Índice de contenidos
Número 267-268
Serie XXVII
- Textos Pontificios
- Noticias
-
Estudios
-
La persecución religiosa en España, antecedente inmediato de la Divini Redemptoris
-
Michele Federico Sciacca: pedagogía y antipedagogía
-
La genealogía de la Revolución en Juan Donoso Cortés
-
En la muerte de Constantin Noica
-
¿Una época nueva?
-
El liberalismo y la Iglesia española. Historia de una persecución. Antecedentes: IV. El reinado de Carlos IV (II)
-
La Iglesia Católica y la masonería
-
La escuela tomista de Barcelona
-
La lección del referéndum antidivorcista en Italia
-
- Actas
- Ilustraciones con recortes de periódicos
-
Información bibliográfica
-
Sociedad Española de Defensa de la Tradición Familia y Propiedad: España anestesiada sin percibirlo, amordazada sin quererlo y extraviada sin saberlo. La obra del PSOE
-
Asociación Patriótica Española de Buenos Aires: Anuario del V Centenario
-
George Uscatescu: Prospettive estetiche europee
-
Fernando Monge: Persona humana y procreación artificial
-
José María Sanjuan Gil: Los requetés riojanos en la guerra de España
-
Autores
1988
José María Sanjuan Gil: Los requetés riojanos en la guerra de España
INFORMACION BIBUOGRAFICA
tema de la animación, pues es un tema especialmente complejo
que al incluirse en un
Hbro de divulgación puede dar lugar a sim0
plificaciones inadecuadas. Finalmente, un comentario de tipo me
nor: Femando Monge no resiste la tentación de incluir un largo
texto de la novela
Un mundo feliz, de Aldous Huxley, espe
cialmente premonitoria de lo que puede suceder en estos cam
pos, pero creo que lo mismo que el autor critica el uso por parte
de los abortistas de algún texto de Santo Tomás,
es peligroso
buscar apoyos en un autor cuyo furibundo anticristianismo queda
sobradamente demostrada, entre otras, en su novela utopista·
La
isla, en la que incluye numerosos discursos llenos de tópicos
contra San Pablo, tan caros a los autores de la contracultura.
JOSÉ MIGUEL SERRANO
José María Sanjuán Gil: LOS REQUETES RIOJANOS EN
LA GUERRA DE ESPAl,A (1)
Voy a tratar de siíuar este libro que acaba de editar el co
ronel-auditor del Ejército don José Maria Sanjuán GH en el mapa
de la literatura sobre la Guerra de Liberación, de 1936. Despe
jemos esta tarea informando que es una miscelánea con noticias
inéditas y otras transcritas de libros agotados
-valiosas teedi
ciones parciales, únicas posibles--acerca del carlismo en gene
ral y en La Rioja desde su comienzo, durante la Segunda Repó
blica y luego,
ya en el centro del libro, en el Alzamiento del 18
de julio y en
la Cruzada. En· ésta, los requetés riojanos formaron
principalmente el Tercio
de Nnestra Señora de Valvanera y tam
bién unidades pequeñas y dispares menos conocidas; la historia
militar de todas estas fuerzas, que
ha tenido pocos cultivadores,
es uno de los componentes originales del libro, con relatos inédi
tos extensos.
Otra aportación original son las narraciones humanas y anec
dóticas tomadas del natural por un testigo inmediato, un com
batiente de primera línea, incansable, el autor.
Aun hay que señalar otro rasgo más,
útil parOdiferenciar este
libro en
el océano de los de nuestra guerra: es el don' emocional
con que ha sabido impregnar nuestro amigo sus escritos; esto es
(1) Prólogo de Javier Nagore Yarnoz, Madrid, 1988, edición del autor;
rústica, 4.º, 291 págs., dos croquis, fotografías, 1.000 pesetas. Pedidos a
Fuodación Stella, calle
Ayala, 21, l.º derecha, Madrid.
1160
Fundaci\363n Speiro
INFORMACION BIBLIOGRAFICA
valioso siempre, y más en la situación de apatía de nuestros.
días.
Con lo dicho
ya podemos comparar la obra de Sanjuán con
otras
sobre la Cruzada:
Es una historia militar, sí; pero su calor humano y su fuer
za emocionadora le sitúan en los antípodas de los estudios téc
nicos, eruditos y fríos
de los también coroneles Martínez Bande,
Casas de la Vega, Gárate Córdoba y los hermanos Salas Larrazá
bal. Satisfará menos que las de éstos a los eruditos pero mucho
más' a los lectores no profesionales de las
armas.
