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Número 451-452

Serie XLV

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La cuestión demográfica

LA CUESTIÓN DEMOGRÁFICA
POR
BERNARDINO MoNTEJANo'"'
"Los que queréinos un país ~ejor y sufrimos p~r quererlo
somos tenidos por elementos de confusión.y desconcierto como
huésped.es intrusos C}ue se presentan en la mitad de la comida".
EDUARDO Mill.EA, La bahía de/ silencio
l. UN TEMA CLAVE
Queremos plantear un tema clave para el futuro de la humanidad,
pero en, especial para los argentinos, desde la perspectiva de la Univer­
sidad de siempre,. en la cual se proponían para su estudio cuestiones.
Así, por ejemplo, cuestiones acerca del hombre, de la virtud, del
vicio, del derecho, de la justicia, etcétera,
y a partir de la propues­
ta, se examinaban los términos, se acotaba el problema, se indaga­
ba en la materia, se analizaban las opiniones anteriores de pensa­
dores importantes, se tenían en cuenta los argumentos de au·tori­
dad, se razonaba en torno al asunto y se sacaban conclusiones, que
a vece~ eran prOvisorias y abiertas a nuevas_ indagaciones (1).
(*} Se trata, como en casos anteriores, de una lección impartida por nuestro que­
rido colaborador, el profesor Bernard.ino Montejano, en la Facultad de Derecho de la
Universidad Católica Argentina, de Buenos Aires, durante el pasado curso, pues éste
ha
sido jubilado a la_fuerza (N. de la R).
(I) Nuestro planteo es el tradicional; en cambio, como una expresión más de la
decaden~ia universitaria, incluso en la presentación de los temas, hemos visto unos <;ar­
teles, en esta Facultad de Derecho de la Universidad Católica Argentina, que anuncian
la
Jornada "Contra la pena de muerte: el caso Saldaño", con los paneles "Marco jurídi ..
v,,.1,,,, núm. 450-451 (2007), 101-124. 101
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BERNARDINO MONTEJANO
Nos ocuparemos de la cuestión demogrdfica, del tema de la
población, de su pasado, de su presente
y de su futuro, con especial
énfasis en la Argentina, para lo cual serán útiles experiencias ajenas.
Como este tema es primordial, esencial, bdsico, no interesa, salvo con~
tadas excepciones, a nuestros periodistas ni a nuestros pollticos, por lo
general entretenidos en chismes, habladurías de conventillo, pre­
bendas, elecciones, reelecciones. A ellos nada de lo superficial les es
ajeno; si todo lo que haga a cuestiones de profundidad y de superviven­
cia nacional
Como bien escribe José María Alsina "la población es el refe­
rente básico del análisis sociológico".
El estado de la población junto
al movimiento poblacional
es punto de partida para conocer una
sociedad. En el andlisis de los factores explicativos de las variaciones
y tendencias de estos datos se nos pondrdn de manifiesto las tenden­
cias mds profundas de una sociedad, tendencias que nacen de las acti­
tudes
y conductas relacionadas con las realidades bdsicas de la vida y
la muerte y su vinculación con la vida familiar. Es decir, con lo que
co, ético y teológico" y "Experiencias testimoniales", con la intervención dél Pbro. Dr.
Alejandro Llorente,
y de los Dres. Carlos Mahiques y Juan Manuel Gramajo, en el pri­
mer caso,
y de la Sra. Lidia Guerrero (madre de Sáldaño} y el Ministro Horado Wamba,
ex cónsul general de
la Argentina en 1-louston, en el segundo. No se parte de la realidad
del problema hoy, para luego evaluarlo desde diversas perspectivas, teniendo en cuenta /aJ
Sagradas Escrituras y la ol,Jinión a lo largo de la historia de teólogos, filósofos y juristas, para
luego sacar -algunas conclusiones, si no se arranca áe un a priori condenatorio, sin efectuar
ninguna discriminación elemental como-la relativa a fa licitud y a la oportunidad Uri
encuentro fortuito con el ex alumno Gramajo, me sirvió para preguntarle: ¿Qué sabes
del
tema? Y recibir contundente respuesta: "Más que usted", Lo que me llevó a inte­
rrogarlo
en primer lugar acerca d~ las estadísticas de los últimos afios, para comprobar
su información
respecto a Ja actualidad de las condenas a muerte y de las conductas cas­
tigadas con ella en los distintos lugares del planeta. La respuesta fue
una confusa y
minuciosa exposición de detalles, sin relevancia en el todo, incluso críticas contra arbi­
trariedades ajenas a la pena capital,
la cual, como lo ensefia Santo Tomás, requiere auto­
ridad competente
y un juicio público, lo que me movió iL contestarle: "Me parece que
estás colando el mosquito y tragando el camello". Aquí el camello es China, que en el
2003 donde se aplicó la pena de muerte eri alrededor de cinco mil casos, con un impor­
tante incremento respecto a
2002, y el mosquito Estados Unidos, donde se la aplicó eil
alrededor de sesenta casos, con un importante descenso respecto al afio anterior,
Podemos agregar que según
Amnesry lnternational en Irán en el 2004 hubo 159 ejecu­
ciones
y que las mismas se aplican si el imputado alcanzó "legalmente" la pubertad:
quince afios para los varones
y nueve para-las mujeres.
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LA CUESTIÓN DEMOGRÁFICA
constituye la urc!imbre y al mismo tiempo origen y fuente de la
vida social (2).
La cuestión demográfica es muy amplia y era objeto de estudio,
como parte del programa de la materia "Introducción a la doctrina
social de la Iglesia", cuando
ésta existía en esta Facultad, en primer
afio, a cargo de laicos en casi su totalidad, hasta que fuera reempla­
zada por
el engendro hoy existente.
En ella se incluyen una serie de temas, que en su contexto se
comprenden mucho mejor, entre otros, los del aborto (3), del con-
(2) "El cambio so~iológlco en Espafia", ¼rbo, Speiro, Madrid, enero-febrero
1999, nros. 371-372, pág. 38.
(3) Es interesante transcribir la Declaración de · la Academia Nacional de
Medicina de Bue.nos Aires: .. La vida humana comienza con la focunáación, esto es
un hecho científico con demostración experimental ... En el momento de la fecun­
dación, la unión del pronúcleo femenino y masculino dan
lugar a un nuevo ser con
su individualidad cromosómica
y con la carga genética de sus progenitores. Si no
se interrumpe su evolución llegará al nacimiento. Como consecuencia; terminar deli­
beradamente con una vida humana incipiente es inaceptable. Representa un acto en
contra de la vida, pues la única misión de cualquier médico
es proteger y promo­
ver la vida humana, nunca desttuida, Esta convicción está
guardad:i.· en la cultura
mundial y
muy notablemente en el Juramento Hipocrático ... Con los adelantos tec­
noló-gicoS actuales -en reproducción humana para combatir la mortalidad perinatal,
salvando fetos y recién nacidos
enfermos, resulta absurdo la destrucción de un
embrión o feto. Se utiliza como argumento para promover el aborto, el crecimiento
desmedido. de la población mundial, que impedirla el desarrollo económico de los pue­
blos. Al respecto cabe señalar que los cdlculos no se han cumplido, y que el desarrollo
económico debe dirigirse a buscar nuevps canales de producción ... (La Nación, Buenos
Aires, 3/8/1994). Respecto
al argumento de que el aborto es un problema pertene­
ciente a la conciencia subjetiva de
la madre, el rnismo escamotea el fondo del pro­
blema:
el embrión es "otro", tan "otro" que puede residir como locatario en un
útero alquilado,
y lo que afecta a la vida ajena no puede ser reducido a me,ro asun­
to de libre decisión individual.
