Índice de contenidos

Número 257-258

Serie XXVI

Volver
  • Índice

Teófilo Urdánoz Aldaz O.P. (1912-1987)

IN MEMORIAM
TEOFILO URDANOZ ALDAZ, O. P. (1912-1987)
Con la muerte del padre Teófilo Urci-ánoz, acaecida ei 8 de junio
de 1987 en el convento de
Santo Domingo el

Real de Madrid, a
España, a la Orden Dominicana
y a la Iglesia Católica se le ha se­
cado una abundante fuente de sabiduría, de humanidad
y de pro­
funda religiosidad.
Se secó la fuente, pero los ríos de su amplio y
profundo saber filosófico-teológico seguirán fecundando mucho tiem­
po
las mentes estudiosas, y su ejemplaridad dominicana de indagado,
de

la verdad e incansable
· divulgador
de la misma, en la cátedra o
en las publicaciones, dejará --así lo esperamos-- huella permanente~
Mientras tanto él· se encuentra más allá de las fronteras de la fe y
de la esperanza, en la morada de la perfecta y perpetua luz:
He tratado mucho al padre Teófilo Urdánoz: lo tuve de profesor
de Teología Moral durante cuatro afíos en Salamanca; compartí con
él el profesorado en aquella Facultad Teológica durante cinco años;
le acompañé a gran número de congresos nacionales e imeroádona­
les, y lo tuve de súbdito en los cinco últimos años de su vida en el
convento de Santo Domingo el Real de Madrid. Mi gran estima por
él está plenamente justificada. En esta breve memoria distinguiré
cinco partes: daros biográficos, trayectoria académica, valoración de
su obra filosófico-teológica, semblanza humano0religiosa y elenco bi­
bliográfico.
l. Datos biográficos. Teófilo
lJrdánoz Aldaz

nació en Echarri (Navarra) el 6 de
fe:
brero

de 1912, siendo bautizado
el mismo día en la iglesia parro­
quial de San Esteban
· Protomártir, según

el certificado oficial que
tengo a la vista. Fueron su padreS Inocencia Urdánoz, natural de
Echarri, y Josefa Aldaz, natural de Aquinaga. Eran labradores de
profesión, muy buenos cristiapqs. Teófilo era el beñ.jamín de nueve
hermanos: Fortunada, ·Abilio, 'Corpus, Tomás,

Inés,
María,_ Ildefon­
so, Albino y Teófilo. Sobrevive María, viuda con seis hijos (Sor
In'ocencia, Alfonso--Carlos, Paulina, Pedro, . Félix y Asunción); con
quienes compartía últimamente las ~ones de verano.
769
Fundaci\363n Speiro

IN MEMORIAM
Tomás era hermano de la Orden 'Hospitalaria de San Juan de
Dios, y fue inicuamente asesinado con otros 14 hermanos en Cala­
fell (Tarragona) el 30 de julio de 1936, cuando presraban sus ser­
vicios asistenciales a los niños -enfermos en el Sanatorio Marítimo de
Calafell. Antonio Montero registra la actitud martirial en estos
her·
manos en la HiJtoria de la per,ecuci6n religiosa en Esp,ma, 1936-
1939
(Madrid, BAC, 1961, pág. 225). Su hermana María recuerda
a Tomás como "persona muy buena, muy alegre,- divertida y sacri•
ficada. La lectUra asidua del Kempis le movió a dedicarse al cuidado
de. los seres necesitados".
A Teófilo lo descubrió el maesrro de · Echarri, don Nicomedes.
Al percibir su gran inteligencia
y piedad, pensó en orientarlo a los
dominicos. Temía que su pequeña esratura
y poca edad dificulrasen
su recomendación. "Tan chiquitujo no sé si te van a coger, porque
no me van a creer _lo que-les diga," Sí lo acogieron, y él'se encontró
tan bien con. los dominicos qu,e ri.o volvió a casa hasta después de
ordenarse sacerdote. Ingresó, pues, en el Colegio Apostólico
de Las
Caldas de Besaya (Santander) en 1923, y allí cursó Humanidades
hasra 1927. El padre Esteban Gómez, condiscípulo suyo, recuerda al
Teófilo dé entonces y de los restantes años de carrera como. un chico
listo y aplicado,· bueno y formal, observante y piadoso. Los profesores
y condiscípulos reconocieron siempre su
gran capacidad intelectual.
El, por su parte, se mosrró siempre muy dispuesto a ayudar a su•
compañeros de aula, bien en las rraducciones de latín y griego, bien
en
el. acoplamiento de las noras de clase en los estudios superiores.
El 17 de agosto
de 1927 t-0mó el hábito dominicano en el con­
vento de Carias (Asturias) y allí profesó el día 18 de agosto de 1928.
Ese -mismo año, en otoño, empezó los cursos de Filosofía en d Es·
tudio General de Carias (1928-1930). De Corias pasó al convento
de San Esteban de Salamanca, donde hace el tercer curso de Filo­
sofía, junto con la Apologética, y, a continuación, los tres primeros
cursos de Teología (1930-1934). El 28 de octubre de 1934 es orde­
nado sacerdote, en Zamora, por Mons. Manuel Arce
y Ochotorena.
Para hacer el cuarto curso de Teología y practicar
el alemán, los su­
periores le envían a Walberberg (Alemania) (octubre 1934- septiem­
bre 1935). Nuevamente
en ·sáiamanca, hace el quinto curso de Teo­
logía (1936), terminando con el título
.de Lector
(Doctor en
la
Orden).
Durante los años 1936-1938
hizo el
Doctorado en Teología en
la Universidad de
Santo Tomás

