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Número 74
Serie VIII
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Autores
1969
¿Enseñanza uniformada o diversificada? Un informe sobre el «Libro blanco»
¿ENSEl',ANZA UNIFORM,\DA. O DIVERSIFICADA?
UN INFORME SOBRE EL "LIBRO BLANCO"
A continuación, y por su gran interés, reproducimos el texto
de informe emitido por unanimidad por el claustro de profe
sores de un Instituto de Madrid, sumándose en lo fundamental
al redactado por la Asociación Provincial de Catedráticos de
Enseñanza Media de Madrid.
"l. Educación general básica.
1) Como profesionales de la Enseñanza y conscientes de las
necesidades culturales de
la, nación, expresamos nuestro TOTAI.
ACUERDO con el ideal munifiesto en el "Libro Blanco" de EXTENDER
y ELEVAR -como exige la actual evolución de la sociedad- la
EDUCACIÓN GENERAL, BÁSICA Y GRATUITA.
2) Nos OPONEMOS., sin embargo, a ta. total UNIFICACIÓN de
la enseñanza
hasta los
catorce años
con la. ID~l'IFICACI.ÓN que
supone
-y el englobamiento en ella-del hoy llamado BACHI
LLERATO ELEMENTAL. Y ello porque creemos acarrearía desastro
sas consecuencias, que -desde sus dos p·osibles p·erspectivas
serían las siguientes:
a)
Desde el punto de
vista de los alumnos que hoy
cursan
el
Bachillerato Elemiental y que se preparan para estudios ulte
riores
constituiría un automátfro DESCENSO mt NIVEL y de capa
cidad de
estudio y de
comprensión intelectual. Puesto que esa
Enseñanza
GENERAL BÁSICA ha de ser comunicada a la TOTALIDAD
de los ciudadanos hasta. los catorce años, su contenido deberá
ser útil1 asequible y asín1~lable por todas ellos1 incluso por una
inmiensa mayoría que no ha de util-kmr .posteriormente técnicas
ni actitudes
mentales propias del estudwnte superior.
b)
S(
por el contrario1 se pretendiera nrantener el conte
nido
y orientación actual del Bachillerato Elemental, una immensa
mayoría
del
alumin~o se
vería
so-metida a ij'n aprendizaje estéril,
inadaptado a su futura
formu de vida y acaso
inasequible, con
una costosa
y perjudicial pérdida de energías. Estudíar latín o
ma.fenzáticas pura..s es
para el
primero de
esos alumnados
una
necesidad mruy anteri'.or a los catorce años1• p·ara el segundo, en·
cambio,
sería algo superfluo
y perturbador.
e) En consecuencia, consideramos de todo punto necesaria
una DIVERSIFICACIÓN DE LAS ENSEÑANZAS a partir del llam'ado
sequndo ciclo de la Enseñanza Básica, esto es, a la edad en que
hoy comknza el
Bachillerato
Elen,,ental. Tal
diferenciación ha de
re/izarse desde
uni punto de vista funcional: Se tratará de orien
taciones diversas: un w..1a.tiz más especulativo en el Bachill'era.to
elemiental com10
preparación
e
iniciación a estudios ulteriores;
una orientación mili práctica y enciclopédica; para la Enseñanza
General Básica, dirigida sobre todo a la Iniciación Profesional.
d) Estas considerQICiones no implican p,or nuestra parte' el
deseo de una pre111a,tura orientación del alumnado por mot,ml's
casi siempre econ,ómticos, riesgos que, si".n duda, preümde eliminarr
con esa u.nifica.ci6n el "Libro Blanco". Nos mueve, por el contrario,
un criterio realista y la necesidad vmif)erwsa de aprovechar hasta
Fundaci\363n Speiro
el máúmo las pD'sibilidades y esfuerzos del prus. De ahí que la
evitación -en la medida de lo posible- de esa diferenciación
económica no deba buscarse p,or ese camino unificatorio) sino
n11ediante:
Un sistema flexible de convalidación de ambas enseñanzas
(General o Básica y Ba.hillerato Elemental).
