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Los «Forum» del día 30 de octubre. II. Sobre la enseñanza

II. SOBRE ENSEÑANZA
derse el coloquio a la totalidad del tema, y gracias a la interven­
ción de Javier Criado, -que con palabras muy concretas analizó
la misión del
padre en el seno de la familia, su obligación de
atender al deber formativo sin caer en pecado de omisión, no
dejando a aquellas Asociaciones lo que es deber primordial suyo,
impuesto
por su estado; no deben los padres abandonarse a su­
plencias inadmisibles
so pena de vaciarse de su deber fundamental.
El padre es la imagen de Dios, la personificación de Dios para los
hijos en
el doble plano natural y sobreoatural; es el Jefe reli­
gioso nato de la familia y no debe renunciar tal
jefatura en nadie,
ni
aun en su mujer, y su triple papel es de gobierno, magisterio
y santificación.
No es posible recoger aquí otras intervenciones de parecido
interés. Baste decir que durante
más de dos horas la atención de
los asisteotes estuvo plenamente entregada al coloquio, que llevó
a conclusiones interesantes y de evidente fruto
para todos.
J. L. G.A.
II. SOBRE ENSE~ANZA
En el Symposium sobre Enseñanza se trató de tres puntos
fundamentales, de los que fue Ponente, Rafael Gambra Ciudad.
Fue el 1.0 el fin u objeto de la Enseñanza. Hoy pedagogos
y educadores se ponen siempre de acuerdo en la fórmula de que
ese fin es
"la formación integral del ho:inbre". Esta expresión
es profundamente equivoca y deslizante en uno de sus sentidos.
Si
se dice con ella .que la enseñanza no debe ser puramente in­
formativa ni
aun sólo intelectual, sino que debe unir una moción
de la voluntad,
una educación del sentimiento, de la fe, etc., la
frase es acertada. Si
se significa, en cambio, que la formación
íntegra del hombre
ha de deberse a la enseñanza, la frase es
exagerada, inexacta y útil para la socialización del hombre.
La
formación del hombre es, ante todo, familiar y ambiental. Las
primeras convicciones y las primeras emociones y sentidos los
recibe el niño de
su medio, sobre todo familiar; sólo después la
enseñanza ampliará y ensanchará en extensión esa básica for­
mación, deseablemente en línea
de creencias y sentimientos con
ella.
La primera concepción entraña una visión racionalista del
ser humano y se presta a enfrentar
una enseñanza Horganizada"
y aun "estatificada" con la previa educación paterna y ambiert­
tal local.
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LOS "FORUM" DEL DIA 30 DE OCTUBRE
El 2.0 abordó el punto _ de enlace entre esa formación am­
biental (familiar-local-profesional) con la enseñanza en sus di­
versos· grados.
La enseñanza, para construir esa deseable prolon­
gación complementadora,
no debe concebirse de una manera asép­
tica
religiosamente (laicismo) ni en el plano cultural-local (cen­
tralismo uniformista de la enseñanza dirigida
y estatal). La
antigua escuela y la antigua Universidad eran corporaciones au­
tónomas y localizadas, con
su propia personalidad colectiva, sus
propios bienes y
una activa vida corporativa. Eran instituciones
en el sentido profundo del término, y no centros delegados de
una enseñanza uniforme y planificada. Este aspecto -y no las
vacuas asignáturas "políticas" o "cívicas11 de hoy-es el que
deparaba al
hombre universitario su inserción en una cultura
viva y la diferenciación de su formación, así como hábitos co­
munitarios de vida en común.
En España, la "libertad de en­
señanza" (en
el sentido de liberarla del monopolio estatal) co­
menzó
por la Enseñanza Media, mientras la Superior o Univer­
sitaria
se mantiene estatal y uniformista según el patrón de la
Universidad napoleónica.
Esto (el que universidades autónomas -
y con personalidad no puedan
por sí seleccionar o admitir los tí­
tulos de Bachiller de centros acreditados) ocasiona el colosal pro­
blema de los exámenes masivos, que consume gran parte
de las
energías nacionales.
El tercer punto versó sobre el llamado ideal de "Igualdad
de Oportunidades",
tan caro para toda mente socialista y acep­
tado hoy tanto en
Estados U nidos como en los países comunistas.
Este póncipio supone la anulación de la influencia familiar y del
medio
para la profesión o ,dedicación de cada ciudadaho. Supone
que todo alumno ha de recibir,
al menos hasta los 14 o 15
años· una enseñanza común y general, y que a partir de este
momento (mediante tests o métodos técnicos de control) decidirá
el
Estado sobre su profesión, facilitándole los medios para ella.
Esto destruye la noción de independencia,
de vinculación y de
continuidad familiar; hace descender el nivel universitario, por
cuanto se somete
-a los alumnos de grado superior a una previa
enseñanza masiva
y no preuniversitaria durante la mejor parte de
su vida estudiantil, y tiende a hacer de todo profesional un servidor
del Estado,
por él formado. Por último, es un germen de des­
contento y resentimiento ambientales,
por cuanto los oficios más
numerosos de la sociedad serán realizados
por fracasados de pues­
tos más altos, con conciencia de
su fracaso. El aspecto económico
que la decisión familiar en la futura dedicación del hijo puede en­
trañar, se resolvería normalmente con un amplio sistema de becas
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IlI. DE ESTUDIANTES
para alumnos sobresalientes, y la necesaria elevación de la· En­
señanza general en el país debería enfocarse con
una ampliación
y concentración de la Escuela primaria.
A la exposición de Gambra siguió
un animado coloquio, y se
concluyó recomendando la lectura del libro
de Michel Creuzet
"L'Enseignement", cuya traducción al castellano se está revi­
sando para su publicación por Speiro.
111. DE ESTUDIANTES
-Los ponentes: María Valle! y José Ignacio Otamendi empe­
za_ron por leer una breve exposición sobre la idea fundamental
en torno de la cual se quería que girara el coloquio:
"Deber individual de trabajar en conjunto o aisladamente,
según las circunstancias
para el conocimiento de la doctrina de
la Iglesia".
La exposición fue la siguiente:
"Vamos a centrar el terna de ·este foru-m en el deber que te­
"nemos de adquirir una formación, no sólo para nosotros, sino
"también para los demás.
''Para hacer la exposición de las ideas más generales vamos
"a recurrir, sobre todo, al decreto del Concilio Vaticano II sobre
"el apostolado de los seglares, y vamos a ir viendo la impor­
"tancia que este Concilio ha dado al trabajo de los sey;lares.
"El Concilio nos dice que cada vez se multiplican los errores
"gravísimos que pretenden destruir desde sus cimientos todo
el
"orden moral y la misma sociedad humana, y por tanto, exhorta
"a los seglares a que cumplan diligentemente su cometido con­
"forme a la mente de la Iglesia, aclarando los principios cris­
"tianos, defendiéndolos
y aplicándolos convenientemente a los
"problemas actuales (§ 6).
"Todos los seglares, de cualquier condición que sean, están
"llamados y obligados al apostolado individual, útil siempre, y
"en algunas circunstancias el único apto y posible (§ 16).
"Con el apostolado de la palabra, enteramente necesario al­
" gunas veces, los seglares anuncian a Cristo, explican su doctrina,
"la difunden, cada uno según sti condición y saber, y la profesan
"fielmente (§ 16).
"Según esto que dice el Concilio, se da por sentado que se
"conoce la doctrina, porque
para explicarla, para difundirla y
"para prÜfesarla, primero hay que conocerla.
"Comentando el trozo anterior vemos que se encierra un
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