("Angelicum") de Roma
y un curso
de Paleografía en el Vaticano. Al regresar a España prestó servicios
de capellán en el Ejército del Frente de Madrid. Terminada la gue­
rra, fue destinado al Colegio. Apostólico. de Corias (1939), donde
770
Fundaci\363n Speiro

TEOFILO URDANOZ .ALDAZ, O. P. (1912-1987)
dio clases de_. francés y de Historia. El año siguiente, 1940, le llaman
a enseñar en el Estudio General de Salamanca. Primero dos cursos
de Filosofía (1940-1942), en los que explica sucesivamente lntro­ ducci6n, L6gica y Metafísica. Luego pasa a enseñar definitivamente
Teología Moral

(1942-1960).
En 1949-1950. tuvo que interrumpir
la docencia para reponerse de una pleuritis. Tuvo que dejar tambiétl
· : la Dirección de La Ciencia Tomista, que había dirigido en 1948-
1949.
'
En 1960 le envían a la Universidad de Friburgo de Suiza, de
profesor extraordinario por cinco
afios, a dar los cursos de Teología
Moral Especulativa, que había dado
anterio,rmente el
P.
Deman, O. P.
De 1965 a 1970 dirige
er Instituto

de Filosnfía de Las Caldas de
Besaya y su propio órgano de publicaciones
Estudios Filos6ficos.
En 1970 vuelve a San Esteban de Salamanca, no como profesor,
sino como investigador y escritor, encargado de continuat la Historia
de la Filosoffa del padre Guillermo Fraile, O. P., que éste había de·
jado sin terminar al sobrevenirle inesperadamente
la· muerte el 29 de
julio de 1970.
En diciembre de 1973 es destinado, finalmente, al
convento de Santo Domingo el
Real de Madrid, donde continuó sus
investigaciones
y publicaciones de
Historia de la Filosoffa, feliz­
mente

concluida con el tomo VIII en 1985. Después de esa fecha
había iniciado una colaboración para· llevar a su término
la Historia
de la Filosofía Española de Solana-Carreras Artau, Cruz Hernández.
A Urdánoz se le encomendó la
Historia de la F;losofia Española de
los
siglos
XVII y XVIII.
Durante el mes de mayo y principios de junio de este año 1987,
empezó a

resentirse · de esclerosis cardíaca. Al final se derrumbó
rá­
pidamente. En la noche de Pentecostés recibió devotamente la Un­
ción de los Enfermos, falleciendo plácidamente tres
· horas

después.
El día anterior aun había asistido
a coro

con
la Comunidad al rezo
del

Rosario. El día 9 de junio se celebró un solemne funeral presi­
dido por el P. Provincial, en una concelebración de 60 dominicos
de los distintos conventos de España, que le rindieron este último
homenaje humano-religioso.
II. , Trayectoria académica, título y cargos.
Aunque no disponemos de certificados de sus notas
. en
los cursos
·de Humanidades

y de Filosnfía, por haber desaparecido, durante
la
guerra, los archivos correspondientes de Las Caldas de Besaya y de
Coria, ·nos consta que fueron siempre sobresalientes. Sí tengo a la
vista el certificado oficial de sus notas de los cursos que hizo en Sa-
771
Fundaci\363n Speiro

IN MEMORIAM
!amanea, del tercero de Filosofía y de los cinco de Teología: so-
bresaliente en rcxlos los cursos y en todas las asignituras. ,
En la tesis de Lectorado (Salamanca) obtuvo sobresaliente y en la
tesis de Doctorado (Roma) mereció
Summa ct,m laude. El

día 29 de
septiembre. de 1959, en el Capítulo General de Caleruega, presidido
por el Maestrq General Miguel Browne,_ se sometió al examen de
"Presentado", fácilmen~e superado, con lQ ·cual le quedaba el camino
abierto para la colación del máximo· grado académico de la Orden,
que es el de Maestro
en Sagrada Teología, que

le confirió formal­
mente el nuevo Maestro General Anicento Fernández el 26
de abril
de