El tono estimulante, y digamos que también la intención es
timulante, le separan y diferencian del gran montón de libros de
otros
ex combatientes que han aprovechado su participación en
aquellos sucesos excepcionales
para probar fortuna en el campo
de las letras, sin éxito digno de mención.
El calor humano, vivencia!, del relato del coronel Sanjuán
tiene precedentes en
los días de la guerra y de la postguerra en
dos periodistas navarros, el carlista don Francisco López Sanz y
el falangista Rafael García Serrano, que escribieron varios libros
e incontables artículos en caliente, con pasión, sin grandes pre
tensiones doctriales pero sirviendo admirablemente para caldear
aquella retaguardia nacional eficacísima. En el sur, Pemán
tam
bién copiaba del natural, y magistralmente, pero, en general, más
entretenía que estimulaba; dejando aparte su gran Poema de la
bestia y el ángel, en alguna ocasión hacía llorar más de risa que
de emoción, como estos otros.
Se produjo después un largo silencio, largo y malo, mortal.
Con
algunas excepciones, como el libro Así eran nuestros muer
tos,
del capellán del Tercio de Montserrat, Mosén Salvador
Nonell.
Y, ahora, cuando muchos españoles no aciertan aún a enten
der por qué oscuros senderos hemos bajado de la cumbre al abis
mo, sale a galope a la palestra Nagore Yárnoz con
el estandarte
de entonces, plasmado en su libro,
En la 1: de Navarra (Dyrsa,
1986). Como roda intuición genial
ha tenido enseguida un con
tinuador, Sanjuán. Nadie mejor que Nagore para prologar el li
bro de Sanjuán; éste ha enaltecido el libro En la 1." de Navarra
al rango de cabeza de serie por la semejanza de estilo que el
suyo tiene con él. De una serie oportunísima, cuyo principal pro
pósito es no solo informar, ni únicamente entretener, sino, sobre
todo, mover. Con ellos se relanza el estilo vivificador de López
Sanz y de García Serrano, aquí y ahora. «Nagore-Sanjuán» for-
1161
Fundaci\363n Speiro
INFORMACION BIBLIOGRAFICA
man ya una pieza en nuestra literatura. ¿Aparecerán nuevos es•
labones en esta incipiente cadena? ¡Dios nos lo conceda!
Sosegadas las emociones de una
primera lectura, dos situa
ciones de las reflejadas en este libro quiero
seiíalar: el desbara-.
· juste de las fuerzas nacionales en las primeras semanas y· aun
meses; 'leído ahora con ojos técnicos, es-de risa; pero, con todo
y con eso, así se ganó la guerra. Y la situación de profunda re
ligiosidad que lo impreganaba todo, testimonio para .las nuevas
g,;neraciones de que aquello -fue una · C=ada. Parece mentira
que aquellas evidencias, entonces
vulgares, resulten hoy testimo
nios
codiciables; ,pero así estamos.
M.S. e
Ü62
Fundaci\363n Speiro
tema de la animación, pues es un tema especialmente complejo
que al incluirse en un
Hbro de divulgación puede dar lugar a sim0
plificaciones inadecuadas. Finalmente, un comentario de tipo me
nor: Femando Monge no resiste la tentación de incluir un largo
texto de la novela
Un mundo feliz, de Aldous Huxley, espe
cialmente premonitoria de lo que puede suceder en estos cam
pos, pero creo que lo mismo que el autor critica el uso por parte
de los abortistas de algún texto de Santo Tomás,
es peligroso
buscar apoyos en un autor cuyo furibundo anticristianismo queda
sobradamente demostrada, entre otras, en su novela utopista·
La
isla, en la que incluye numerosos discursos llenos de tópicos
contra San Pablo, tan caros a los autores de la contracultura.
JOSÉ MIGUEL SERRANO
José María Sanjuán Gil: LOS REQUETES RIOJANOS EN
LA GUERRA DE ESPAl,A (1)
Voy a tratar de siíuar este libro que acaba de editar el co
ronel-auditor del Ejército don José Maria Sanjuán GH en el mapa
de la literatura sobre la Guerra de Liberación, de 1936. Despe
jemos esta tarea informando que es una miscelánea con noticias
inéditas y otras transcritas de libros agotados
-valiosas teedi
ciones parciales, únicas posibles--acerca del carlismo en gene
ral y en La Rioja desde su comienzo, durante la Segunda Repó
blica y luego,
ya en el centro del libro, en el Alzamiento del 18
de julio y en
la Cruzada. En· ésta, los requetés riojanos formaron
principalmente el Tercio
de Nnestra Señora de Valvanera y tam
bién unidades pequeñas y dispares menos conocidas; la historia
militar de todas estas fuerzas, que
ha tenido pocos cultivadores,
es uno de los componentes originales del libro, con relatos inédi
tos extensos.
