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Número 493-494

Serie XLIX

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¿Unión o unidad?

Los pasados días 26 y 27 de marzo ha tenido lugar el "XLI Incontro Tradizionalista di Civitella del Tronto". Fue en 1970 cuando el profesor Paolo Caucci von Saucken, que había conocido a Francisco Elías de Tejada, tuvo la idea de reunir a los tradicionalistas del viejo Reino de Nápoles en un encuentro al modo de Montejurra. Se eligió para ello la fortaleza de Civitella del Tronto, de época hispánica, y en la que tanto en 1806 como en 1861 se defendió la tradición católica contra el napoleonismo y el liberalismo risorgimental. Desde entonces, y sin discontinuidad alguna, ha seguido celebrándose. El pasado año, en el cuadragrésimo aniversario, al que no quiso faltar S.A.R. Don Sixto Enrique de Borbón, se recordaron los hitos principales de la trayectoria y, en particular, a los amigos fallecidos. Así, Silvio Vitale (fundador y director de L'Alfiere), los profesores Elías de Tejada y Giovanni Allegra, Pino Tosca, etc. Coincidiendo este año con el aniversario de los 150 años de la unidad de Italia, naturalmente ha sido el objeto de la edición, bajo el lema "¿Unión o unidad?". En la convocatoria, firmada en nombre del comité organizador por el doctor Maurizio Di Giovine, se decía: "No estamos animados de ningún protagonismo porque creemos en el testimonio personal que en Civitella del Tronto encuentra el signo tangible de la resistencia a todo lo que quiere destruir nuestra Tradición católica, federativa y misionera".

En la tarde del día 26, en el Hotel Zunica, comenzó la parte intelectual. Tomó la palabra en primer lugar el profesor Caucci, presidente del comité organizador, quien explicó el significado del empeño de Civitella y el sentido de la reunión de este año. Tras la presentación de una serie de publicaciones por Giuseppe Catenacci, presidente de la Asociación de Antiguos Alumnos de "La Nunziatella" (el Colegio militar del Reino borbónico de las Dos Sicilias), y del libro de Fulvio d'Amore sobre el general Borges (carlista catalán al servicio de Francisco II que fue fusilado por los piamonteses en Tagliacozzo el 8 de diciembre de 1861), siguieron los profesores Giovanni Turco (que se ocupó de las patrias reales y de la nación ideológica), Miguel Ayuso (que abordó la ambigüedad del federalismo) y Guido Vignelli (que examinó el agotamiento de la Italia laicista y la esperanza de reconstrucción de las Italias tradicionales). El magistrado Edoardo Vitale, director de L'Alfiere, ilustró la distinción entre la concepción tradicional y la liberal de la propiedad, con referencia a la monarquía napolitana. Y cerró el acto el doctor Di Giovine, que presentó la interpretación tradicionalista del proceso unitario.

El domingo 27, se depositó en primer lugar una corona de flores ante el monumento a Mateo Wade, defensor de la fortaleza en 1806, con la correspondiente conmemoración, este año por el doctor Pasquale Salustto, tocado con una boina roja. Luego, ya en la fortaleza, y alzadas las banderas, el doctor Gi ovanni Salemi, hizo la conmemoración del soldado napolitano. La Santa Misa, celebrada como siempre en el rito inmemorial de la Iglesia, este año por un padre franciscano de la Inmaculada al estar ausente en Estados Unidos monseñor Ignacio Barreiro, habitual celebrante, se ofreció por los mártires de la tradición.

M. ANAUT