1963. Finalmente, el 19 de mayo de 1980 es elegido Socio de
la
Pontificia Academia
de Santo T<>más de Roma.
Sus cargos académicos dentro de la Orden Dominicana fueron
dos: Vícepresidente de la Facultad Teológica de San Esteban de Sa­
lamanca (1958-1960)
y Presidente del Instituto de Filosofía de Las
Caldas de Besaya (1965-1970).
A
la labor de cátedra hay que sumar. la frecuente participación
activa en Semanas de Filosofía y de Teología, en Conferencias
y en
Congresos nacioriales e· inter11acionles. De sus intervenciones nos que-·
dan sus_ inuchos artículos, .qlle .se registran al ·final. Fue· notoriamente
habitual su asistencia, desde el principio, a las Reuniones de amigos
de la Ciudad Católica, organizadas anualmente por Fundación Speiro.
Durante el Coucilio Vaticano II fue asesor perito del Maestro
Ge­
neral de la Orden Aniceto Fernández.
111. Valoración de su obra filosófico-teológica.
Durante cincuenta años (de 1936 a 1986) Urdánoz ha sido ún
exponente exuberante del pensamiento tomista, tanto en la vertiente
filosófica
como teológica.

En realidad, ha repartido el tiempo casi
mitad por mitad, dedicando veinticuatro años (1940-1942, 1965-1987)
a la Filosofía y otros veinticinco (1936-1938, 1942-1965) a la Teolo­
gía, si bien en sus clases, conferencias y publicaciories se ha inoVido
siempre en ambos campos, como es fácil comprobar en el elenco final
de sus publicaciones.
Pienso que en el futuro Urdánoz será conocido, a.rite todo, por
los cinco tomos de Historia de la Filosofla de los siglos XIX-XX,
continuación de los tres de Fraile dedicados a historiar la Filosofía
de los siglos antériores,
y por la edición, completada por él, de los
dos tomos de
Historia dé la Fi/osofla Española, dejados

casi listos"
para la impresión por
el P.

Fraile al morir en 1970.
Esta obra conjunta de
Historia de la-Fi/osofla de

Fraile-Urdánoz
772
Fundaci\363n Speiro

TEOFILO URDANOZ ALDAZ, O. P. (1912-1987)
ha sido recibida por la crítica como la mejor de las que se han escrito
en castellano o han sido traducidas a nu($tro idioma. Urdánoz y
Fraile se han conjuntado perfoctapiente en un plan y método total­
mente homogéneoS, en estilo fluido y elega_nte a la vez -que conciso;
mucha información y amplitud de criterio para dar entrada a toda
clase de ideas filosóficas, seguida de una valoración critica apurada
de acuerdo con el realismo metódico de dos auténticos tomistas.· Más
que un arsenal de cultura o de erudición filosófica, avalada con la
cita exacra y los amplios elencos bibliográficos· perfectamente clasi­
ficados, lo que más valor
da a
la obra es el esfuerzo sistematizador y
el examen crítico de los diversos sistemas filósóficoS, de sus prin­
cipales protagonistas y de sus seguidores y opositores. No se escatima
· el

elogio según los méritos. Cuando se trata de ideas menos coheren­
tes o inaceptables. desde el punto de vista de la
filosofía cristiana,
no faltan breves y certeras puntualiza.dones.
De señalar alguna diferencia. global entre los tomos . o partes de­
bidas a
Fraile y
los debidos a Urdánoz, yo
diría que
Fraile es más
descriptivo y literario; en Urdánoz sobresale la crítica filosófica.
Cuando murió Fraile, en 1970, quien escribe esta memoria, que
conocía bastante de cerca la competencia y compenetración ideoló­
gica y personal de ambos profeesores, que habían· convivido y cola­
borado en toda la vida académica y religiosa anterior en Salamanca,
sugerí al Padre Provincial que encomendase a Urdánoz la continua­
ción de
la obra de Fraile. Fue un indiscutible acierto.
Al llevarse a término la edición de la
Historia . de la Filosofía,
don Juan Vallet, buen amigo y admirador de Urdánoz, me pidió una
reseña amplia de la obra completa para la
revista Verbo. (Puede ver­
se en núm. 177, págs. 887'894; núms. 235-236, págs. 730-734.) El
día de su Funeral_ me pidió este artículo in memoriam p~a los lec­
tores de Verbo, órgano de expresión de los' amigos de la Ciudad.,
Católica, con los que se sintió tan compenetrado el P. Urdánoz.
Decía antes que Urdánoz pasará a la historia principalmente como
filósofo e historiador de la Filosofía. Pero, en realidad, este quehacer
de historiador lo asumió muy accidentalmente, por la' muerte prema­
tura e imprevisible
· de