Ya se lee en los Salmos: "Mi embrión tus ojos lo velan;
en tu libro estdn escritos todos los días que han sido señalados, sin que aún exista uno
solo de ellos" (139, 16). Como escribe Ignacio Sánchez Cámara, es fin "del.Estado
la protección de la vida y la seguridad de las personas sin que importe su tamaño, su
edad o su capacidad mental... El poder de los Parlamentos es inmenso, pero no
alcanza hasta convertir el mal en bien, lo injusto en jwto. Si es lícito matar a un
ser
humano inocente, puede decirse que todo está permitido" ("El cuarto supues­
td', ABC, Maddd, 2219/98).
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BERNARDJNO MONTE/ANO
trol de la natalidad (4), de los preservativos (5), muy actuales aquí
y ahora.
(4) Con referencia a la mentalidad :antiriatalista, que no se agota en el móvil
egoísta
y consumista, -sefiala con agudeza José María Alsina: "En nuestrft cultura moder­
na Je /,a producido un ,cambio radical "5Pecto a la.transmisión de la vida. !,a prioridad está
en la VOiuntad y,' en todo caso, en la inteligencia. capaz de controlar' técnÍcamente el proce­
so reproductivo-, la capacidad generativa de la riaturaleza há pasado a segundo plano ...
Primero, se secularizó la vida del hombre, la generación ya no es procreación. Los hom­
b~ µo :Son los colaboradores de_pios en la formación de una nueva vida humana; pos­
teriormente también se le discute su carácter natural. La reproducción es fandamental­
mente
un proceso técnico-médico fruto exclusivo de una decisión humana incondicionada.
Desde esta perspectiva, los métodos contraconceptivos, la fecundación artificial e incluso el
aborto participan del mismo principio. Son actos en los que se manifiesta la voluntad huma­
na y el dominio técnico de los procesos reproductivos. De este modo se habrán superado los
riesgos que
se originan de dejar al amor, e_> a los sentimientbs o a la tendencia sexual de
la
·naturaleza, la iniciativa o la caüsa principal de una nueva vida. El resultado de esta
mentalidad
es la infertilidad. Este es el gran problema de la civilización occidental" en
el artículo citado en nota 2, pág. 51,
(5) El actual gobierno Te-parte preservativos como si faeran golosinas. Es curiosa la
coincidnu:ia con el entoncespresidente Carlos Menem y su ministro Avelino Porto quienes
en 199 I comenzaron la campaña de reparto gratuito-y masivo de condones para prevenir el
SIDA Menem defendía el empleo "voluntario" de los mismos, ya que "esto· en Europa
es común, es cosa de todos los días", proponiendo a la Iglesia Católica que "le ar.rime
al Gobie,:no su··propuesta de.cómo llevar a cabo-el acto sexual o los control~ para evi­
tar
el contagio" (La Nación, Bu_enos Aires, 24/5/91 ). Entendemos-que la propuesta de la
Igle#a _es la de #emp_re y que fae anticipada por los grandes-filósofo! paganos: el control de sí
mismo, el gobierno de la ra;ón sobre las pasiones y los .apetitos, el "ejercicio de la templanza
que llevard en algunos casos a la abstinf:!Zcia se.(Ud/. Así de simple. Pero esto lo púede enten­
der U'IJ hombre, no una bestia. En dicha oportunidad Porto precisó los-alcances de la
cam1:Jaña contra el SIDA y del gasto en preserv:i.tivos, cuya compra se hada por licita­
ción,
lo ql!e dio lugar a ui:ia carta pública del profesor titular de la Facultad de Medicina
de la
U_niVersidad de Buenos Aires, Dr. Caflos Ray quien, entre otras cosas, señalaba
que
"es Mucho niás importante que los fondos pa.ra adquirir preservativos se empleen
en
comprar y distribuir sueros para pesquisar el virus del SIDA en todas las sangres que
se transfunden en los hospitales", agregando que "no es misión del Ministerio de Salud
Pública repartir preservativos como ·tampoco lo serla abrir prostíbulos o repartir drogas", y
tras otras consideraciones de carácter educativo y sanitario, el profesor Ray puntualiza­
ba
al-Ministro Portó: "Desde· un punto de vista m:édico, jurídico-y constitucional
recuerdo
·que los impuestos que pagan-todos "lo_s habitantes no pueden emplearse en adqui­
rir elemen·tos que son-repudiados por gran parte de la población, agnóstica o creyente" (La
Prensa, Buenos Aires, 26/5/91).·Pará Ray, su carta nó tuvo consecuencias que afectaran
a su persona. En cambio, en nuestros
días, otra carta pública, en este caso de -Mons.
Antonio Juan Basseotto al Ministro
dé Salud Pública Dr. Ginés González García,
engendró un conflicto, que el Presidente Kichner, en su arbitrario simplismo, creyó
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LA CUESTIÓN DEMOGRÁFICA
Pero también otros, como los de la eugenesia (6), de la esterili­
zación (7), de la eutanasia (8).
solucionar con la separación del prelado de su cargo de obispo castrense. La famosa
carra, que dio lugar a comentarios inverosímiles de polítié:os, periodistas, incluso caca­
túas
.católicos, de la DAIA y hasta d~ algún obispo, en su parte pertinente dice: "La
multiplicación
de los abortos que usted propicia con fármacos conocidos como aborti­
vos es apología del delito de homicidio
... Cuando usted repartió públicamente profi­
lácticos a los jóvenes, recordaba
el texto del Evangelio donde nuestro Sefior afirma que:
los que escandalizan a los pequeños merecen que les cuelguen Una piedra de molino al cue­
llo y los tiren al ma'f'. Es extraño que una cita de la "Buena Nueva", pueda haber cau­
sado tantas molestias
a tantos cristianos.
(6) Marie Stopes, partidaria de
la eugenesia, llega a escribir quejosa: "La sociedad
permite a los enfermos, a los de razas inferiores, descuidados, manirrotos, débiles men­
tales, a los más bajos y peores miembros de la comunidad producir innumerables dece­
nas
de miles de criaturas raquíticas, deformadas, de condiciqn inferior ... gr,in parte de
ellas condenadas desde su propia herencia_fisica a ser, en el mejor_ de los casos, sólo par­
cialmente autosuficientes,
y as( drenar los ·recursos de aquellas clases superiorés a ellas,
que tienen·sentido de la: responsabilidad". Como solucióll al problema, abogó por "la
esterilización de aquellos totalmente ineptos, como posibilidad inmediata y obligatoria"
(Maternidad radiante, Londres, . .1920). fu interesante señalar que por cuarenta afios
(1935
a 19,75), en Suecia y en el cuadr9 de la social-deinocracia,..:5:f= esterilizaron los
"seres inferiores" (alrededor
de 60.000), tipos humanos clase "B", A fines de los afios
30, aparecía en un diario sueco una publicidad de los productores de leche con el eslo­
gan: "El objetivo es una raza más sana-. H volvámonos todos hombres «A»". Cabe desta­
car
que los ideólogos de esta eugenesia democrática, los cónyuges Gunnar y Alva
Myrdal recibieron, en distinas oportunidades, el.Premio Nobel (LUCA Don, "Eugene­
tica,
ombra sc_ura sul modello svedese", Corriere della Sera, Milano, 3/3/2005).
(7) Después de las píldoras anticonceptivas y del aborto, el tercer escalón del arse­
nal anticonceptivo es.la esterilización,
Según Anselm Zurfluh ell el afio 1992 se encon­
traban esterilizadas 200 millones de personas.
