Volver
  • Índice

Ante la V Reunión de amigos de la Ciudad Católica

V REUNION DE AMIGOS ESP.AROLES DE LA CIUDAD
CATOLICA, A CELEBRAR
EN EL MONASTERIO
DE SANTA MARIA
DEL PAULAR LOS DIAS
29, 30 Y
31 DE OCTUBRE
SPEIRO) atendiendo a los deseos de suscriptores a VItRBO, ami­
gos de
la Ciudad Católica, se ocupa de la organización de la
V Reunión de amigos
españoles de la Ciudad Católica en el mis­
mo marco en que se celebró la I reunión y bajo la misma advo­
cación de Santa María del Paular.
Se ha preferido
dar a la próxima rennión carácter de reflexión
acerca de
la labor a hacer para la mayor gloria de Dios y el rei­
nado social de Cristo
Rey, procurando un mundo mejor rea!ista­
mente, sin sueños utópicos. Fruto esperado debe ser un mayor
impulso en la formación y acción doctrinal para la difusión de la
Verdad.
La reunión girará en torno de dos temas doctrinales funda­
mentales, de exposiciones prráctica-s acerca de la labor de los se­
glares a la luz del Concilio y del trabajo de formación doctrinal en
~qu~po, con varios forum sobre temas tan actuales como los de la
fanúlia, la educación, estudiantes, la empresa, la agricultura. Es­
peramos de J ean Ousset que nos hable de la promoción del laicado
y mantenga un forum con los sacerdotes asistentes. También con­
tamos con que Michel Creuzet insista so.bre el modo de
trabajar
en grupo. Los dos temas doctrinales serán expuestos cada uno
por un equipo de ponentes, con el siguiente desarrollo :
A) Deber ae conoce,;, vimr y difundw la Verdaxl.
Juan XXIII, en su mensaje de. Navidad de 1960, nos exhortó
amorosamente a los cristianos a P'fflsarr, honrar, decir y practicar
la Verdad:
"Ante todo, pues, se ha de pensar con verdad, tener ideas cla-
. ras sobre las grandes realidades divinas y humanas, de la reden­
ción y de la Iglesia, de
la moral y del derecho, de la filosofía y del
arte, tener ideas justas, o procurar formarse en e11as concienzu­
dament.e y con lealtad."
507
Fundaci\363n Speiro

"Honrar la verdad es una invitación a ser un ejemplo más
luminoso en todos los sectores
de la vida individual, familiar, pro­
fesional y social. La verdad nos hace libres. Ennoblece a quien la
profesa abiertamente y sin respeto humano. ¿ Por qué, pues, terter
miedo de honrarla y de hacerla respetar?" .

. .
"Es culpable no
solamente quien desfigura deliberadamente la verdad, sino que lo
es también aquel que, :por no aparecer completo y moderno, la
traiciona
por la ambigüedad de su actitud." . . . . . . ·
.

. .
"decir la verdad, ¿ no es la admonición de la madre que
pone en guardia a su hijo contra las mentiras, la primera es­
cuela de verdad que crea hábito, costumbre adquirida desde los
primeros años, que se convierte en una segunda naturaleza y pre­
para al hombre de honor, al cristiano perfecto, a la palabra pronta
y franca y, si es necesario, al valor del martirio y del confesor
de la fe? Tal es el testimonio que el Dios de la verdad pide
a cada uno de sus hijos". . . . . .
"Por último, practicar la verdad; ella es la luz en la que toda
persona debe sumergirse
y la que da el valor a cada una de las
acciones de la vida. Es la caridad que mueve a ejercer el apos­
tolado de la verdad para conocer, para defender sus derechos, para
formar las almas --especialmente las almas sinceras y generosas
de la juventud'-, a dejarse impregnar en ella hasta las más ín­
timas fibras."
Primero, pues, hay que
"conocer: ¿ Qué es la Verdad?
Dios nos la da a conocer por dos vías : la Revelación y el
orden ínsito en su obra creadora. Así nos lo expresó Pío XII
en su Racliomensaje de 1 de junio de 1941, insistiendo en el
"orden inmutable que Dios Creador y Redentor ha manifestado
por medio del Derecho natural y de· la Revelación", "porque las
enseñanzas del Derecho natural y las verdades de la Revelación
se derivan., ;por diversos caminos, como dos arroyos de aguas no
contrarias, sino acordes,
de. la misma fuente divina ... ".
La verdad religiosa y la verdad nat11ral serán estudiadas por
los dos .. primeros ponentes de ese equipo.
Pero no hasta conocer la verdad, hay que vivirla. Para ello,
además de las virtudes teologales necesitamos fortificar nuestras
virtudes cardinales.
El profesor de la Universidad de Lieja, Marce! de Corte, en
su libro L'homm.e contre lui m:Bme, ha hecho notar que mien­
fras hoy
se nos ofrecen como modelos para guiarnos en nuestra
obra temporal ideologías abstractas, antes se había propuesto siem­
pre como modelo humano
un tipo de hombre virtuosamente com-
508
Fundaci\363n Speiro