Guillermo Fraile. Su
p.tincipal afición
perso­
nal y dedicación más intensa fue la Teología Moral, con especial
querencia por los temas de la justicia y el derecho. S1.ls comentarios
a cuatro de los grandes tratados de la Segunda Parte de la Suma
Teol6gica de BAC han sido muy valorados por los moralistas y uti­
lizados por los estudiantes de Teología
y Derecho. Fue también muy
valiosa su labor en la edición crfrica de las Relecciones de Francisco
de Vitoria
y en la vulgarización del pensamiento teológico-jurídico
del fundad.or del Derecho Internacional. Ya en 1947, con motivo del
773
Fundaci\363n Speiro

IN MEMORIAM
IV céntenario de la muerte del maestro salmantino (1946), Urdánoz
publicó sus Estudios ético-jurídicos en torno a -Vitoria. Desde enton­
ces fue socio de la "Asociación Francisco de Vitoria". Esra familiari­
dad con los _temas ético-jurídicos a nivel teológi~o le han. capacitado
para enjuiciar rápida
y certérament_e los sistemas filosóficos moder­
nos, sobre los que ya había hecho notables excursiones en las leccio-
. nes de Teología Moral, reflejadas en muchos efe sus escritos.
Urdánoz ha
procurado ser
escrupulosamente fiel, con profundas
convicciones, al pensamiento de Santo Tomás y de sus más genuinos
expositores. En
temas. controvertidos dentro de la Escuela, por ejem­
plo el del constitutivo formal de la persona o el de la especificidad
de la

justicia social,
ro.va sus
fluctuaciones,
m1.1y comprensibles.
En
definitiva, ha sido un gratt tomista, _bien andado en. el pensamiento
tradicional y muy abierto a todos los .valores que encontró en los
filósofos
y teólogOS modernos, a los que pudo tener acceso inmediato
por su dominio de sus lenguas. Hablaba fluidamente el
latín, el
ita­
liano, el francés
y el alemán.
Cuando en 1976 se constituyó en Génova la Sociedad .Interna­
cional Tomás de Aquino, promovida por el
Maestro General

de la
Orden Aniceto Femández y
el Cardenal de Cracovia Carlos Wojtyla,
para buscar el encuentro de Santo Tomás con el pensamiento mo­
derno, Urdánoz
figuró ,como
Socio Fundador, muy complacido en
la
idea, por la que él venía trabajando.
IV. Semblanza humano-religiosa .
. Del Teófilo niño y joven ya hemos comprobado que era un chico
listo, estudioso,
forinal, piadoso,
servicial. Por su baja estatura, agra­
dable presencia y talante juguetón, se le
llamó por mucho tiempo
"Teofilín". Quienes

le conocían por sus escritos, tan inagistrales
y polifacé".'
ricos,

cuando se
encontraban personalmente

con
él, · quedaban

sor­
prendidos por su sencillez y familiaridad de
trato, como

de un niño
menralmente sobredesarrollado. Cosa· parecida les ocurría a los estu­
diantes de
Salamanca. Por_ lQ demás, Urdánoz

era más impresionante
leído· que

oído,
pues_ su

dicción no era brillante. En su bien surtida
biblioteca personal
_ apenas

hay
otros libros

que los de teología
y
filosofía. _No usaba ficheros, porque gozaba· de una memoria privi­
legiada.
Religiosamente fue un hombre .profundamente creyente y obser­
vante. Desde que cayó en desuso la
c;lisperu¡a de

los profesores de
asistir a Coro, Urdánoz
aSistió asiduamente

.a
todos los
actos corales,
774
Fundaci\363n Speiro

TEOFILO URDANOZ ALDAZ, O. P. (1912-1987)
incluido el Santo Rosario. En los últimos meses sufría; porque su
estado de salud no le permitía tener Misa con el pueblo.
Durante
la Semana Santa le gustaba salir a hacer ministerio sacerdotal a al­
guna parroquia del norte. También dio algunas tandas de ejercicios
espirituales a religiosas contemplativas.
El
contraste de su gran personalidad con su talante juvenil, y el
desgaste de sus fuerzas físicas y autocontrol psíquico, le hicieron ser
un enfermo difícil eó. la larga estancia en la Oínica de San Camilo
(10 de enero de 1985
-26