Un
amplio sistema de becas
y ayudas que facilite el acceso
a los estudios de los económricamt1ente débiles, sistema en
el que se ha (lll}anzado considerablemente durante los Qtfios
últimos.
II. Bachillerato unificado y polivalente.
1) La mism"' problemática vuelve a plantearse -más agra
vada-----en este niwel de la Enseiianza. Al igual que en la Ense
ñanza General Básica nos adher'D'l11.1os al ideal de que el n:ayor
núm.era posible de españoles tengan, acceso a los estudios de
Grado
Medio.
2)
Pero esta
misma generalización de
los estudios M
ediO's
nos obliga a OPONERNOS firm1emente a la UNIFICACIÓN DEL BACHI
LLSRA'I'O, y por las mismas razones de aprovechamiento de ener
gias y de emtación de un descenso del nivel cultural del país. s; se
considera que, según las previsiones del t'Libro Blanco'', un
70 por 100 del alumnado accedería a estos estudios ( idea/mv,nte
un
100 por 100),
resuUa absolutamente nece'saría una diversifica
áón funcional de esta Enseñanza, Media, bajo el mismlO criterio
que en la General o Básica: un BACHII,I,F,RATO GENF,RAI, -que
puede ser
fin en sí mismo y válido para multitud de funciones-,
y un BACHII,LERATO UNIVliRSITARIO orientado por su con,teni-do y
métodos a los estudios superiores y, por ello m-isma, más teoré
tico o
esp'f!culativo. Tal vez conviniera elíminar en esta última
modalidad del
Bachillerato la
actual distinción
de Letras
y
Ciencias.
3) De nueV'o ha de insistirse en que el fácil acceso a estos
estudios
de los peor dotados económicamente ha
de buscarse no
en su nwelación, sino en un amplio sistema de ayudas y en la
flexible
posibilidad de conwlidaciones po:ra pasar
de una
a otra
m,odalidad de
Bachillerato.
III. Enseñanza oficial y enseñanza privada.
Las gr{!,yes males que la nivelación de la, Enseña.nz(ll en amibos
qrados -Básico y Medio- acarrearían parecen tener camio úni
ca justificadón {a eliminación de
una prematura
discriminación
de orig'en económico.
Sin embargo, esa mrismrz supuesta ventaja
aparece miáls tarde elim~:nada en el artículo 127, hacia el que de
bemos
expresar nuestra
más
enérgica, repulsa. Al
ofrocerse
en él
a
los C
entro-s Privados
la
posibi)lidad de
organizar sus
enseñanzas,
ellos serían los úni:cos en
poder subsanar
--aunque fu.era tardía
mente-las deficiencias
de una
enseñanza masificada e i"miparttr
una más
adecuada parfJJ los
futuros
estudios Universitarios.
Pero
tales Centros serían los únicos inasequibles
económicamente para
!JYandes sectores
de población, con
lo cual se vería defraudado e'l
único objetiva al que todo fo demás se sacrifica.
Fundaci\363n Speiro
IV. Descenso del nivel del profesorado.
Consecuen,i,a, inevitable de /,a aplicac;ón del "Libro B/,anco"
sería no sólo el descenso del nivel del alumnado, sino también
-el del profesorado. Las enseñanzas de la segunda etapa de la
Educación General Básica -en la. que se asum1e el actual Bachi
cerato Elementalr-----serían impartidas por Maestros de Enseñan
za Pritmaria, por cursillistas habilitados entre ellos, o, en el m.e
jor
de
los
casos, por graduados universitarios
sin especializar
(con
sólo el
primer
ciclo de la Ensdümza Superior). Aun sin
tener en cuent" el grave problema. de introducir en la Uniwersic
dad
un
alurmrnado que
no aspira
ni se
interesa. por una especiali
zación, resulta evidente que los profesores del futuro alumnado
superior durante los once y catvrce años, carecerían de un profe
sorado con las técnicas, conocimiento específicos y apertura in
telectual, que exige el ejercicio docente en tal preparación. El
deterioro de la
calidad del
profesorado
sería así grl1!VÍsimo y sus
repercusiones
imprevisibles. Todo ello presenta ciertas apariencias
de "alfabetización" de un país subdesarrollado más que de re
forma y elevación de la enseñanza en un país culto. (Vid. art. 23).