(8) Jorge
Maxúnghi denuncia "el hecho .de que el .aborto y la eutanasia --en
siniestra simetría-atenta contra quienes no tienen aptitud para consumir ni fuerw
para emplear en la producción" y recuerda la anécdota del estudiante de medicina que
ante
el planteo de un caso aparentemente teórico (padre alcoh6lico, .madre enferma,
mal embarazo) opinó que había que practicar un aborto: habría-matado a Ludwig van
Beethoven ("Jaque a la vida"; La Nación, Buenos Aires, 9/8/1990). El-diagnóstico prena­
ta.l habrla hecho surgir en d caso, en forma inmediata, el derecho de no nacer, curioso inven­
to de nue¡tra, ministra de la Corte Suprema Elena Highton de No/asco. Respecto a la. euta­
nasia cabe destacar
que_ Holanda fue el_ primer país que la autoriz6 con algun_os recau­
dos:
voluntad del paciente, sufrimientos ·~-interminables e insoportables", enfermedad
grave sin esperanza de sobrevivir, diagnóstico de dos médicos (La Nación, Buenos Aires,
11/4/2ú01). Respecto al primero es diflcil determinar en muchos cas_os y además en
Bélgica, pttls que legalizó la eutanasia en el 2001, del 1,8% de muertos por eutana,sia, sólo
el 0,3% es voluntaria, el resto eran los llamados "lawn-", situaciones en las cuales no se
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II. EL CANTO DE MALTHUS
El punto de partida de nuestra indagación, será la "Balada de
los rendimientos decrecientes", de autor anóniino, dedicada a
Thomas Robert Malthus (1766-1834).
"Aumentar los frutos de la cierra
lleva cada
vea. más trabajo.
Los alimentos suben
como uno, dos, tres,
y la población como uno, dos, cuatro".
¿Qué sostenía este hombre pesimista acerca del futuro de la
humanidad? Algo muy sencillo y sin matices: "Se puede afirmar con
toda seguridad que la población, cuando no estd impedida por algún
obstdculo, se duplica cada veinticinco años y crece, por tanto, en progre­
sión geométricd' (9).
¿ Qué remedios proponla? Ante todo, medicinas éticas, porque el
pastor inglés no era Ginés González García (10), ni Juan Alemann,
indaga la voluntad de los· pacientes. A la eutanasia geriátrica ·(iniciativa de terceros apli­
cable a ancianos con enfermedades neurodegeneratiyas como el mal de Alzheimer), se
agrega la eutanasia pediátrica (aplicable a recién nacidos cuyo sostenimiento es muy
costoso).
Los datos se encuentran en el artículo de MARGHERITA DE BAC, "Eutanasia,
troppe morti decise solo
dai medicf', Corriere della Sera, Milano, 16/2/2005; y respec­
to al segundo, como afirma la Dra. Rosa Mertnoff, Coordinadora- del Programa
de
Cuidados Paliativos del Hospital de CHnicas, en más del noventa. por ciento de los casos
el sufrimiento físico de los pacientes-puede Ser aliviado con métodos farmacológicos
relativamente sencillos,
"y en el resto de los casos, que afecta a un pequefio número, se
los
seda para evitar el dolor". Más ·adelante, agrega en declaraciones al citado matutino:
"lo que·hacemos
es acompafiar al. paciente hasta el final sin prolongar, sin forzar los
tiempos
y, siempre, ·ofreciéndole las medidas que necesita para sentirse aliviado hasta
que su propia.vida
se apague" (La Nación, Buenos Aires, 11/4/2001).
(9)
An etsay on the principie of popula.tion, London, 1826. Antes de Malchus el
matemático ilustrado francés Condorcet había sefi.alado que la dimensión de la pobla­
ción
podía exceder los medios de subsistencia (PAOLO MIEU, '~Educazione e democra­
zia sconfiggono la
natalit3 selvaggia", Corriere tklla Sera, Milano, 28/6/2002).
(10) Es interesante
la coincidencia de un conspicuo e importante funcionario del
Proceso de Reorganización Nacional con el actual Ministro de Salud: Juan Alemann, en
su artículo
"Qué hacer con la pobreza. la indigencia y la exclusión", se refiere elogiosa­
mente a Ginés González García
y al avance en el cuidado de la salud, pues el ministro
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LA CUESTIÓN DEMOGRÁFICA
ni Carlos Menem, ni Avelino Porto, ni Chiche Duhalde, ni Néstor
Kichner: restricción moral, castidad, matrimonios tardíos.
Pero si esto no funcionaba, eran preferibles los "vicio/: anticon­
ceptivos, violación del lecho conyugal, disolución de las costum­
breS, pasiones contra la naturaleza, pues sus consecuencias serian
menos nefastas que las del aumento continuo y desmesurado de la
población. Si éste se produce comienza a pasearse entre los hombres
el fantasma de la hambruna, la miseria y la guerra.
III. TESIS CATASTROFISTA
La tesis de Malthus es catastrofista pues piensa que la tuesti6n
se encuentra regida por la regularidad propia de las leyes físicas. Sin
embargo,
los indices de crecimiento de las poblaciones son relativos y
variables.
Y aquí es útil recurrir a las estadisticas que desmienten a Malthus.
En primer lugar respecto al aumento de la población. Según los cál­
culos del Instituto de Estudios Demográficos de Francia, punto de
partida de la Conferencia Internacional sobre Población que
se lle­
vará
a cabo allí el mes próximo, en la tierra habitan hoy 6.477
millones de personas (11). Según
las proyecciones del clérigo inglés
"ya implementó varios programas que apuntan en esta dirección: el plan remediar, de
swninistro gratuito
de medicamentos, el reparto de preservativos (para evitar el SIDA
y el embarazo de adolescentes)", en La Razón, Buenos Aires, 24/6/2005; Dios los crla y
Ginls y Alemann, empkar.hs_ de Kichner y Vide/a, de la democracia. y del Proceso se
juntan, .. y no es casualidad.
(11)
La Raz,ón, Buenos Aires, 24/6/2005. En el informe aparecen datos interesan­
tes: la mitad de la población mundial vive con menos de 2 dólares por día; el 20% más
rico se queda con el 84% de la riqueza mundial; unos 1.100 millones de personas no tie­
nen agua potable.
La prueba de que esre problema no surge de la ausencia de recursos
sino de una mala distribución, en un planeta en el cual como
se ha -dicho, la parábola
del rico Epulón
y el pobre Lázaro adquiere dimensiones mundiales, la encontramos en
un artículo de
Alessandra Farkas, que tiene un sugestivo título: "Con i soldi dei cosme­
tid si pu O eliminare la faine". En los Estados Unidos y Europa sumados se gastan en
cosméticos 18.000
millon_es, en perfumes 15.000 millones, en comidá para animales
do'ffiésticos 17.000 millories (total: U$S 50.000 millones). Se necesitaría para eliminar
el hambre y la desnutrición: 19.000'millones; para garantizar el agua potable a todos:
10.000 millones (total U$S 29.000
inillones), en Corriere della Sera, Milano, 9/1/2004).
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BERNARDINO MONTE/ANO
el mundo debería tener hoy 273.290 i;nillones de habitantes. ¡Un
pequefio error
ele cálculo!
Además, según la División Población de
las Naciones Unidas,
la cantidad de personas llegará en el afio 2050 a 9.100 millones; se
duplicará la población de los 50 países más pobres y permanecerá
estática la de los países
más desarrollados.
Por otra
parte, no es cierto que los productos alimenticios aumen­
ten menos que la población. Patricio Randle en un trabajo publicado
en 1995 prueba que desde 1970 hasta entonces
el aumento de los
alimentos había superado al de la población en un 16% (12). Al
progreso de la agricultura, se!íalado por el autor, se le agregan las
inmensas posibilidades del océano y el progreso de la química en el
aporte alimenticio.