de marzo de 1916), donde sufrió una com­
plicada intervención quirúrgica de peritonitis. Todos comprendimos
perfectamente su situación y le acompañamos amiStosa y caritativa­
mente. _ La afección cardíaca que le sobrevino el último mes fúe me~
nos molesta y más agotadora. "Esto se acaba", me dijo momentos
antes de administrarle la Unción de los Enfermos.
A
ráfz de
su muerte, "Ovidio", en la sección "Zigzag" de ABC
(11-VI-1987) lamentaba, con razón, que Urdánoz pasase como un
"desconocido". Sí, poco conocido en los amhientes· publicitarios, _que
cometen- estas discriminaciones injustas. Pero también
hay que reco-­
nocer que en los ambientes filosóficos y teológicos, especialmente de
lengua hispana, Urdánoz viene siendo conocido
y adtnirado desde
hace muchos años._ Con el tiempo, espero que lo sea más.
V. Publicaciones por orden cronológico.
A. Libros.
1947.
l. Estudios ético-jurídicos en torno a Vitoria.. En el IV Centenario del
Maestro Salmantino.
Aparte de «La Ciencia-Tomista». Salamanca, 1947.
1954.
2. Tratado de las virtudes y dones en general. Traducci6n y coinentario
·a la Suma Teo/6gica, I-II, qqc 49-70. Madrid, BAC, 1954.
3. Tratado de la bienaventuranza y los rictos humanos. Traducción y co­
mentario a la Suma Teol6gica, I-II, qq. 1-21. Madrid, BAC, 1954.
1955.
4. Tratado de la religión, las virtudes sociales y la fortaleza. Traducción
de la Suma Teo/6gica, II-II, qq. 80-140. Madrid, BAC, 1955.
1956.
5.

Tratado de
la iustida. Traducción y co.tneJ).tario a la. Suma Teolágica,
II-II, qq. 57-59. Madrid, BAC, 1956. .
775
Fundaci\363n Speiro

IN MEMORIAM
1959.
6.
Tratado de lp fe y de la esperanza. Traducción y comentario a la
Suma Teol6gica, II-II, qq. 1-22. Madrid, BAC, 1959.
1960.
7. Francisco de Vitoria. Relecciones. Edición crítica, traducción y co·
mentarios. Madtid, BAC, 1960.
8. Existencialismo y filosofía de la existencia humana. Aparte de «Es­
tudios Filosóficos», Las Caldas de aesaya, 1960.
1967.
9.
· Desarrollo de los pueblos. Ed. OPE, Pamplona, 1967.
1971.
10.
Historia de la_ Filosofía Bspañola, I. Edición revisada y ultimada de
la obra de Guilletmo
Fraile, O.

P. Madrid, BAC, 1971.
1972.
11. Historia de la Filoso/la Española, II. Edición revisada y ultimada de
la obra de
Guilletmo Fraile,

O. P. Madrid, BAC, 1972.
1975.
12.
Historia de la Filosofia, t. IV, .Siglo XIX. Kant. Idealismo. Espi­
ritu_alismo, Madrid, BAC, _1975.
13. Historia de la Filosofia, t. V, Siglo XIX. Socialismo~ Materialismo.
Positivismo,
Kierkegaard
y Nietzche, Madrid, BAC, 1975.
1978.
14. Historia de la Filoso/la, t. VI, Sig/,o XX. De Bergson al final del
existencialismo, Madrid, BAC, 1978.
1984.
15. Historia de la Filosofia, t. -VII, Siglo XX. Filosofía de las Ciencias.
Neopositivismo
y filosofía analitica, Madrid, BAC, 1984.
1985.
16.
Historia de la Ft1osofía, t. VIII, Sigk, XX. Neomarxismo. Estruc~
turalismo.

filosofía de
inspiraci6n cristiana, Madrid, BAC, 1985.
776
B. Artículos.
[Siglas: C. T. = La Ciencia Tomista; EF = Estudios Filosóficos;
RET = Revista Espaliola de Teologia; I-M = Iglesia-Mundo; VS =
La Vida -Sobrenatural.]
Fundaci\363n Speiro

TEOFILO URDANOZ ALDAZ, O. P. (1912-1987)
1936.
17. La mediación de Maria en la teología moderna, en «VS», 31 (1936): 334-344.
1937.
18. Crónicas del movimiento científico y cultural, en «CT», 56 (1937):
116-124; 74 (1948): 129-130, 328-333; 75 (1948): 327-330; 76 (1949):
148-149, 332-335.
1940.
19. La necesidad de la fe explícita para salvarse, según los teólogos de
la Escuela Salmantina, en «CT», 59 (1940): 398414, 529-553; 60
(1941):

109-134;_61 (1941): 83-107. Extracto de
la tesis doctoral.
20.
Boletín de Teología Dogmática, en «RET», 1 (1940-1941): 611-641.
1941 ..
21. El principio de causalidad, en «CT», 61 (1941): 163-188.
1942.
22. La teología del acto· sobrenatural, en la Escuela Salmantina, en «CT»,
62 (1942): 121-145; 63 (1942): 5-29.
1943.
23. La catolicidad de las leyes de Indias, en «CT», 64 (1943): 347-351.
24.
La justicia legal y el nuevo orden social, en «CT», 65 (1943 ): 1~14; 67 (1944): 200-233.
25. La obligación de las leyes del Estado y el abuso de los Precios, en
«CT», 65 (1943): 233-250.
26.
Notas críticas, en «CT», 65 (1943): 83-93; 71 (1946): 341-346; 75
(1948):

