Hacia una nueva civilización cristiana

CRÓNICAS Y NOTICIAS.
HACIA UNA NUEVA CIVILIZACION CRISTIANA
Durante los días 9 y 1 O de febrero del presente año 1991
se ha celebrado en Lourdes el III Congreso-Peregrinación orga­
nizado por el
Centre Montauriol bajo el lema «Plaidoyer pour
la Civilisation Chrétienne». En cietto sentido este tercer congreso
no es sino una prolongación
de la temática que fue desarrollada
el pasado año, en el segundo congreso, y que versaba sobre la
identidad católica europea.
En esta ocasión y al igual que en las
anteriores, debemos destacar el éxito notable alcanzado por la
organización, tanto por la calidad y número de asistentes (
cetca
de un millar pese a las dificultades climáticas), como por el in­
terés
de las ponencias presentadas.
El Centre Montauriol, con fuette implantación en el sudoeste
francés,
es una organización orientada a la reconquista del orden
social católico.
Su propio nombre, tomado de un monasterio
benedictino situado en Montauban y fundado hacia el
750 para
combatir los últimos
focos que el arrianismo tenía en la región,
evoca la fecundidad de la Iglesia y la Cristiandad.
Su método
de trabajd
es deudor parcialmente, como lo es el nuestro aunque
por distintas vías,
de[ que Jean Ousset adelantó primeto en la
Cité Catholique y luego en el OHice International des oeuvres
de
formation civique et d' action culturelle selon le droit naturelle
et chrétien o el ICTUS actual, y, por tanto, puede resumirse en la
bipolaridad formación-acción:
- Formación porque
nd cabe restauración cultural, social,
política o espiritual sin conocimiento de las bases
de la dactrina
social de la Iglesia y del orden social y político que de ellas se
derivan,
ni sin la comprensión precisa de los males que padece­
mos y de los remedios que pueden combatirlos. Para asegurar
esta formación, el
Centre Montauriol propone el trabajd en cé­
lulas con reuniones semanales, así como otras más generales que
se realizan en coloquios y ponencias varias veces por año.
- Acción a través del combate de las ideas, conquistando
con la verdad e invitando a pensar sobre los temas realmente
importantes mediante adecuados instrumentos de reflexión, tales
Verbo, núm. 293-294 (1991) 517
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JUAN CA YON PERA
como periódicos, revistas y libros, sin renunciar a otros medios
más modernos como los cassettes y videos. También se mani­
fiesta la acción a través
de un trabajo más concreto y difícil en
el dominio cultural, social
y político, y, finalmente, actuandd
sobre las propias instituciones o estructuras sociales
y políticas
existentes en nuestro entorno como familia, escuelas, universi~
dades, empresas.... Los hombres preparados para la acción de­
berán utlizar las institucidnes a su alcance para orientarlas de
modo que
se materialicen así los principios de la doctrina católica.
* * •
En esta labor de carid.ad política y de reconstrucción de la
sociedad fieles a la esperanza cristiana, cuentan con la amistad
y el apoyo de diversos intelectuales católicos, principahnente de
Francia
y también, aunque en menor medida, de toda Europa.
En efecto, este año han participado en el congreso Gustave Thi­
bon (aunque, finalmente, no pudo desplazarse a Lourdes debido
a
la climatología adversa), Alexis Arete, el coronel De Gestas,
Daniele Masson, el profesor Sicard, nuestro amigo Miguel Ayuso
y Jean de Viguerie entre otros.
Concentrando toda
la actividad de los dos días en algunas
lineas, diremos que Arete explicó
el papel universal de la cultura
católica a través de la sociedad rural, con gran competencia, pues
no en vano
es Consejero Regional de Aquitania y presidente de
honor de la Federación Francesa de Agricultura. El coronel
De
Gestas por su parte se refirió a la específica acción de los cató­
licos dentro del mundd empresarial. La historiadora Daniele
Masson disertó sobre algunos de los mitos existentes sobre la
nación francesa, estudiando la verdadera esencia e identidad del
país vecino ; fue destacable también
su profundización en los
errores
y contradicciones en que incurre la Nouvelle droite. Re­
sultó especialmente interesante e instructivo su estudio, así como
seguir el curso de las investigaciones que prepara. El profesor
Sicard hizo
un brillante excurso histórico sobre el catolicismo sa­
cia! en Francia, mientras Miguel Ayuso se ocupó de las exigencias
católicas
del orden internacional
como presupuesto de una futura
civilización cristiana. Finalmente, Jean de Viguerie, director del
Centre de Recherche d'Historie religieuse et d'Histoire des
idées
y profesor de historia en la Universidad de Lille, quien por cier­
to nos reveló que
se encuentra preparando una magna obra sobre
el siglo de las luces
y dirigiendo un vocabulario de la Revolución
francesa, trazó una magistral
y apasionante comparación del oc-
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cidente cnstlano con las otras civilizaciones, profundizando en
cómo
es el cristianismo el único factor que ha unido las diferen­
tes historias de los países de Occidente y en el hecho de que en
la actualidad, y especialmente desde 1789, sólo
se habla de re­
voluciones y no de reformas como consecuencia del odio al pasa­
do y del expansionismo radical y devastador del estado laico na­
cidd de la Revolución francesa. Arnaud Jayr, presidente del
Centre Montauriol, fue el encargado de presentar las jornadas
y formular las conclusiones del congreso.
En lo que se refiere a la misión del Centre Montauriol como
paladín de la esperanza cristiana, recibe el apoyo de destacadas
instituciones religiosas,
y si el pasado año lo más llamativo fue
la
misa pontifical del cardenal Stickler, según el rito tradicional
romano, este año no ha de considerarse como menos importante
la presencia de dom Gérard Calvet, O.S.B., abad del monasterio
de Sainte Madelaine de
Le Barroux, quien además de celebrar la
Santa Misa, disertó, a través del ejemplo de San Bernardo, sobre
el lugar que debe ocupar
la espiritualidad en la construcción de
la verdadera civilización cristiana. También se hizo notar, como
viene siendo habitual, la colaboración entusiasta de los miembros
del
Institut du Christ-Roi (Opus sacerdotale) al frente de quienes
asistió su superior Monseñor Wach, con quien también tuvimos
oportunidad de conversar sobre los avances en las instalaciones
del seminario que ha instituido en Florencia, así como del alto
número de seminaristas que acoge en este momento. La vincu­
lación de aquél y éste a la más pura tradición de la Iglesia, tam­
bién en su liturgia,
y su encuadramiento en el espíritu de la co­
misión Ecclesia Dei creada por nuestro Santo Padre Juan Pa­
blo
II, abren un futuro de confianza.
Los stands, como en años anteriores, llenos de interés; el de
Una Voce, el de Présent e Itinéraires, el de Diffusion de la Pensée
fran<;aise y sobre todo el de A.ction Familia/e et Seo/aire. En este
último, precisamente, tuvimos la
oportunidad de charlar con el
Almirante Berger y con Louis d' Anselme. Sólo faltó Arnaud de
Lassus, a quien echamos de menos, aunque encontramos sus tra­
bajos cada vez más interesantes y actuales.
La
Ciudad Cat6lica española, y nuestra revista Verbo, han
vuelto por segundo año consecutivo, a través del profesor Miguel
Ayuso, a estar representadds en este gran acontecimiento cultu­
ral
y religioso que está empezando a consolidarse en la festividad
de
la Virgen de Lourdes en su santuario.
JUAN CAYÓN PEÑA.
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