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Número 187

Serie XIX

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Discurso de Benjamín Cervantes [San Fernando 1980]

nos la dio Antonio Rivera antes: es necesaria una formación cristiana
de la
conciencia de
los españoles;
dando. un paso más, podemos decir
que
es
necesario formar

líderes, líderes católicos, formar
ap6stoles.
Como

decía al
princi¡n"o, es cierto que la juventud española ha de­
jado de ser católica, pero no es menos cierto que
todavía quedan algu­
nos j6venes católicos; tenemos que reconocer que pocos, pero esto no
significa
nada, pues

menos eran los Apóstoles. e
hicieron la labor que
Jesucristo les encomendó.
Pues bien, muchos

de estos jóvenes tratan· de
ser. auténticos

católicos,
es así como surgen los movimientos juveniles
católicos;
algunos, los menos, logi'an mantenerse con vida;

otros,
los,
más, se hunden nada más nacer, si es que llegan a nacer, y esto último
¿por qué?, la respuesta puede ser que
muchos de estos grupos se poli­
tizan,
pierden su esencia, podríamos decir de
nuevo que
"para conquistar
a España para Cristo hace falta
una-fuerza

más penetrante e íntima
que la
de los partidos políticos, y que sólo reside· en la Iglesia y en. la
unidad
de fe de
los españoles''.
Speiro realiza una gran labor al formar 'a j6venes en la doctdna
católica y tradicional de la Iglesia; es imprescindible que esta labor no
sólo continúe,
silio que
sea intensificada.
Es necesario formar líderes ca­
tólicos, formar apóstoles; esta es la .. respuesta a la actual situación de
España. Para Dios y para España se necesitan jóvenes católicos dispuestos a
difundir
estar ·dos grandes máximas: Dios y Patria, dispuestos a ser
apóstoles y soldados entre sus compañeros, sus amigos y enemigos, para
que todos vean que aún quedamos
católicos españoles dispuestos para
la

santidad,
templados en tono heroico y capaces de dar la vida por el
perdón y la salvación de los españoles, para que asf los J6venes que
sienten
profundamente
·a Dios y a España y están aún do;midos, pierdan
el
miedo
y se unan como apóstoles y soldados en la consecución y en la
defensa de esa España qúe todos queremos, una Patria católica.
DISCIJRSO DE BENJA.MIN CERVANTES
Honorable Presidium, amigos de la Ciudad Católica, en esta ocasión
se
me
ha conferido el honor de dirigir a ustedes -la palabra, agradeciendo
su
benevolencia. Hay nas reunimos para conmemorar ·la festividad de nuestra Santo
Patrón, San Fernando, quien fue rey de Castilla
y León.
En todas
las époctlS de la historia se han dado grandes personajes.
pero
la Edad Media es. sin duda, la que más grandes santos
y personajes
ha dado. · Fernando III de Castilla es un gran ·santo y un gran personaje de la
Edad Media, su
santidad · 1a ob"tUvo con la rectitud de su vida como
gobernante cristiana. Hoy. no me propongo biografiar a nuestro Santo
Patr6n, sino ertraer
algunas

enseñanzas de su vida,
·qúe sitvan de ejemplo para nuestra exis­
tencia.
En Fernando III

de Castilla se dieron cuatro constantes, que fueron:
l. Su acendrada religiosidad.
2. Su vocación de reconquista.
3. Su anhelo de Ullídad de España. 4. Su deseo· de no pelear nunca contra príncipes cristidnos.
941
Fundaci\363n Speiro

Desde. -su tierna infancia, Fernando '111 .de ·Castilla adquiere una pro­
funda .religiosi fue

la
norma de su vida, después' de· $U milagrosa
curación ..
Esa religiosidad, fue

la que
,silnti/iCó todos

·sus
actos.
En. cuanto·,d, sil. 11ocaci6n de· reconqUista, vimos que fue· también desde
pequeño
un
.pensamiento sobrenatural .en él,. .. y· que en su-niñez le hizo
soñar.