318-323; 76 (1949): 141-145, 325-331; 77 (1950):
242-245;
81 (1954): 147-151; 82 (1955): 645-656; 84 (1957): 674-681.
27. Santo Tomás y el orden sor;ial cristiano, en «Cisneros», 3 ( 1943 ):
13 y sigs.
1944.
28. Santo Tomás de Aquino y la personalidad -humana, en .«CT».~ 66 (1944): 188-198.
1945.
29. Juan de Santo Tomás y la trascendencia sobrenatural de la gracia san­
tificante, en «CT», 69 (1945): 49-90.
30.
Boletín de Teologia Moral, en «CT•, 68 (1945): 230-285; 75 (1948):
116-147,
777
Fundaci\363n Speiro

IN MEMORIAM
1946.
31. Distinción entre el Derecho y.la Moral, en «CT», 70 (1946): 336-348.
32. Boletln de Filoso/la Existencial, en «CT», 71 (1946): 116-162, 466-
534. .
33. La inhabitaci6n d_el Esplriiu Santo en el alma del iusto, en «RET»,
6 (1946):
465-533.
1947;
34. Vitoria y el concepto de Derecho natural, en «CT», 72 (1947): 229-
288. Idem en <(Anuario de la' Asociación Francisco de Vitoria», 8_
(194S): 261-333.
35.
Vitoria y la concepción del poder público, en «CT», 73 (1947): 234-
285.
1948.
36. I nfluio causal de las Divinas Personas en la inhabitaci6n en las a/,mas
iustas, en «RET», 8 (1948): 143-202. ·
37. El sentido cristiano de la democracia y la teoría clásica del Poder
Público, en «CT», 74 (1948): 240-293.
38. Teorla de los valores, en «Actas del Congreso Internacional de Fi­
losofía». Barcelona, 1948, II, págs. 933-960.
1949.
39.
Filosofía ddos valores y filoso/la del ser, en «CT», 76 (1949): 86-112.
1952;
40. La conciencia moral en Santo Tomás y los sistemas morales, en «CT»,
79

(1952):
529-576.
41. Esencia y Proceso psicológico del acto libre según Santo Tomás, en
«EP», 21 (1953): 291-318.
1954.
42. El problema del orden mortil y sus normas según Santo Tomás, en
«CT», 81 (1954): 241-275.
43. La teoría de los hábitos en la Filosofía moderna, en «Revista Espa­
ñola de Filosofía», 13 (1954): 89-124.
1955.
44. Bl precepto de la per/ecci6n, en «VS», 57 (1955): 164-176.
45. Las dotes del alma en. la gloria, en «VS», 57 (1955): 401-412; 58
(1956): 24-33.
46.
Bl pecado filos6/ico, en «REF», 1955: 550-559.
47. Las tendendas actuales en Teologia espiritual a la luz de la Teologfa
778
Fundaci\363n Speiro

TEOFILO URDANOZ ALDAZ, O. P. (1912-1987)
mística,
en «CT», 82 (1955):" 225-284. Idem· en «Congreso de ciencias eclesiásticas de Salamanca». Barcelona, 1957: 137-187.
1956.
48.
Teolo¡ja de la obediencia_ religiosa, en «CT», 83 (1956): 219,270. Idem en «Actas del Congreso Nacional de apostolado y perfección», III, Madrid, 1958: 170-203. 49. Problemática general y principios de toda moral profesional,~ en «XV Semana Social de España», 1956: 19-61.
50. Teolog/a de la virtud de /a obediencia, en «VS», 57 (1956): 249-265.
51. The Glory of God, en «Cross and Crown», 8 (1956): 202-215. 52. La teoria del medio virtuoso y la motivación de la virtud, en «RET»; 16 (1956): 53-63.
53. La libertad en el orden moral, en «EF», 5 (1956): 543. Idem en «Semana Espafiola de Filosofía», 1957: 350-394.
1957.
54. Lo mudable y lo inmutable en la Iglesia, en «RET», 17 (1957): 79-96. · 55. El fin y la forma constitutiva de los seres morales, en «ET»;6 {195~):. 325-332. 56. Sociologla y Psicoanálisis, en «EF», 6 (1957): 137-151. 57. La unión de los Institutos Religiosos, en «CT», 84 (1957): 75-93.
58. Para una filosofia y teología de la esperanza, en «CT», 84 (1957): 549-612. -59. La iusticia del buen gobierno en la teologia de. Santo-Tomás, en «Rev. de Est. Poi.>, 60 (1957): 99-133. 60. Teologia dogmática y teologia espiritual. Barcelona, Ecl. J. Flors, 1957, págs. 137-187.
1958.
61. Los dones del Espiritu Santo co"espondientes a la fe, en «Teol. Es­piritual», 2 (1958): 395-419_.
1959-
62. La finalidad del mundo, en «EF», 8 (1959): 233-241.
63. Aspectos de /a psicologla de la fe, en «RET>, 19 (1959): 5-38.
1960-
64. Universal obedience, en «Cross and Crown», 2 (1960): 23 y sigs.
1961.
65. La Universidad ·católica de_ Friburgo de Suiza, en «CT», 88 (1%1): 591-617. Idem en «Verdad y Vida>, 19 (1961): 551-573.
779
Fundaci\363n Speiro