pleto, · que reunía en su grado equilfüradaménte máximo las vir­
tudes
'cardinales ·-prudencia, justicia, · fortaleza · y . tein¡i,lanza.
Y no basta conocer y vivir la verdad, debemos, difúhdirla( Es
un· deber de caridad; y en lo referente al otden politicó y: social
Pfo
XI lo calificó de caridad política. Oíd: "el terren_o-;de la
política, que mira los
intereses de la sociedad toda enterá" --dijo
al dirigirse en 1927 a la Federación universitaria italiana-, "es
campo de la más vasta caridad, de la caridad· po!íticá; 'deL·que se
puede decir que ninguno otrO le es superior, salvo · el dé la re-
ligión". · · ·
No olvidemos ·que: "La doctrina sociál de la Iglesia -i:omo
dijo Pío XII eh su ·discurso a la Acción católica italiana-es
clara en todos los aspectos; es ob1igatoria, nadie puede separáfse sfü
peligro para lafe y el orden móral". Por eso insistió Juan XXIII
en M esla doctrina sea conocida, asimilada, llevada a la realidad social
en· las formas y en la· medida que Iás circunstancias permiten o
reclamen: función ardua ºpero nobilísima. Con árdiente-llamamien•
to invitamos a cum¡plir esta fllnción no sólo a nuestros herinanos
e hijos'esparcidos por todo 'el muhdo, sino tambien a todos. los
hbmbres de buena voluntad."
BY Pimtos ·bás;cos pwc, orientar la acción de lás segfá,-e-s p¡,,...,,,¡¡
: mundo mejor: ·. · · ' .· · · . ·. ; •. ··
Se céntrarán en el estudio dé los siguientes· plliltos, · Teflexio~
nando en toTno a" los criterios que a continüaC.ión ·esqtíematizamos·:
l. Ortodozia en la: fe.
E:reerrcia en un solo Dios persohál Creador y Señor del Cielo
Y· 'de 18.-,Tierra; ··no en 'un dios pa'.nteístaffiente' cori.fuúdido etJ ·el
COsmos y ell Su Hijci, engendrad() Y
n ·creado, Hijo ·encarná-do
de Maria Virgen; no en el Cristo-Omega de la· Revolución.·
II. Espiritualidad y' aéci6n consecuente de-tos ség/oJres en el
mundo.
Su base es nuestro principio y fundamento.
Hemos sido creados pmra alabar, honrarr y servir a Dios, nues­
tro Señor, y por este medio salwar nuestra alma. :· · .. ·
Por la cual todo se debe hallar ordenado a dichcdin "en fam,to
que ... '-', ~'1110 más' 'que .. ;-" para alcanzar por eiiC.ima ele-todo .di ..
cho fin· "Busc«d prí,mero éf;reino de· Dios y su Iusticw y ta tk,nás

Fundaci\363n Speiro

se os dc,rá por añadidura" (Mateo 6-33). Hay un prius sobrena­
tural.
El Cielo está en el más allá que hemos de garu,r acá.
La religión no está ordenada primariamente para lograr aquí
un mundo mejor ; sino para hotlrar y servir a Dios · y gánar el
otro mundo, para lo cual, obr8.ndo todos para ll.1.ere·cerlo, lograría_
mos acá hacer un mundo mejo~. ·No a la i:tlversa.
III. Método racional para conocer las verdades naturales.
El hombre no es nna suma de facultades y de libertades abs­
tractas y deductivamente determinadas; sino un ser vivo dotado de
un alme. que tiende haéia el cielo, pero que está encamado én un
cuerpo
material y marte.!, enraizado en el mundo que le rodéa.
Por ella:, no podemos conocer .al hombre plenamente Si no es si­
tuándolo alli doride realmente está en cada caso. Sin perder de
vista ninguno de sus aspectos. Sin olvidarnos de su destino, dé su
pecado original y de su redención.· Ni de sus circunstancias fa­
miliares, de sti medio geográfico y soCial, de sus creencias religio­
sas, de sus cori.ocimientos humanos, del momento histórico en
que vive.
Por eso sólo con el llamado realismo moderado, basado en la
contemplación total
de la naturaleza, e inserto en ella, del hombre:
es decir, del orden ínsito por Dios en la Creación -que P!o XII
calificó como de una segunda revelación-, comprendiendo y dis­
tinguiendo
lo particular ylo universal, lo permanente y lo mudable,
lo esencial y lo accidental, lo que es orden y lo que es desorden
podrá dotarnos de una clara visión
de los problemas del hombre
en este mundo
.. Los cuales perdemos de vista o los deformamos
con los ."idealismos Utópicos, y las construcciones abstractas.
IV. Derecho.
El Derecho es anterior al Estado y no es un producto de su
voluntad. Su base es la Justicia general o social, deducida del
orden natural y ordenada al bien común, visto en toda su ampli­
tud, en todas sus facetas .y aspectos, en el presente y en sus con­
secuencias futuras.
El Estado debe velar por el cumplimiento de las conclusiones
deducidas· de este orden y por el de las determinociones que esta-
blezca para
completarlo. ·
V. Política,
· .El hombre vive en una sociedad, encarnada en. su patria, en
su nación y jurídicamente estructurado en un Estado formado no
pór una ~ de individuos, sino comunitaria.menté organizado en
5Ht
Fundaci\363n Speiro

cuerpos imtermedios y en el más básico que es la familia. Cuerpos
de carácter natural que pueden ser comunitarios o asociativos que
se vau integrando de abajo a arriba -no a la inversa-para
ayudarle en la realización de sus fines.
La actuación del Estado,
respecto de estos cuerpos,
por tauto, deben supeditarse rigurosa­
mente al llamado
principio de subsidmritlad.
VJ. Separaci6n del "poder po/íli,co" y el "poder económ.co".
Basado éste en la pt"opiedad privada, es la única garantía. de
la libertad y del
progreso social, y la única fórmula para garanti­
zar
el principio de subsidisridad, pues de lo contrario el Estado,
asumiendo totalitariamente todos los poderes, no tendrá más lí­
mites que los dimanantes de su propia voluntad frente a las perso­
nas
y a todos los demás cuerpos sociales que políticamente con­
forme.
511
Fundaci\363n Speiro