V. Estabilidad de los planes.
Sería mruy de desear que el nuevo Plan General de Educación
fuera
atentamiente meditado y rectificado en cuanto aparezca de
fectuoso o
i.nconvenjente, pera también que hasta
el
momento de
su final imiplantacíón no se introdujeran. nuevas reformas transi
torias en los planes de Bachillerato por la gran perturbación es
colar
y
administrativa que
todo
cambio ocasiona.
VI. Familia y educación.
La reforma propuesta por el ''Libro Blanco" parece, pues,
sobre
costosísima, previsib,lem,ente perjudicial para
el nivel
cul
tural tanto del alumnado orientado a estudios superiores c&mio
p,ara el del profesorado. Sin embargo, tiende claram.ente a un fin:
colocar a todos los alumnos de la nación en un mismo punto· de
instrucción tanto al término de la Enseñanza Básica ( catorce
años) com,o al de la m1edia (diecisiete-dieciocho años). Parece
que tal designio se orienta
-implícitamente-a
que el Estado
pu,eda en
tales
mom,entos de
la vida escolar realizar inmensos
concursos o pruebru psicométricas que designen quiénes deben
continuar estudiando y quiénes no, así como la esp-ecialización
en
los estudios superiores.
La
iniciativa en
el destino del alumna
do
-y previsiblem1ente la financiación de éste- pasarían ·así a
control del Estado sustrayéndolo por entero a la familia y su ama
biente, a
la patria potestad. Se tratarla, por lo tanto, de una pla,.
taforma para la futura socialización integral de la Educación.
Esta previsible evolución de cuanto en estructura y en espí
ritu sugiere
el ''Libro
Blanco" nos harfa oponernos
a
él) aún más
que como profesionales de la Enseñanza, coma padres de familia,
como católicos y camio· espa,-ioles."'
Fundaci\363n Speiro
UN INFORME SOBRE EL "LIBRO BLANCO"
A continuación, y por su gran interés, reproducimos el texto
de informe emitido por unanimidad por el claustro de profe
sores de un Instituto de Madrid, sumándose en lo fundamental
al redactado por la Asociación Provincial de Catedráticos de
Enseñanza Media de Madrid.
"l. Educación general básica.
1) Como profesionales de la Enseñanza y conscientes de las
necesidades culturales de
la, nación, expresamos nuestro TOTAI.
ACUERDO con el ideal munifiesto en el "Libro Blanco" de EXTENDER
y ELEVAR -como exige la actual evolución de la sociedad- la
EDUCACIÓN GENERAL, BÁSICA Y GRATUITA.
2) Nos OPONEMOS., sin embargo, a ta. total UNIFICACIÓN de
la enseñanza
hasta los
catorce años
con la. ID~l'IFICACI.ÓN que
supone
-y el englobamiento en ella-del hoy llamado BACHI
LLERATO ELEMENTAL. Y ello porque creemos acarrearía desastro
sas consecuencias, que -desde sus dos p·osibles p·erspectivas
serían las siguientes:
a)
Desde el punto de
vista de los alumnos que hoy
cursan
el
Bachillerato Elemiental y que se preparan para estudios ulte
riores
constituiría un automátfro DESCENSO mt NIVEL y de capa
cidad de
estudio y de
comprensión intelectual. Puesto que esa
Enseñanza
GENERAL BÁSICA ha de ser comunicada a la TOTALIDAD
de los ciudadanos hasta. los catorce años, su contenido deberá
ser útil1 asequible y asín1~lable por todas ellos1 incluso por una
inmiensa mayoría que no ha de util-kmr .posteriormente técnicas
ni actitudes
mentales propias del estudwnte superior.