IV. "CRECED Y MULTIPLICAOS"
El mandato del Génesis: Sed fecundos y multiplicaos y henchid la
tierra (1, 28) junto con.la bendición divina, se encuentra en las
antípodas del pensamiento del clérigo Malthus. ¡Habrá sido el
Creador 4n irresponsable? ¡Se habrá ocupado del sustento de las
aves del cielo y del vestido de los lirios del campo, abandonando a
la única criatura terrestre creada a su imagen? Evidentemente no, y
los problemas del hambre y de la miseria no surgen de la falta de recur­
sos sino de una mala administración y distribución:
El inglés Peter Bauer, profesor emérito de Desarrollo .Econó­
mico de
la Escuela de Economía de Londres, escribe con sensatez
que
"la población es un triunfo de la vida sobre la muerte. Se trata de
('12) "Población, territorio y desarrollo", en La población, OiJros, Buenos Aires1 1995, pág. 15. AMAfm"A SEN en su libro Globalkzazione e __ lfberta, Mondadori, coinci­
de con Randle y seiíala que "en los últimos dos siglos la expansión de la producción de
alimentos-ha sido significativamente y constantemente más_ rápida que la de la pobla­
ción" y agrega qu_e es en la.India y en China donde "estamos observando el m~ rápido
crecimiento en la dispol')ibilidad de alimentos por cabeza ... E~tre 1979 y 1993 la ofer­
ta ?,.limentaria en Europa ha crecido un 3%, en América del Norte ha caído en un 5%,
mientras que en Asia ha saltad.o un 22%. En particular la India ha crecido en ~n 23%
y China un 39%", citada por Paolo Mieli, en artículo mencionado en la.nota 9;
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una bendición y no de una calamidad. Casi todas las personas prefie­
ren vivir más tiempo y que sus hijos también vivan
más" (13).
Es necesaria una política de población. Es asunto de los Estados no
sólo de las familias, pues, como señala Anselm Zurfluh: "el Estado
nunca es neutral siempre estd poniendo en prdctica una determinada
política.
Unas veces lo hace a favor de la vida y otras en contra" (14).
En contra de Zurfluh afirma
el presbítero Rafael Braun: "no
incumbe
al Estado favorecer una alta tasa de natalidad ni propen­
der a que
sea b~ja, porque es resorte propio de las familias" (15).
Este peculiar sacerdote tal
vez no entienda que uno de losprime­
ros problemas que debe encarar el Estado es el de la comervación del
pueblo a
través de la sucesión de las _generaciones. Ya Santo Tomás
escribe que uno de los deberes más importantes del gobernante
es
conservar la población: "el bien de la multitud no debe ser estable­
cido solamente por un tiempo, sino para que
él se prolongue, en
una cierta manera, siempre. Y coffio los horribres son mort~les, ellos
no pueden durar siempre" (16).
De aquí
n~ce el deber del gobernante de ejercer la prudencia
política arquitectónica, de poner en juego
la providencia guberna­
tiva y de encarar una política demográfica que asegure
el futuro de
la Nación y de su pueblo, teniendo en cuenta la vigencia permanen­
te del mandato del
Génesis.
El homhre no es un mecanismo, sino <¡ue es un ser biol6gico,
que constituye una especie dentro del género animal. El motivo que
mueve a todos los a.Íliffiales es la conservación. Conservarse a sí mis­
mos y conservar la especie. Como afirma Zurfluh "el placer y la
sexualidad estdn íntimamente unidos; pero el placer no ha sido nunca,
ni es, u~ .finalidad en Sí mismo, sino mds bien, el motor de la comer-
(13) "Apuesta a la inteligencia", eti-La Nación, 1119/199S.
(14) ¿Sup,,población/, Rialp, Madrid, 1992, pjg. 146.
(15)
La Prema, 4/10/1992.
(16) Du royaume, Egloff, París, 1946, L.I, C. XV, pág. 127. Como escribe
Edmund Burke
"por disposición de una estupenda sabiduría que moldea la grande y
misteriosa encarnación de la raza humana, el todo no es nunca viejo, ni de edad m_edia­
na, ni joven, sino -que pasa por las variadas circunstancias ... ", "Reflexiones sobre la
Revolución Frañcesa", en Textos pollticos, Fondo de Cultura Económica, México, 1942,
págs.
45/46.
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vación del género humano ... Por eso, resulta antinatural querer sepa­
rar la sexualidad y la reproducción como pretenden algunas ideolo­
gías hedonistas actuales" (17).
VI. LA AUTORREGULACIÓN NATURAL DE LAS POBLACIONES
En su magnífica obra El mito de la explosión demogrdfica (18),
nuestro colega y amigo chileno, Jorge lván
Hübner Gallo realiza un
interesante estudio de los mecanismos de regulaci6n de
las pobla­
ciones animales.
Los criadores de animales han notado que una alimentación
excesiva y
la falta de ejercicio perjudican la reproducción: los caba­
llos que viven
en los establos de Palermo, cuya vida equina se carac­
teriza_ por una alimentáción excesiva, poco ejercicio, estrés, son
poco fecundos; también los animales seleccionados y muy cuidados
como perros (19) y gatos domésticos. Darwin experimentó con
los caballos de carrera, para arribar a la conclusión de que la terce­
ra parte eran estériles. Un fen6meno análogo sucede con los anima­
les del wológico. ·
El ilustre bi6logo norteamericano Raymond Pearl demostró
que
el desarrollo demogrdfico no es indefinido, ya que estd regulado por
las circunstancias del medio y por la densidad de individuos en el espa­
cio habitable. Para mostrar ·su teoría trabajó en su laboratorio con
colonias de moscas de la fruta y con enjambres de abejas, observan­
do que
el crecimiento de sus poblacion~s se regía por una ley bio­
l6gica según la cual
el movimiento demográfico podría representar­
se por una línea que, una vez superada una lenta fase de despegue y
después de ascender en forma casi vertical, se indina poco a poco
hasta convertirse
en una línea horizontal.
(I 7) Ob. cit., pág. 18. .
(18) Joaquín Almendros, editor, Buenos Aires, 1968.
(19)
_Josl:. ORTEGA Y GASSET, en "El hombre y la gente", &vista de_Occidmte,
Madrid, 1957, pág. 115, alude a ciertas sefioras que se pasan afias cuidando a su perro
y que acaban pareciéndose fisonómicamente a él. Seguramente tantos.mimos reducirán
la fertilidad del can.
110
Fundaci\363n Speiro

LA CUESTIÓN DEMOGRÁFICA
En el experimento introdujo en una botella algunas moscas y
comenzó a proporcionarles, de una manera regular y sistemática,
una cantidad constante de alimentos. "La prueba tenía por objeto
determinar qué sucedía con una población sometida a un espacio limi­
tado, pero dotada de recursos prácticamente ilimitados, situación simi­
lar a algunas sociedades humanas. El resultado fue que, en una pri­
mera etapa, las moscas se comenzaron a multiplicar rápidamente;
pero, después, a medida que aumentaba su densidad, la tasa de creci­
miento fae disminuyendo gradualmente, hasta que la población se esta­
bilizó" (20).
Aquí juegan dos factores: los límites espaciales y la densidad de
la población, pues "la baja densidad fomenta
una rápida expansión
del grupo; en cambio, una alta densidad tiende a levantar barre­
ras biológicas, que obstaculizan y
aun impiden el desarrollo de la
población" (21).
También los experimentos con animales nos ensefian la influen~
cia de la alimentación: a medida que mejora el contenido proteico
disminuye la fertilidad de los ratones estudiados; y asimismo de las
tensiones psicológicas que provoca la alta densidad, pues también
ellas afectan el proceso de reproducción de los mismos roedores.