IN MEMORIAM
66. El Concilio Ecuménico .Y la reforma de la Iglesia según Francisco de
Vitoria, en «Miscelánea Comillas», 34,35 (1961):
119-151.
1962.
67.
Caridad social, alma l complemento del orden social, en «Anales de
Moral Social y Economica», vol. I, Madrid, 1962, págs. 11-41. Idem
eo
«Sapientia», 17 (1962): 7-36.
68.
Participaci6n activa

de los obreros en
la vida de la empresa, .en «CT»,
89 (1962): 383-423, 543-579. Idem
en «Anales de Moral Social y
Económica»~ vol. IV, Madrid, 1963.
1964.
69. La naturafeza -teológica de los Concilios Ecuménicos y la Colegialidad,
en «Los Concilios y la Co!egialidad Episcopal», Madrid, CSIC, 1964.
70. Los Concilios y la Colegialidad Episcopal,, en «CT•, 91
(1964): 431·
580.
1966.
71. La presencia de la filosofia perenne y tomista, en «EF», 15 (1966):
21-66.
72.
Dos obras· de crítica en torno a T eilhard de Cbardin, en «RF», 15
(1966):
137-147.
73. En torno
a/, diálogo con el marxismo, en «EF», 15 (1966): 149-153.
74. Actualidad del ideario internacionalista de Francisco de Vitoria, en
«EP», 15 (1966): 243-313. · ·
75. La crisis de la religi6n en el pensamiento de Bonhoeffer, en «EF»,
15

(1966): 569-572.
76. I
Reunión de

Profesores de
F,1oso/la en

Comillas,
en «EF», 15 (1966):
573-585.
17. De momento tradítionis tractandae in Ecclesiologia, en «Angelicum»,
43

(1966): 396-405.
1967.
78.
Pacifismo y gue"trjusta, Vitoria y el Vaticano II, en «EF», 16 (1967):
5-64.
79. La nueva Enciclica social «Populorum Progressio», en «EF», 16
(1967): 293-343, 423-480.
80. Síntesis teol6gicu-;uridica de la doctrina de Vitoria, en «Vitoria, Re­
lectio de Indis, Corupus Christianorum de Pace», Madrid, 1967, pá­
ginas XLm y sigs.
81. In memoriam P. Santiago Ramírez, O. P., 1891-1967, en «EF», 16
(1967): 581-586.
1968.
82.
Normas ético-sociales derivadas de la «Populorum Progressio», en
«EF», 17 (1968): 125-143.
83. In memoriam Bmil Brunner,
1889-1966, en «EF», 17 (1968): 151-153.
780
Fundaci\363n Speiro

TEOFILO URDANOZ ALDAZ, O. P. (1912-1987)
84. Sobre la superación actual de la doctrina social de la Iglesia, en «EF»,
17 (1968): 345-373, 525-550.
1969,
85. El mito de la pena en la filosofía moderna y la filoso/ia religiosa a_c­
tual. Comparación con la filosofia penal de Santo Tomás, en «EF»,
18 (1969): 125-146.
86. Para mejor comprender la Enciclica «Humanae Vitae», en «EF», 18
(1969): 203-238, 465-510. .
87. Situación límite del hombre y su existencia en dimensión de tTaJ1S·
cendencia. Karl Jasper y Santo Tomás, .en «EF», 18 (1969): 285-306.
88.
Clásicos de la ciencia jurídica y politica española, en «EF», 18 (1969):
527-540.
89. Pacifismo y guerra justa, en «Universidad de Santo Tomás», 11: lQJ-
125. Bogotá, 1969.
1970.
90. La antropologia filosófica y su síntesis, en «EF», 19 (1970): 33-78.
91. El problema de la funda1iae1t._taci6n del -ser. Una confrontaci6n de
Heidegger con Santo Tomás, en «EF», 19 (1970): 203-218.
92. Las pruebas complementarias de la existencia -de Dios, en «EF», 19
(1970): 283-332.
93. Fuentes de la doctrina .de la Orden Dominicana y sus ediciones cri­
ticas, en «EF», 19 (1970): 393406.
1971.
94. Santa Catalina de Siena, Doctora y educadora de la Iglesia~ en «VS»,
51 (1971): 119-126.
95. Santa Catalina de Siena y su magisterio teol6gico espiritual, en «VS»,
51 (1971): 331-344.
1972.
96. El Evangelio sin mitos de Luis Evely condenado por el Episcopado
Francés, en «I-M», 31 (1972).
1974.
97. La morale e il suo vafore. oggettivo, en «Chiesa Viva» (Brescia), 36
(1974): 15-16.
98.
La ética a través de la moderna filosofía analitica, en «Revista de Es·
tudios Políticos», 213-214 (1974): 341-357.
99.
J. Moltmann y la destrucci6n del Derecho natural~ en «Rev. Est.
Po!.», 195-196 (1974): 231-237. .
100.
Las Casas y Francisco de Vitoria. En et V Centenario del nacimiento
de
Bartolomé de Las Casas (1474-1974), en «Rev.