b)
S(
por el contrario1 se pretendiera nrantener el conte
nido
y orientación actual del Bachillerato Elemental, una immensa
mayoría
del
alumin~o se
vería
so-metida a ij'n aprendizaje estéril,
inadaptado a su futura
formu de vida y acaso
inasequible, con
una costosa
y perjudicial pérdida de energías. Estudíar latín o
ma.fenzáticas pura..s es
para el
primero de
esos alumnados
una
necesidad mruy anteri'.or a los catorce años1• p·ara el segundo, en·
cambio,
sería algo superfluo
y perturbador.
e) En consecuencia, consideramos de todo punto necesaria
una DIVERSIFICACIÓN DE LAS ENSEÑANZAS a partir del llam'ado
sequndo ciclo de la Enseñanza Básica, esto es, a la edad en que
hoy comknza el
Bachillerato
Elen,,ental. Tal
diferenciación ha de
re/izarse desde
uni punto de vista funcional: Se tratará de orien
taciones diversas: un w..1a.tiz más especulativo en el Bachill'era.to
elemiental com10
preparación
e
iniciación a estudios ulteriores;
una orientación mili práctica y enciclopédica; para la Enseñanza
General Básica, dirigida sobre todo a la Iniciación Profesional.
d) Estas considerQICiones no implican p,or nuestra parte' el
deseo de una pre111a,tura orientación del alumnado por mot,ml's
casi siempre econ,ómticos, riesgos que, si".n duda, preümde eliminarr
con esa u.nifica.ci6n el "Libro Blanco". Nos mueve, por el contrario,
un criterio realista y la necesidad vmif)erwsa de aprovechar hasta
Fundaci\363n Speiro
el máúmo las pD'sibilidades y esfuerzos del prus. De ahí que la
evitación -en la medida de lo posible- de esa diferenciación
económica no deba buscarse p,or ese camino unificatorio) sino
n11ediante:
Un sistema flexible de convalidación de ambas enseñanzas
(General o Básica y Ba.hillerato Elemental).
Un
amplio sistema de becas
y ayudas que facilite el acceso
a los estudios de los económricamt1ente débiles, sistema en
el que se ha (lll}anzado considerablemente durante los Qtfios
últimos.
II. Bachillerato unificado y polivalente.
1) La mism"' problemática vuelve a plantearse -más agra
vada-----en este niwel de la Enseiianza. Al igual que en la Ense
ñanza General Básica nos adher'D'l11.1os al ideal de que el n:ayor
núm.era posible de españoles tengan, acceso a los estudios de
Grado
Medio.
2)
Pero esta
misma generalización de
los estudios M
ediO's
nos obliga a OPONERNOS firm1emente a la UNIFICACIÓN DEL BACHI
LLSRA'I'O, y por las mismas razones de aprovechamiento de ener
gias y de emtación de un descenso del nivel cultural del país. s; se
considera que, según las previsiones del t'Libro Blanco'', un
70 por 100 del alumnado accedería a estos estudios ( idea/mv,nte
un
100 por 100),
resuUa absolutamente nece'saría una diversifica
áón funcional de esta Enseñanza, Media, bajo el mismlO criterio
que en la General o Básica: un BACHII,I,F,RATO GENF,RAI, -que
puede ser
fin en sí mismo y válido para multitud de funciones-,
y un BACHII,LERATO UNIVliRSITARIO orientado por su con,teni-do y
métodos a los estudios superiores y, por ello m-isma, más teoré
tico o
esp'f!culativo. Tal vez conviniera elíminar en esta última
modalidad del
Bachillerato la
actual distinción
de Letras
y
Ciencias.
3) De nueV'o ha de insistirse en que el fácil acceso a estos
estudios
de los peor dotados económicamente ha
de buscarse no
en su nwelación, sino en un amplio sistema de ayudas y en la
flexible
posibilidad de conwlidaciones po:ra pasar
de una
a otra
m,odalidad de
Bachillerato.
III. Enseñanza oficial y enseñanza privada.
Las gr{!,yes males que la nivelación de la, Enseña.nz(ll en amibos
qrados -Básico y Medio- acarrearían parecen tener camio úni
ca justificadón {a eliminación de
una prematura
discriminación
de orig'en económico.