Todo esto puede sintetizarse
en las observaciones del biólogo
Claude Villée:
"Cuando unos pocos individuos penetran en· una región
previamente desocupada, el crecimiento suele ser lento al principio (fase
de aceleración positiva}, luego aumenta rápidamente en forma expo­
niencial y finalmente decrece, a medida que aumenta la resistencia
ambiental (fase de aceleración negativa} y llega por último al equilibrio
o nivel
de saturación" (22).
VII. CONCLUSIONES VÁLIDAS PARA NUESTRA ESPECIE
Después de prolijos análisis, Hübner Gallo llega a las siguientes
conclusiones ·que COmpartimos:
(20) Citado por HÜBNER GALLO, ob. cit., pág. 72.
(21) H0BNER GALW, ob. cit., págs. 77/78.
(22) Biología, pág. 65, citado por HüBNER GALLO, ob. cit., pág. 81.
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Fundaci\363n Speiro

BERNARDINO MONTEJANO
1. º) El hombre, como todo ser viviente,· tiene una gran po­
tencialidad expansiva, que lo impulsa a multiplicarse y a
extender su población en el medio en que se encuentre.
2.º) Este potencial, teóricamente ilimitado en un ambiente
infinito, debe adaptarse, en la práctica, a
las posibilidades
de
un medio siempre limitado.
3.º) En la especie humana, como en todas
las demás, el creci­
miento demográfico
se produce de acuerdo con leyes bioló­
gicas, que determinan una
autorregulación natural de las
poblaciones en relación con el medio respectivo ... (despe­
gue, crecimiento
acelerado, disminución de la velocidad de
aumento, equilibrio final
y, a veces, extinción del grupo).
4. º) El medio o
habitat de la especie humana ... se crea artifi­
cialmente, .configurado. por el complejo conjunto de con­
diciones de la
cµltura y de la civilización, tales como. la
religión, el arte, la ciencia, la educación, el régimen polí­
tico, la organización económica y social, la vida urbana,.la
vivienda,
la alimentación elaboraill}, los sistemas de cale­
facción y refrigeración, la industria manufacturera, el pro­
greso técnico,
las tensiones psicológicas, etc. (23). Aquí,
nuestro amigo
se olvidó de la medicina, que tanta impor­
tancia tiene en la prolongación de la
vida,
Es_ interesante hacer un :par de acotaciones. Eil primer lugar,
mientras no podamos extender nuestra población a la Luna o a
Marte, la tierra nos ofrece un espacio limitado, aunque muy amplio y
con muchos lugares habitables deshabitados. Así China, a pesar de
su inmensa población,
es uno de los países más deshabitados del
planeta, pues
si es cierto que su población supera los mil millones
de personas, la extensión de su territorio __ es enorme._ Una compara­
ción nos sirve para hacer patente la realidad: Gran B_retalia tiene en
su territorio 324 personas por kilómetro cuadrado y
China 79 (24).
(23) Ob. cit., págs. 87/88.
(24) "El cuento chino de la población china'', -en La Ntúva Provincia, Bahía
Blanca, 20/7/82.
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LA CUESTIÓN DEMOGRÁFICA
En segundo lugar, que como el hombre colabora en la configu­
ración de su
habitat, el progreso y el desarrollo económico no dependen
del número de habitantes sino de
su comportamiento. Peter Bauer
escribe en su artículo citado que "algunos de
los países más pobres
-Etiopía, Uganda, Zaire-están muy escasamente poblados y allí
es donde azota el hambre. A la inversa, hay países del Tercer Mundo
densamente poblados
--Singapur y Malasia-y el flagelo del ham­
bre
no los afecta''.
VIII. EUROPA Y SUS PIRÁMIDES POBLACIONALES
INVERTIDAS
En nuestros días, el tema de la población, comienza a ser para
casi todos los países de Europa. una cuesti6n de subsistencia.
Zurfluh en su libro ya citado nos muestra diversos modelos:
Dos pirdmides normales (Estados Unidos, 1900 y Magreb o sea
Marruecos, Argelia y Túnez, 1980), Es interesante transcribir el
comentario de María del Carmen Mañá Juan, en la Gran Enciclo­
pedia Rialp, respecto
al segundo caso, en que el número de habitan­
tes ha aumentado en los últimos años pasando en 25 años de 19 a
32 millonés: "este crecimiento es debido a la-concurrencia de una
natalidad elevada, usual en los países subdesarrollados, y una mor­
talidad que
se ha reducido con el aumento de la higiene y las medi­
das sanitarias ... La poblaci6n muestra uri aumento de lós jó"venes
menores de 20 años que son el 51 % del total, mientras que sólo el
6% tiene una edad superior a 60 años" (25).
Luego aparecen pirámides europeas:
el equilibrio, Francia
1973;
el equilibrio menguante, Francia, 1977; la mengua, Portugal
y España, 1977;
la bajada, España 1990, el hundimiento, Austria
1990 y
el suicidio, Alemania, 1976. ·
Señala Zurfluh que las dos últimas pirámides son reales. "Hoy
existen regiones que registran tasas de natalidad de 50 niños cada
100 mujeres ... Señalan disminuciones de un 50 por 100 de la nata-
(25) Rialp, Madrid, 1981, t. 14, pág. 753.
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BERNARDINO MONtEJANO
lidad en una sola generación. Mds de la mitad de los habitantes ten­
drd
mds de 60 años. Por cada nacimiento se contabilizardn 20 fére­
tros' (26).
Y c6ncluye con un anticipo de lo que sucederá-a estos "seden­
tarios" adormecidos por los "bárbaros", que han renunciado a la
defensa de su
'(oasis,, invadido por el "desierto", todo en el lengua­
je alegórico de Saint-Exupéry: "si seguimos adelante con la reducción
de la natalidad nos arriesgamos a sufrir una crisis demogrdflca y cultu­
ral sin precedentes en el mundo occidental. . . Con nuestra actual con­
ducta no estamos poniendo en peligro a la humanidad en su conjunto,
tan sólo a nuestra civilización y cultura. Otros nos sobrevivirdn" (27).
IX. EL CASO DE EsPAÑA
El caso de Espafia es interesarite, pues se trata de un país que
después de mantenerse un
p~co al margen, ingresó en forma abrup­
ta y entusiasta en la "modernidad".
¿Qué significa modernidad, modernización? Significa progreso
económico y bienestar social, acercamiento a los países desarrolla­
dos,
al "primer mundo,,. Pero también y en lo más importante,
como
bien lo
sefí.ala· JÜsé fyiaría Alsina, "es un proceso caracterizado
por una serie de cambios en los modos de vida, costumbres, valores,
legislación, instituciones ... son cambios propios de una sociedad que va
perdiendo sus señas de identidad cristiana".
Estos cambios, que el escritor citado los refiere a Europa y en
especial a Espafia,
· sirven tainbién para evaluar los nuestros.
Los mismos significan muchos
"más": "más coches, más televi­
sión, más autopistas, más bienestar económico, más informatiza­
ción, más universitarios", pero
tambié~ "más delincuencia, más cár­
celes, más policía, más droga, más SIDA, ,más enfermos depresivos,
(26) Ob, cit., pág. 76. En el apéndice podrán observarse las pirámides normales
aludidas
(1 y 2) y la de la Argentina (3), todavía saludable (1991); las del hundimien­
to y del suicidio
(4 y 5), y la de Espafüi., (6) de 1991, con una base muy réducida y un
oscuro porvenir.
Las mismas se encuentran en el libro de Zurfluh citado, la nuestra es
del INDEC, y la espafiola está en el artículo de Alsina mencionado,
(27) Ob. cit., pág. 137.