con
grandes .empr:esas,, guerreras -c9ntra. -el infiel~· esta-asplración
la

-convirtió
·en·. realidad- una véz .que· adquirió• la curcma de Castilla, por
cesión. que.-su m(Ulre hizo a· Su favor. •. ·i.
España fue .. invadida por -los , musulmanes.· como -consecuencia de la
traición, de un obispo y el- resentimiento .de un -súbdito,-pero, no obstante
ello, los ·sufrimientos·

de·
España· pará .expulsar -aJ.. irifiel no fueron eSté­
riles,
los -m~ritos. que obtuvieron· de-ese'. sacrificio

fueron
el haber forjado
una
Patria,. ha})er-configumdo. una:nación y·haber témplado el ·carácter
español en la., lucha, cuyos po,sterio1tes., .frutos fueron el descubrimi"ento
y conquista La llamada sobrenatural de San Fernando ,a la reconquista hacía
que él sintiera como un .deber. de. Conciehcia. el. ·.expulsar id infieZ:-dél te­
rritorio usurpado -y ganarla, no para satisfllt:er,ambiciones personales, sino
para
dar-.mayOll ;glOTl'a. ,a -·Dios, de -·quien-se ·consi'deraba súbdito:; como
pruebas dio a.:Jo-./argo. de ,su·.·vida, ·Y ·aurt:-.en los. úhimos, momentos de
su existencia.
-
Pero -la pasión ·por··la rec;onquista se

-.vuelve
más'-intensa cuartdO--ad­
quiere Ja-. cor(Jna de[..·.Reino dé--Le6n, Y 'con elltrse. inicia ,.para áiempre
la unión· de. --España~ ·
Cierto es· .i¡ue:.Sdn~·Fernando '-no logró consumar· la--reconquista· como
era su ideal;--en parte se debe a circunstancias. fortuitas que se lo impi~
dieron-, ·siendo:-la'.mu-ert-e del arzobispo·:de TOleao,-diYn -R'Odrii;o-de Rada,
y la muerte de--su :'madre, doña.Berenguela,. ambos eran los· pllares en
que San
Fernando -apoyó toda su obra~ · , · ·
En .cuanto. a·, la Unidad ., de ,Espaji,a, tainbi-ét:t -·deb~inos .observar , que
él toma conciencia de la necesidad imperiosa de la unidad, asi como
de
los incony(!_nfentes de, la .existe~cia de mu_ch~ reinos, que motivan
conflictos
elitr'é 'príncipes cniJti/Jruis,:-yique .-retardan lci -reconquista.
Esta idea de unidad la tuvo siempre presente
y la inicia cuando une
10$ coronas~ Castilla y Le6ií, qUedando'.·ambos·reínos·'.baJi> un mismo
cetro. y· urta.,niisma· corána:·· Estacobra de ·unidad dé ·E-spilfía la concluyen
los Reyes Católicos, doña Isabel
y don Fernando, posteriormente.
La idea-' de· uñidad-·'era una· -aspiración de .muchos reyes cristianos,
pero fue
San F"l!rnando·--'quien · seriamente ,la sintiá y· realiió, y .at morir
hereda ·a ·su hijo ,Alfónso X-'er-Sabio ti:Jaos· sus reinos; no cometien·do el
·error de sus-antecesOres -de repartir· los reinos -entre. sUS ihijos.
La unidad de España, San Fernando la va consolidando a medida
que· fue·

uniendo
los nuevos reinos a :su cormia.
En la actualidad debén '.Ser ·-la religiosidad, .la :vocación de i:ánquista
y

defensa de la unidad de España, las constantes de:
lil. '\Jida de. los es-
·pañol'es. ; -· ' ·
Todós los·
ac-tos -de TlueStra: vida deberán estar impregñados de reli­
giosidad, siendo la vida de la gracia la que habite en nosotros.
Lit. V.ocaci6n: de-reconquista··es-ótra cohStanie {jue.-debe·injorihar toda
nuestra
actividad, pues cierto es -había dicho antes- que España fue
invadida por el infiel como consecuencia de una
·.traición y del resenti­
miento; pues bien, hay nuevamente, por la.
tráici6n" ·Y .el

resentimiento,
España
estd siéndo asaltada por

otros-.y
modernos infieles.
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Fundaci\363n Speiro