Sin embargo, esa mrismrz supuesta ventaja
aparece miáls tarde elim~:nada en el artículo 127, hacia el que de
bemos
expresar nuestra
más
enérgica, repulsa. Al
ofrocerse
en él
a
los C
entro-s Privados
la
posibi)lidad de
organizar sus
enseñanzas,
ellos serían los úni:cos en
poder subsanar
--aunque fu.era tardía
mente-las deficiencias
de una
enseñanza masificada e i"miparttr
una más
adecuada parfJJ los
futuros
estudios Universitarios.
Pero
tales Centros serían los únicos inasequibles
económicamente para
!JYandes sectores
de población, con
lo cual se vería defraudado e'l
único objetiva al que todo fo demás se sacrifica.
Fundaci\363n Speiro
IV. Descenso del nivel del profesorado.
Consecuen,i,a, inevitable de /,a aplicac;ón del "Libro B/,anco"
sería no sólo el descenso del nivel del alumnado, sino también
-el del profesorado. Las enseñanzas de la segunda etapa de la
Educación General Básica -en la. que se asum1e el actual Bachi
cerato Elementalr-----serían impartidas por Maestros de Enseñan
za Pritmaria, por cursillistas habilitados entre ellos, o, en el m.e
jor
de
los
casos, por graduados universitarios
sin especializar
(con
sólo el
primer
ciclo de la Ensdümza Superior). Aun sin
tener en cuent" el grave problema. de introducir en la Uniwersic
dad
un
alurmrnado que
no aspira
ni se
interesa. por una especiali
zación, resulta evidente que los profesores del futuro alumnado
superior durante los once y catvrce años, carecerían de un profe
sorado con las técnicas, conocimiento específicos y apertura in
telectual, que exige el ejercicio docente en tal preparación. El
deterioro de la
calidad del
profesorado
sería así grl1!VÍsimo y sus
repercusiones
imprevisibles. Todo ello presenta ciertas apariencias
de "alfabetización" de un país subdesarrollado más que de re
forma y elevación de la enseñanza en un país culto. (Vid. art. 23).
V. Estabilidad de los planes.
Sería mruy de desear que el nuevo Plan General de Educación
fuera
atentamiente meditado y rectificado en cuanto aparezca de
fectuoso o
i.nconvenjente, pera también que hasta
el
momento de
su final imiplantacíón no se introdujeran. nuevas reformas transi
torias en los planes de Bachillerato por la gran perturbación es
colar
y
administrativa que
todo
cambio ocasiona.
VI. Familia y educación.
La reforma propuesta por el ''Libro Blanco" parece, pues,
sobre
costosísima, previsib,lem,ente perjudicial para
el nivel
cul
tural tanto del alumnado orientado a estudios superiores c&mio
p,ara el del profesorado. Sin embargo, tiende claram.ente a un fin:
colocar a todos los alumnos de la nación en un mismo punto· de
instrucción tanto al término de la Enseñanza Básica ( catorce
años) com,o al de la m1edia (diecisiete-dieciocho años). Parece
que tal designio se orienta
-implícitamente-a
que el Estado
pu,eda en
tales
mom,entos de
la vida escolar realizar inmensos
concursos o pruebru psicométricas que designen quiénes deben
continuar estudiando y quiénes no, así como la esp-ecialización
en
los estudios superiores.
La
iniciativa en
el destino del alumna
do
-y previsiblem1ente la financiación de éste- pasarían ·así a
control del Estado sustrayéndolo por entero a la familia y su ama
biente, a
la patria potestad. Se tratarla, por lo tanto, de una pla,.
taforma para la futura socialización integral de la Educación.
Esta previsible evolución de cuanto en estructura y en espí
ritu sugiere
el ''Libro
Blanco" nos harfa oponernos
a
él) aún más
que como profesionales de la Enseñanza, coma padres de familia,
como católicos y camio· espa,-ioles."'
Fundaci\363n Speiro