114
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LA CUESTIÓN DEMOGRÁFICA
más suicidios, más eutanasia, más abortos, más divorcios" y otros
"menos,,: "menos natalidad, menos fecundidad, menos nupciali­
dad, alcanzando niveles tan ínfimos, en algunos casos, que ponen
en peligro la supervivencia misma de
la sociedad" (28),
Todos los mds y los menos se aplican a la Argentina, excepto el pro­
greso económico, el bienestar social y las autopistas, ya que muchas
rutas, de eso, sólo tienen
el cobro del peaje.
En España de 1975 a 1991 el número de nacimientos bajó casi
a
la mitad: de ]10.336 a 56.612, mientras que la mortalidad se
mantuvo estable, con una ligera alza.
Aquí tenemos dos realidades: con la reducción de los nacimientos
. entran pocos y con los progresos de la medicina salen pocos, Pero la con­
secuencia es el envejecimiento de la población, el incremento de los
gerontes. En 1960 el porcentaje de. los mayores de 65 años era del
8,22% mientras que en 1991 era del 13,82%, mientras que los
mayores de
75 años pasaron del 2,68% al 5,67%, o sea a más del
doble.
El increm.ento de esta situación conducirá al colapso de los
sistemas jubilatorios y de seguridad social, más todavía en
la
Argentina donde la edad para jubilarse es de 60 años para l~s muje­
res y de 65 para los varones, cuando todas las estadísticas prueban
la mayor longevidad de
las primeras. Negro futuro para füpaña ...
y también para nosotros.
X. EL CASO DE ITALIA
Hace poco más de diez años, el matutino Clarín (29) le dedicó
un par de páginas a
la demografía italiana: un informe del Censis,
Instituto de Investigaciones de la Realidad Italiana, titulado: Gozar
el presente perdiendo el faturo y un artículo de Julio Aranas, Italia:
mds tumbas que cunas. La síntesis periodística que aparece en carac­
teres destacados no tiene desperdjcio: "Italia envejece a pasos agi,gan-
(28) Art. cit., págs. 37/38,.
(29) Bue,nos Aires, 15/8/1994. Recién .~n el 2001 se ha producido un leve
auinenro en los nacimientos, 'concentrado
sobre-todo en el Nórte· de Italia, según-infor~
mes
de la ministra· Stefania Prestigiacomo ( Corrierr della Sera, Milano, 27/3/2002),
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BERNARDINO MONTE]ANO
tados: actualmente cuenta con más abuelos que nietos. La penínsu­
la itdlica posee la tasa de fecundidad por muje, mds baja del mundo y
e/número de muertes supera el de nacimientos. Si la tendencia sigue
así, teóricamente dentro de 150 años no habrá
más italianos. Ya es
continua la eliminación de escuelas primarias".
Es interesante formular algunas precisiones. En la Italia del cen­
tro-norte, la más rica
y poblada, en 1993 se registró un saldo pobla­
cional negativo
de 78.000 personas; en cambio en el sur, más pobre
y menos desarrollado, el saldo fue positivo en 73.000. El ejemplo
más saliente
es el de Liguria y su capital Génova con 12.000 naci­
mientos
y 22.000 muertes. La tasa de fecundidad es de 1,21 por
mujer, cuando para asegurar el recambio debería ser ligeramente
superior a 2 (en 1970 era de 2,43).
¿Cuáles son
las causas de esta catástrofe? Responde Giusseppe
De Rita, presidente del Censi~ "Italia es una sociedad que renuncia
a crecer porque ha perdido las ganas de transmitir valores, confianza,
educacidn, vida ... Est:,Únos ante un hecho cúltural que se hace fisio/6-
gico. Los italianos hemos descubierto que podiamos gozar del presente
sin pensar e'n el foturo".
Si las cosas siguen así en el futuro no habrá otro remedio que
aumentar el número de inmigrantes que aportarán brazos para el
trabajo y pagarán a los jubilados. Se "africanizará" Italia y, como
escribe Julio Aranas, "del Sur del mundo, repleto de jóvenes, de
miseria
y de ganas de labrarse un futuro, será cada vez más fuerte la
presión sobre la refinada
y esclerótica Europa del tercer milenio.
Estos cambios forman
paste de la revolución demográfica que
comienza a angustiar a los· italianos".
No pásaron ocho años desde la publicación aludida y el presi­
dente de Italia, Cario Azeglio Ciampi, confirma los malos augurios
y, desde lsernia, se dirige a los italianos: "Una socied_ad que tiene
pocos hijos es una sociedad que no tiene fe en el futuro. Las esta­
dísticas que confirman el bajísimo índice de natalidad italiano dan
miedo. Son raras las familias con dos hijos ... Es necesario Sostener
a la familia... La caída demográfica traerá daños a la economía
nacional
.. : Si las cosas continúan como hasta ahora Italia acabará
por tener el aspecto de una pirámide invertida, con
una vasta poblac
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Fundaci\363n Speiro

LA CUESTIÓN DEMOGRÁ.FICA
ción de ancianos que gravarán, para su sostenimiento,- sobre una
pequeña población de jóvenes" (30),
Algunos datos estadísticos avalan
la tardía opinión del presiden­
te italiano, parecido
a tantos gobernantes vernáculos, quienes en
lugar de ser previsores y providentes respecto a contingencias faturas,
parecen historiadores de nuestros males: Italia es el país más viejo del
mundo, con
el24,5% de su población mayor de 60 años, que según
las proyecciones en el 2025, tendrá el 34% en esa categoría y será
superada por Japón,
hoy-segundo, con el 35,l %. Muy cerca se
encuentran Alemania, 24% y 33,2%, y España, 22, 1 % y 31,4%,
· El siglo XXI será en Europa el siglo de los viejos. Las personas
activas por cada pensionado en 1950 eran 12,
en el 2000, 9 y la
proyección de la ONU para el 2050 es de 4 a l. Además se confir­
ma la fortaleza del sexo "débil", pues en
el mundo hay muchas más
viudas que viudos. Así, entre los mayores de 60 años existen
81
hombres por cada 100 mujeres y entre los de más de 80, 53 hom­
bres
por cada 100 mujeres (31).
Pero también Juan Pablo II, obispo de Roma, denunció con
claridad, en el mismo año 2002, la seria cuestión, eh un discurso
dirigido a
Iralia: "No puedo dejar de referirme, en una tan solemne
circunstancia, a otra
·grave amenaza que pesa sobre el futuro de este
país, que condiciona hoy su vida y sus posibilidades de desarrollo.
Me refiero
a la crisis •de los nacimientos y al envejecimiento de la
población.
La cruda evidencia de las cifras ... obliga a los ciudada­
nos a un empeño responsable
y convergente para favorecer una neta
inversión de la tendencia'' (32).
(30) ALESSANDRA ARACHI, "Ciampi: pi U figli o ci saca crisi economjca", Corriere
della Sera, Milano, 27/3/2002. Como sefi.ala d d.emógrafo Gian Cario Blangiardo, pro·
fesor de la Universid,ad de Milán, "de aquí a veinte años en Italia tendrá más de 60 afias
una persona sobre tres ... No podremos p~rmitirnos más una estructura rígida de. la
edad de la jubilación
y deberemos, inevitablemente, levantarla ... La caída de los·naci·
mientos en nuestro país no tiene igual en el mundo. Nos encontrarnos con una media
de medio millón de nuevos nifios cada afio, exactamente la mitad de los que etan
antes
de 1974", "Dobbiamo_ ripe~are il modello di sociera", Corri~ della Sera,
Milano, 8/4/2002.