Otra aportación original son las narraciones humanas y anec
dóticas tomadas del natural por un testigo inmediato, un com
batiente de primera línea, incansable, el autor.
Aun hay que señalar otro rasgo más,
útil parOdiferenciar este
libro en
el océano de los de nuestra guerra: es el don' emocional
con que ha sabido impregnar nuestro amigo sus escritos; esto es
(1) Prólogo de Javier Nagore Yarnoz, Madrid, 1988, edición del autor;
rústica, 4.º, 291 págs., dos croquis, fotografías, 1.000 pesetas. Pedidos a
Fuodación Stella, calle
Ayala, 21, l.º derecha, Madrid.
1160
Fundaci\363n Speiro
INFORMACION BIBLIOGRAFICA
valioso siempre, y más en la situación de apatía de nuestros.
días.
Con lo dicho
ya podemos comparar la obra de Sanjuán con
otras
sobre la Cruzada:
Es una historia militar, sí; pero su calor humano y su fuer
za emocionadora le sitúan en los antípodas de los estudios téc
nicos, eruditos y fríos
de los también coroneles Martínez Bande,
Casas de la Vega, Gárate Córdoba y los hermanos Salas Larrazá
bal. Satisfará menos que las de éstos a los eruditos pero mucho
más' a los lectores no profesionales de las
armas.
El tono estimulante, y digamos que también la intención es
timulante, le separan y diferencian del gran montón de libros de
otros
ex combatientes que han aprovechado su participación en
aquellos sucesos excepcionales
para probar fortuna en el campo
de las letras, sin éxito digno de mención.
El calor humano, vivencia!, del relato del coronel Sanjuán
tiene precedentes en
los días de la guerra y de la postguerra en
dos periodistas navarros, el carlista don Francisco López Sanz y
el falangista Rafael García Serrano, que escribieron varios libros
e incontables artículos en caliente, con pasión, sin grandes pre
tensiones doctriales pero sirviendo admirablemente para caldear
aquella retaguardia nacional eficacísima. En el sur, Pemán
tam
bién copiaba del natural, y magistralmente, pero, en general, más
entretenía que estimulaba; dejando aparte su gran Poema de la
bestia y el ángel, en alguna ocasión hacía llorar más de risa que
de emoción, como estos otros.
Se produjo después un largo silencio, largo y malo, mortal.
Con
algunas excepciones, como el libro Así eran nuestros muer
tos,
del capellán del Tercio de Montserrat, Mosén Salvador
Nonell.
Y, ahora, cuando muchos españoles no aciertan aún a enten
der por qué oscuros senderos hemos bajado de la cumbre al abis
mo, sale a galope a la palestra Nagore Yárnoz con
el estandarte
de entonces, plasmado en su libro,
En la 1: de Navarra (Dyrsa,
1986). Como roda intuición genial
ha tenido enseguida un con
tinuador, Sanjuán. Nadie mejor que Nagore para prologar el li
bro de Sanjuán; éste ha enaltecido el libro En la 1." de Navarra
al rango de cabeza de serie por la semejanza de estilo que el
suyo tiene con él. De una serie oportunísima, cuyo principal pro
pósito es no solo informar, ni únicamente entretener, sino, sobre
todo, mover. Con ellos se relanza el estilo vivificador de López
Sanz y de García Serrano, aquí y ahora. «Nagore-Sanjuán» for-
1161
Fundaci\363n Speiro
INFORMACION BIBLIOGRAFICA
man ya una pieza en nuestra literatura. ¿Aparecerán nuevos es•
labones en esta incipiente cadena? ¡Dios nos lo conceda!
Sosegadas las emociones de una
primera lectura, dos situa
ciones de las reflejadas en este libro quiero
seiíalar: el desbara-.
· juste de las fuerzas nacionales en las primeras semanas y· aun
meses; 'leído ahora con ojos técnicos, es-de risa; pero, con todo
y con eso, así se ganó la guerra. Y la situación de profunda re
ligiosidad que lo impreganaba todo, testimonio para .las nuevas
g,;neraciones de que aquello -fue una · C=ada. Parece mentira
que aquellas evidencias, entonces
vulgares, resulten hoy testimo
nios
codiciables; ,pero así estamos.
M.S. e
Ü62
Fundaci\363n Speiro