur, núm. 288, de ~ del 70).
Cuando Jos espíritus han sido así golpeados o nentralizados, es
posible que se dé crédito a los
mitos y las ideologías.
Ninguns demostración bastará para impedir su penettadón en los
espíritus y la justificación de nuevos poderes.
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Fundaci\363n Speiro

JEAN DE SAINT CHAMAS
b) El proceso que acabo,noo de describir oo solamente time cl
mérito de segiiir muy cerca la psicología. del encadenamiento de las
ideas, sino también el de fracci No es de un solo golpe como se pueden subvertir las leyes, las
instituciones, las jerarquías, loo poderes, la moral de un país, sino
que
es por una sucesión de pequeñas infracciones coroo resulta
siempre posible su logro a una pequeña minoría ejercita ligentemente
conducida.
Progre;ando por
pequeñas etapas, se da uno cuenta de que en un
tiempo bastante corto se consignen transformacionies apreciables di!!
espíritu público.
e) Es casi completamente estérn esforzarse en hacer 'la contra a
los efectos de una tal táctica interviniendo, a un nivel cualqu,era
de . su desarrollo, sin

un
· plan
positivo de conjunto.
Por ejemplo, es inútil
tratar de reanimar loo valores

de las gentes
que no tÍ!enen ante los ojos siltlO ejemplos de [oo logroo obrenidos por
los elementos subversivos,

o bien
oponerse al desarrollo de
contrapo­
deres cuando ésros parecen mejor fundados a los ojos de !la opinión.
Entonces,
pot ,el contrario, la represión aparecerá como odiosa, la
"caza de brujas" hará mártires ...
ffi UN MÉTODO ADAPTADO
Se puede concretar en cinco puntos, simétticoo a los de la tácti­
ca
de subversión, pero exactamente inversos.
l. Movilizar pequeñas equipos formados y experimentados.
Nada de Jo que ha tenido éxito en ila hitoria ha podido hecerse
sin 1la intervención decidida de a:lguoos hombtes con [a formación y
la práctica requeridas.
Pero, a diferencia de
las organizaciones sub\"ersivas que
se apoyan
preferentemente en ide61ogos, en desarraigados, en

hombres sin res­
ponsabilidades, es preciso:
814
Fundaci\363n Speiro

PARA UNA ACCION EFICAZ FRENTE A LA SUBVERSION
a) que los hombres movilizados para que puedan ser las loco­
moto<:as
de una ll quienes
asuman responsabilidades reailes, participen de las jerarquías
naturales: jefes

de taller,
mandos intermedios, pattonos, padres de fa­
milia, nomboos de la vida Joca1, etc. •.• ;
b) que se dé la debida formación a estos hombres y esta for­
mación no debe
ser la de una ideología, cualquiera que sea, de cons­
truccicmes a priori, de sistemas, de proyectos de sociJedad, sino de rea­
lidades
sociales.
De ahí que :sea preciso un empirismo, con una encuesta seria
acerca de esas realidades socia1es y oobre 'lo que se puede hacer cada
día ¡,ora mejorat lo que se pueda.
Ante todo son
necesarios hombres
decididos a rompet con los
hábitos dialécticos que

todo lo
analizan como si se
tratara de reaccio­
nes y oposiciones de fuerzas, tendettcias, partidos. Hombres capaces
de expresar e imponer en torno ele ellos nuevos hábitos mentales
reencontrando
las realidru:!es y los valores comunes.
2. Adherirse a micro-realizaciones que sirvan de p,.-ueha de
que
ello es posible.
No se trata ele querer emp,ender rodo a la vez.
La amplitud de la tarea de reconstrucción es tal, que descoramna­
ría

a los
más atrevidos si se propusieran hacerlo todo.
Sin
,embargo, es posible conseguir objetivos concretos, parciales,
de t:ealización accesible.
Por

ejemplo:
- Restaurar la jerarquía y la equidad a escala de taller, de es­
tablecimiento de
empresa.
- Restablecer
el ciocu.ito normal de informadon haciendo preva­
lecet a quienes asumen responsabilidades jerárqiticas frente a los
representantes no jerárquicos.
- Volver a situar en los límites de
la ley a quienes estén ten­
tados a salirse de ella.
- Poner fin a los diálogos llenos de trampas con opositores que
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Fundaci\363n Speiro

/HAN DE SAJNT CHAMAS
pretenden, precisamente, asumir un poder, llevando el diálogo sobre
el
terreno adecuado.
Son incontables los
ejemplos de
las ,situaciones en Jas que así se
ha podido

dar
la vuelta, en muy poco tiempo, a situaciones coocretaS
mediante esas acciones limitadas, pero que muestran que la cuestión
ha cambiado de

sentido.
En una empresa que había sido muy nucleada
y que bahía conocido huelgas serias, los elementos subversivos em­
pezaron a perder terreno y la jerarquía natunil volvió a tomar su
lugar en el día en que, coru:rariamente a las rostumbres anteriores, la
dirección anunció un aumento para la jerarquía sin prevenir antes
a
los
delegados.
En una región anteriormente muy agitada, la calma volvió el día
en que
una de las empresas puro de nuevo en marcha el funciona­
miento de
las jerarquías. Así, las empresas vecinas se dieron cuenta
que esto em posible y decidieron seguir el mismo camino.
O>mprometerse deliberadamente en esta vía de micro-realizaciones,
es dar un doble
golpe.
De