Est. Poi.», 198
(1974):

115-191; 199 (1975): 199-222; 211 (1977): 171-213.
781
Fundaci\363n Speiro

IN MEMORIAM
101. Los inicios del neotomismo en. España, en «RET», 34 (1974): 403-
423.
1975.
102. Los dos planos de la Metafísica y de la Fenomenología, en «Sat,ien­
tia» (Buenos Aires), 30 (1975): 13-36.
103.
La nueva_ moral, el pecado y la penitencia, en «Roca Viva», 1975:
656-661,
644648, 791-801.
104. La crisis de la Iglesia coincide con el abandono de la doctrina del
Aquinatense, en «I-M», 90 (1975).
105. Valoraci6n de la opcián fundamental y de las aptitudes a la luz de
la moral católica, en «I-M», 95 y 96 (1975).
106.
La moral y su valor obietivo, en «Angelicum», 52 (1975): 175-207.
1976.
107. Las Casas et la politique des droits de l'homme, Aix-en-Provence,
1976: 235-302.
108.
Las Casas y Vitoria, en «Verbo», marzo-abril 1976: 313-336.
1977.
109. Teoría y praxis en el pensamiento filosófico y en las nuevas teologías
socio-políticas,
en «Rev. Est. Poi.», 211 (1977): 171-213. Idem en
«Atti
del Congresso,. lnternazionale Teoria e praxi», I, Napoli, 1976:
453-491.
110.
La Etica a travis de la ·moderna filosofia analítica, en «Rev. Est.
Poi.», mayo-agosto 1977: 341-358.
1978.
111.
Función de la raz6n en la Etica, en «Sapientia», 33 (1978): 99-132.
112.
Etienne Gilson, fil6sofo de la Cristiandad, en «Ya», 12-X-1978: 9.
113. Metafísica y Fenomenología, en «Atti del Congresso Internazionale
Tommasso
d'Aquino nel suo settimo centenario», Napoli, 1978, VI:
573-593.
114. Escándalo en una Mesa Redonda, en «1-M», junio 1978.
1980.
115. · El VIII Congreso Internacional Tomista, en «Verbo», nov.-dic. 1980:
1.392 Y sigs.
116. R,.eligiones no cristiafll)s, en «Enciclopedia Universal Básica», I, 1980.
117. La
teología moral desde la Encíclica <1.Aeterni Patris», en· <1.Sapientia»,
35
(1980):

405-434.
Idem en «Atti del C.Ongr. Intern. T-OlllÍsta»,
vol. VI, 1981.
118.
Faith, en «New Catholic Encyclopedia>. Washington.
1981.
119. La filosofía analítica actual y su terapia mediante la filosofía cristiana
y tomista, en· «Actas ·del I Congreso ·Mundial de Filosofía Cristiana,
782
Fundaci\363n Speiro

TEOFILO URDANOZ AWAZ, O. P. (1912-1987)
Córdoba (Argentina)>, t. III, 1981: 1.083-1.107. Idem en «Sapien·
tia», 34 (1979).
1983.
120. Pecado personal y pecada colectivo, en «1-M», 254, junio 1983.
121. Ortega y Gasset y la cult•ra, en «Studium», 23 (1983): 279-303.
1984.
122. Santo Tom4s y la Escolástica, en «I,M», 269, enero 1984.
123.
Año ordinario celebrado de modo extraordinario, en «I-M», 2n
(1984).
1985.
124. El liberalismo y sus errores, en «I-M»; 290-295, enero-ma·rzo 1985.
Reproducidos en nn solo artículo en_ «Verbo», enero-febrero 1986:
189-221.
125. La síntesis doctrinal de Santo Tomás sobre ·¡a libertad humana, en
«Arqué» (Argentina), 3: 1-31.
Nota: A-esta amplia producción literaria en libros y artículos hay que-afia­
dir las numerosas reseñas bibliográficas en estos cincuenta años en
«La Ciencia Tomista», «Estudios Filos6ficos» y «Revista Espafíola de
Teología».
VICI'ORINO RODRÍGUEZ, Ü. P.
783
Fundaci\363n Speiro