{31)
ALESSANDRA ARANCHl, "I.:ONU: l'Iralia e il Paese che ha piU anziani",
Corriere della Sera, Milano, 8/4/2002.
(32) Comm della Smt, Milano, 13/11/2002.
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BERNARDINO MONTE/ANO
Pero Italia tiene otro grave problema, que se extiende a otros
países europeos:
el de una inmigración, .en especial la musulmana,
que
no sólo no se asimila, sino que intenta en forma prepotente
imponerse.
Una prueba de esto es el requerimiento de "conversión"
al Papa: "¡Obispo de Roma! En nombre de todos los musulmanes
lo invito a abandonar
la religión idolárrica politeísta que profesa y
pronunciar
la Shahada, testimonio de fe del musulmán" (33).
Sin embargo, ciertas medidas del actual gobierno y de algunos
gobiernos- regionales, parece que comienzan a dar sus frutos y en
estos días, podemos leer algunas buenas noticias: en
el 2004, y por
primera
vez desde 1992, hay más nacimientos que muertes, hay un
saldo positivo:15.941 personas más.
¿Será una inversión de la ten­
dencia?
Es demasiado pronto para afirmarlo (34).
XI. EL CASO DE LA ARGENTINA
Los argentinos somos pocos y maldistribuidos. Nuestra población
crece con una tasa anual del 1
%, inferior· a la tasa media mundial
anual del 1,7%. Pero además. crece cada
vez más lentamente (35).
La densidad de
la población argentina es de 12,9 hab/Km', sin
incluir
la Antártida, mientras que la media mundial es de 44.
A la elevada concentración
en áreas urbanas (36) se unen los
grandes vacíos demográficos; la _mayoría en áreas fronterizas. En el
(33) Confrre d,//a Sera, Milano, 12/11/2001.
(34) MARl0LINA IOSSA, "Le donne tornano a fare figli. Al Nord, doppo i 30
anni",
Corriere della, Sera, Milano, 28/6/2005. Además otro dato a tener en cuenta es la
mayor natalidád de
los inmigrantes, eó. especial los musu!manes: así mientras en 1995
el porcentaje de bebés extranjeros era del 1.7% en el 2004 es de 8,65%. En algunos
luga'res del Noite de Italia el 20% o algo más de los recién nacidos son hijos de inmi·
grantes; así en Verana, el 23,3%, en cambio en el Sur, en Palermo, sólo lo 'es el 3,5%.
(35) La población argentina que en 1991 ascendía a 32.615.528,
según· cifras
provisorias del 2001-había aumentado a 36.223.947. Como sefialan Isidro y Ricardo
Carlevad,
"se observa que la tasa muestra Una tendencia francamente decreciente de
1914 a nuestrds días", en
La Argentina, geografta humana y económica, Grupo Guia
S.A.~ Buenos Aires, 2003.
(36)
La evolución de fa poblaci6n nos muestra que en 1960 d 72% era urbana
(que vive en pueblos de más de 2.000 habitantes) y
d 28% rutal. En d afio 2001 el
porcentaje de la población urbana creció al 89,3% y el de la rural bajó al 10,7%.
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LA CUESTIÓN DEMOGRÁFICA
37% del territorio vive el 1 o/o de la población y así mientras la
Ciudad de Buenos Aires tiene casi 14.000 hab/km', la Provincia de
Santa Cruz tiene 0,8. Es un caso de macrocefalia, una cabeza des­
proporcionada con relación al cuerpo.
En la Argentina hace mucho tiempo que ningún gobierno
civil
o militar se tomó el asunto en serio y-es por eso, que en 1992, el
director del Departamento de Matemática de la Universidad
Católica, Juan Carlos Auernheimer, señala que
"casi ochenta años de
ausencia de
politicas demogrdficas efectivas han culminado en una
endeble ocupación del territorio
nacional:', augurando que han de
aumentar "las presiones demográficas sobre las fronteras argentinas,
especialmente con los países del Brasil, el Paraguay y Bolivia'' (37),
olvidando a Chile.
En
los tiempos de Menem, el presidente de la Fundación de
Investigaciones para
el Desarrollo (FJDE), Héctor Valle, denun­
cia
el modelo de. exclusión que genera nuevos espacios demográ­
ficos vados: "amplias regiones del ·país quedan convertidas en
páramos donde según los casos, ya no pasa el ferro"carril, ni hay
campamentos cercanos de
YPF, o centros urbanos vinculados con
producciones agroindustriales que resultaron descolocadas por el
atraso cambiario". Concluye afirmando que "la condicionante
pasa por la política económica y sus objetivos de desarrollo a
mediano plazo" (38).
J=loy no tenemos atraso cambiario, sino más bien lo contrario,
pero como rampoco tenemos una política económica a mediano y
largo plazo,
la situación demográfica no ha mejorado sino que se ha
seguido deteriorando y los páramos en crecimiento.
X. UNA POLITICA CONTRARIA A LA NATALlDAD
En este campo, el gobierno actual tiene una política miope Con­
traria a la natalidad. Como bien afirma el Dr. Roberto Castellano,
"los anticonceptivos tienen
el l 00% de reintegro a caigo del Estado,
(37) "Cifras y peligros", La Prensa, Buenos Aires, 4/10/1992.
(38) La fuma, Buenos Ahes, 4/10/1992.
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BERNARD/NO MONTE/ANO
cuando se compran con receta, si no se regalan en los hospitales.
Los remedios para combatir la esterilidad el 0%. Es decir, el Estado
está directamente comprometido en
el controlismo demográfico tal
como le conviene a la industria farmacéutica y a ciertos organismos
internaciones
como el Banco Mundial. Esto sucede por una raz6n
elemental. Si
la población de una nación crece, se necesitan mayo­
res recursos para aplicar al desarrollo social (más escuelas, más hos­
pitales, más viviendas, más trabajo). Por ende, el superávit que la
economía pueda tener, en lugar de atender al endeudamiento exter­
no, debe destinarse a mejorar el nivel de vida de la población. Y esto
choca
conJos planes trazados para un país altamente endeudado y
rico en materias primas como la Argentina'' (39).
Con motivo de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre
Población
y Desarrollo que se reunió en El Cairo en 1994, Mariano
Grondona escribió un artículo titulado A la sombra de Malthus ( 40).
Allí, el periodista se refiere a los temas que
se abordarían, "todos
ellos situados
en la encrucijada de nuestro futuro demográfico ... la
anticoncepción,
el aborto, la homosexual.idad y el feminismo ...
Esos temas dividen las aguas entre las dos corrientes que chocarán
en El Cairo a partir de
mañari.a: los liberales y los conservadores".
En su simplismo periodístico Grandona sefiala que de las pala­
bras población y desarrollo,
"desde el punto de vista liberal la que
cuenta es desarrollo", en cambio, "desde el dngu!o de mira conserva­
dor, la palabra que cuenta es población ... los conservadores sostienen
que el desarrollo
es para la población y que privar a 1200 millones
de personas del banquete de la vida previniendo nacimientos que de
otro modo ocurridan, supone de por sí solo un estrepitoso fracaso
en
la ad.ministración de los recursos de la tierra".
Luego, sin ninguna preocupación moral y con una aviesa adul­
teración del interés nacional, es_cribe: "la mayoría católica de los
argentinos, así como las bien conocidas posiciones del gobi~mo contra el
aborto (esto lo escribió en 1994, ~on Menem en el gobierno), apun­
tan
hacia la dirección comervadora. Una comideración pragmática del
interés nacional apuntarla en dirección contrarid'.
(39) Por !.a vida y la familia, Panorama Católico, Buenos Aires, nro. 39, abril­
mayo de 2005, pág. 14.