' Sea Ja vocación de reconqitista la que mueva a España a luchar hoy
con

ánimo de
cruzada.-a

obtener la -victoria.· Y
considérando-un

debe,
expulsar· a esos
nuevos infieles-de

los puestos que
u'surpan en la

sociedad,
no
·para .satisj-acer orgullos

personales a
winagloriarse, sino pato dar
mayo1
gloria a Dios, de
·quien, como San Fernando, también

somos súbditos.
La ·unidad de
E.;;paña; que realizó San Fernando, se

pone
en entre­
dicho;

y,
·en ·la actualidad, se

pretende romper. Y- rota la unidad de
España; /ti, hispanidad también- se desintegrarla espiritualmente, pues de­
jaría de
encontrar. su
origen ·común en lo- que aún
hdy se llama España.-
Por

éso se
debe luchar y defender

la
unidad de_ España, que fue-

caro
ideal de San FeriJandos· conscientes de :que ál-defenderla se

lucha tam­
bién por
fa. ·unidad espiritual

y moral·
ile Hispanoamérica.
Por··último, hay, "én-·-la
festividad

de San Fernando, pidámosle
qué
interceda

por nosotros
y nos ayude a conservar su obra, gan,ada con un
sacrificio ingente, y a perseverar en la lucha y que nuestro esfuerzo no
se pierda en luchas. estériles entre los
propi'os cristianos

(cat6licos).
DISCURSO DE JOSE ANTONIO G. DE CORTAZAR
Y SAGARMINAGA
· · Verbo y Speiro, cuyo principal objetivo es la fOrmación civica y ac­
ción
cultural

según el derecho natural_ y
cristJ'.ano, continúa, modesta
pero
incansablemente, sU , iabOr. En

el seno
de'-la Revista y
de la Edi­
torial siguen presidiendo
las ideas con las que se lanzaron esforzadamente
a

la calle, y estos postulados sanos se mueven en un
abanico amplio
al
servicio de la Religi6n y de la Patria. No
hay nada monolítico

en su an­
dadura: en lo esencial, sí; en
lo acciden!al, libertad, y, en todo, caridad.
Verbo, conio una luminosa fragata, permanece en su rulllbo empu­
jada
por el me;or de los vientos que no .figura en
las cartp.s marinas:

el
del
espiritu. Speiro e,zriquece.:día a, dia e_l arsenal ideal6giqo de una tra­
dición válida, no sólo
para nuestro
tiempo,
sino también
para los años
futuros, a los que entregará su glorioso relevo.
Vivimos nuestra fidelidad a Cristo, nuestra obediencia al Magisterio
de la Iglesia, nuestra lealtad
al derecho natural. y cristiano., Esta es nues­
tra

labor en el mundo de
las ideas,
de los sentimientos
y de la acción.
Tarea

callada, casi insignificante para los ojos de_
muchos, en
estos atri­
bulados tiempos dr demagogia irresponsable, de deserci6n
y de autode­
molici6n

de
creencias perpetuamente vi'vas. PerO no

hay que olvidar
que también existe una labor optimista
y: atrevida, con Jógi"ca y arrojo,
que todo lo justifica, que es la del servicio de la verdad.
San Fernando, constructor de catedrales y de sueños,
_milita al /renté
de

nosotros, más vivo que nunca. Como su Cruz y
su e~piritual espada.
Sepamos
servirnos de su heroismo
y su santidad· que no se quiebran con
las virutas

del tiempo. Nos obligamos a ser
dignps de su

.valor y
de
intentar

apasionadamente, con la ayuda de Dios y de Santiago, acercar­
nos con constancia y trabajo a la marvillosa hoguera inextinguible de
su inmortal capitanía.
No
caigamos en

el profundo error de la
desesperación, del
inmovi­
lismo, de la vida no
vivida de

la que hablaba Rilke. La vida es entu­
siasmo, ímpetu, energía
y, sobre

todo, fe y amor. Pero todo, como San
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Fundaci\363n Speiro