inmediato
es logra< una mejora tangible, se sanea un sector,
se restablecen los circuitos vita.les naturales.
Y,

a medio término, se da prueba de que
se puede progresar. Se
vuelve a tener credibilidad.
Se prueba que el porvenir, que la. iniciativa, que las proposicio-­
nes constructivas, que los resultados positivos, son posibles, y que
no se hallan en el camino de
la subversión.
3. Devolver a las gentes honestas la confianza, el coraje y la
,palabra.
Cuarulo un pequeño sector"" ha saneado, cuando las gentes ho­
nestas han podido comprobar que esto era posible, entonces la acción
emptendida
se hooe creíble. La confianza toma el lugar a la d;,.i..
Los valores pueden ~enacer. Las g,entes honestas vuelven a tomar la
palabra. Las
mentalidades son ,esmu.tadas. En lugar de la acción
ideológica que

es
cl punto ele las rupturas de iJa subversión, se ve có­
mo los espíritus retornan a lo
real.
Todavía es preciso que el testimonio de los hechos pueda llegar
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Fundaci\363n Speiro

PARA UNA ACCION EPICAZ FRENTE A LA SUBVERSION
hasta quienes tienen necesidad de reencontrar la confianza para ser
valientes.
Y pru:a esto son precisos: una red bastante íntima de relaciones,
de

encuentros, de
in,ercambias, de
experiencias,
consultas mutuas, visi­
tas sobre el terreno, informaciones entre jefes responsables, en la
misma empresa, desde luego, y hasta fuera de ella con las empresas
vecinas, y si es n Hay
que
aporta,r elementos de información, de formación, de
reflexión a los que ,están dispues.os para llevar una obra de remos­
trucción sochtl y dejar trabado entre

ellos un
juego de relaciones y
amistades bastante cerrados. Estos son dos de los objetivos a los que
hemos dado
prioridad
Ambos ya 'han dado !arg,,,nente sus frutos. m director de relaciones
sociales de una gran
empresa nos

confiaba
hace vmrios años: "Nunca
os agradeoeremos bastante el 'habernoo mostrado que es posible lo que
entonces
creíamos que no :lo era".
La mejor
defensa activa contra cl "inrox", es hacer la demostra·
ción positiva, concreta, de los
resulltados, lJan,a,: a las autoridades na­
turales
para recordarles sus responsabilidades, romper el aislamiento
de los notables y ayudarles a volver a romar la p En el cuadro de una empresa, las cosas van de nuevo por sí mis­
mas. La voluntad elata y sostenida de un responsable jerárquico, es
inmediatamente
percibida
hasta los
niveles más modestos y se de­
vuelve la
CO!llfianza a la mayoría, que deja de ser silenciosa.
Más allá de la empresa, podemoo atestiguar el papel de los en­
cuentros, cambio de experiencias, misivas y notas cortas de trabajo,
apoyadas por contactos persorurles.
4. Confirmar_ las razones de ser, el fundamento moral, la
legitimidad de los poderes responsables.
Desde luego, los 'hechos hablan por sí mismos.
Por

poco que
se ayude a las gentes a mirar, a observar, por poco
que
se haya llamado a su juicio personal -<¡ue loo 'hechos quiten los
priejuicios de una "consciencia rolectiva" -los hombres encuentran
las
justificaciones que

ofrecen
las coherencias necesarias.
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JEAN DE SAINT CHAMAS·
Entonces, 'Se confirman las razones de ser de las instituciones
sociales
IJOJ'ma:les.
Los autoridades respon&bles son confirmadas en el sentimiento
de
la legitimidad.
Para tener o,edibllidad es primero preciso creer en verdades cier­
tas, tales como las que se desprenden de los hechos, de los resul­
tados; hemos visto a jefes que han vuelto a ser creídos, una vez ],o.
mulas las dudas que pesaban sobre su comportamiento, el día en que
se consiguió que aeyenin en loo frutos de una acción metódica, pro­
gresiva y coherente.
5. Devolver el poder a los respomables.
El poder, sob,e todo en las modernas democracias, no se concede.
Se toma.
El poder perteneoe a los que se hacen creíbles porque saben
dónde van.
En vano los ideólogos propondrán modelos de sociedad. No son
los modelos
lo que conduce el · mundo, sillo los hombres que ope­
,an con método.
Tenernos ,ejemplos abundantes ante nuesrros ojos de poderes le­
gales
eo fa imposibilidad de ejercerse, porque otros han conquistado
la plaza y conquistado los corazones y las voluntades. Pero, por poco
que los hombres de lo real adopren esa táctica realista, pueden tara·
bién inrentar una progresión en espiral, cada vez más poderosa, cada
vez más eficaz.
Así, la ronfirmación de un poder responsable les permite avanzar
a trealizacione; más positivas todavía, que refuerzan la confianza y,
ron ello, se ab,en más posibilidades, etc ....
¿Enronrraremos hombres

valientes
y lúcidos para empezar proce;o de renacimiento, este golpe de freno a la subversión?
Existen.
En Francia, algunos lo han comen>.ado y los resultados están a
la vista.
No piden sino ser imitados.
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