(40) La Nación, Buenos Aires, 4/9/1994.
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LA CUESTIÓN DEMOGRÁFICA
Más adelante,- esgrime las razones que, según su punto de vista,
avalarían nuestra adhesión a la política mundialista (41) enemiga de
la natalidad: "dueño de uno de los grandes espacios vacíos del pla­
neta y poseedor de una baja tasa de naralidad, casi de tipo europeo,
nuestro país no podría ver con buenos ojos una explosión demográ­
fica en otras latitudes, con potencial desborde hacia nuestras desér­
ticas playas. Desde un ángulo de visión global,
la Argentina es una
inmensa estancia nada poblada y poco productiva. Un latifundio.
Un vacío que otros pueblos prolíficos y hambrientos, en
el futuro
podrían reclamar".
El diagnóstico es verdadero, pero la solución es falsa, por inmoral y
por antinacionaL Lo que debemos hacer es sencillo: aumentar la tasa
de natalidad, poblar la Argentina, en
primi:r lugar con nuevos
argentinos y en segundo lugar
con inmigrantes deseosos de trabajar
y de asimilarse, respetuosos de nuestra idiosincrasia (42); producir
más a partir de los recursos naturales que tenemos, incrementar la
agricultura, la ganaderfa,
la. pesca y la minería¡ promover una redis­
tribución sensata de la población, fundar nuevos pueblos y ciuda­
des, mejorar los transportes y las comunicaciones. Entonces dejare-
( 41} Es interesante la denuncia de esa política en la Carta del CELAM a la Dra.
Nafis Sadik, secretaria general de la Conferencia Internacional de las.Naciones Unidas
sobre la Población
y el Desarrollo, del 14 de marzo de 1994: "Hoy en día, en muchos
países en vías de desarrollo, más de la
mitad de toda la asistencia. económica internacio­
nal
está relacionada con actividades antinatalistas. El hombre es presentado, cada vez
más,
como un producto entre otros, sujeto a cuotas, incluso a criterios de selección,
definidas según
las exigencias del nuevo orden mundial. En nombre de la necesidad de
integrar población_y desarrollo, la existencia del hombre termina siendo subordinada a
imperativos ambientales
y económicos. En resumen: se ha olvidado que el desarrollo
económico
y técnico es hecho para el hombre y no el hombre para ese .desarrollo. En
especial
se olvida integrar la referencia moral a la concepción del desarrollo que se quie­
re promover" (¼rbo, Buenos Aires, Afio XXXVI, julio-agosto de 1994, n.º 344-345,
pág.
18), Aquí aparecen seúalados los olvidos de Mariano Grandona.
(42)
En el afio 1908, se publicó la tesis de nuestro-abuelo el Dr. Francisco
Linares, para optar al grado de doctor en jurisprudencia, titulada
Inmigración. En ella
destacaba "la importancia trascendental del problema en
un pafs casi desierto, portador
de condiciones
excepcionales para atraer a
los inmigrantes por su extensión territorial,
su configuración
geográfica, la pureza de su ambiente y la benignidad de su clima",
agregando más adelante
una aguda consideración política: "con desiertos seremos siempre
juguetes de influencias extrañas, porque son los hombres y los intereses que oponen resisten­
cias" Qacobo Peuser, Buenos Aires, 1908).
121
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BERNARDJNO MONTEJANO
mos de ser pocos y mal distribuidos. Entonces la Argentina dejará
de ser un latifundio, una estancia nada poblada y poco productiva.
Entonces no ofrecerá vados que otros pueblos puedan reclamar.
Y esto
¿cómo se hace? En primer lugar, con una sana política
familiar,
que vuelva a valorizar al matrimonio, que ayude a la mujer
embarazada, que premie a la maternidad, que apoye a la familia
num.erosa, que establezca un razonable salario familiar; en segundo
lugar, con una política económica que estimule el desarrollo y el incre­
mento de la producciórr, en tercer lugar, con una política geogrdjica
que estimule el nacimiento de nuevos centros de población en el inte­
rior, que vigorice a los que languidecen y se encuentran en vlas de extin­
ción, que revierta el proceso de aban_dono actual
APÉNDICE
Diagrama 5. Diversas pirámides de edad~
EE.UU. 1900
Edad Hombres +85
85
80
75
60
45 ,...._ .... 40
Mujeres
,'---'-i 35 J--J.,
..... ---130)----'--, r'-----l 25 ,_ __ ....., _____ __, 20 1----',
r'------i 15 1------', ..._ ___ _, 10 1------"',
5 1------',
6543210°0123455
Porcentaje de la población total
122
MAGREB 1980
Edad Hombres 85 Mujeres
80
75
70
65
60
....... ----<15>---.......
,-J-----<101-----'-, ,.... ___ __. 5 >----~-
~----'o~----'
Fuente: CHAUNU. Pierre,
Un fururo sln porventr. Paris 1979, pág. 29.S.
Fundaci\363n Speiro

85 y más
80-84
75 • 79
70. 74
65 -6c;I
60 • 64
55 · 59
so· 54
4S • 49
40-44
35 -39
30-34
25 • 29
20-24
15 -19
10 -14
5-9
0-4
' 1
1
1
5%
'
'
1
1
1
4%
Varones 1
1
1
1
'
'
1
1
1 1 1
Jo/, 2% lo/,
LA CUESTIÓN DEMOGJ.?ÁFICA
1 Mujeres
1
1
1
1 1
' l
1 1
7
1
7
1 ' 1 l 7
o:r. lo/o 2% 3% 4% 5%
5. HUNDIMIENTO. Auslria 1990. coeficiente 0.5.
• 1_07 niños por cada 100 mujeres.
En el a~o 2000:
• Nacimlenlos: 4.4 ºloo.
· Fallecimientos: :30,0 °/oo.
• Mengua anual de la població_n: 26 °/oo.
• Mayores de 60 anos: 42,5 %.
-Menores de 20 años: H,1 %.
-Pérdida de población durante una genera·
cíón: 50 %.
··Porcada nacimienlo 7 múertes.
Situación
actual en Alemania del Norte, ciu·
dad es con más de 1CX) 000 hab. (superado en
Hamburgo). grandes ciud3.des rusas Y amérl~
canas, Zürich 1979·_82.
Edad Hombres Mujeres
...J'----'---751------',
-1-------a70I-------',
~-----,651------'.
1.------1601------..-'
'-'-----1551------.-'
l.r-----;sol----.-J
1.r-----1451---......l
123
Fundaci\363n Speiro

BERNARDINO MONTEJANO
6. SUICIDIO, Alemania 1976, coeficiente 0.35.
-75 nif\os por cada 100 mujeres.
En
el año 2050:
- Nacimientos:
2,1 °/oo.
• Fallecimientos: 40,3 º/w.
-Mengua anual de la población: 38,2 º/oo.
-Mayores de 60 años: 54,2 %.
-Menores de 20 años.: 6,0 %.
-Pérdida de población durante una genera·
ción: 631,4 °/oo.
Situación de Munich, Heidelberg .•. , alrede·
dor del año 2050, siempre que no varre la fe­
cundidad.
Edad Hombres 100 Mujeres
95
901-'-~
851-----'--~
,'--------170 ,__ ____ ..,...
.,_ __ .....;s51---~-r'
',-----;601---~-'
'-,-----1551---T""'
'-r----1 so>---~~
'-r----1451---r'
40
35
30
25
20
15
10
5
o
Fuenre: CHAUNU Pierre. U11fit1uro sin pon.·enir,
SMtgart 1979, Secwald, págs. 273-276.
PIRAMIDE POBLACIÓN DE ESPAÑA. 1991
HOMBRES MUJERES
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