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Número 467-468

Serie XLVI

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Bartolomé Herrera y su tiempo

teóricamente los procesos de independencia como movidos por
un utopismo nihilista de progenie liberal y masónica que sólo
podía concluir produciendo un sentimiento de orfandad, al
haberse negado el ser y el modo de ser tradicional de los pueblos
hispánicos. El segundo se ocupó de la acción de los Pincheira, en
el Río de la Plata, pero también en Chile, sucesores de Be n a v i d e s ,
como un movimiento protocarlista. Mientras que el último estu-
dió el realismo de Chiloé, última línea de defensa del R e y.
Finalmente, la tercera mesa reunió al autor de esta nota, a J o s é
de Armas (Fundación Ma p f re - Gu a n a rteme) y a Miguel Ayuso
( U n i v ersidad de Comillas), para abordar la cuestión desde la
Península, el primero y el te rc e ro, y desde la insularidad canaria el
s e g u n d o . Díaz N i e va examinó sistemáticamente la fractura de la
común nación tras los procesos de independencia. De Armas, con
gran elocuencia y pasión, re c o rdó en cambio la per v i vencia de una
constitución histórica común soterrada por debajo de los nacio-
nalismos opuestos entr e sí en la América Hispana. Y Ayuso, direc-
tor científico del Consejo de Estudios Hispánicos Felipe II,
p r esentó el proyecto de investigación internacional “El ‘ o t ro’
b i c e n t e n a r i o ”, pro m ovido por el Consejo, explicando su significa-
do como un intento de leer críticamente la historia de los pueblos
hispánicos en la edad contemporánea, debelando mitos mentiro-
sos y haciendo emerger su ve rdadera faz, al tiempo que destacan-
do la importancia del Carlismo para la continuidad de esa
tradición en la Península y la consiguiente falta de éste como ele-
mento explicativo de la posteridad de las historias nacionales his-
p a n o a m e r i c a n a s . J
O S ÉDÍ A ZNI EVA
B A RTOLOMÉ HERRERA Y SU TIEMPO
Con motivo de cumplirse los doscientos años del nacimiento
del que fue arzobispo de Arequipa Ba rtolomé He r rera, uno de los
más grandes pensadores políticos peruanos, amigo de D o n o s o
C o r tés y de Pío IX, la Sociedad P e ruana de Historia, que pr e s i d e
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el catedrático y ex-presidente de la Corte Su p rema Vicente Ug a rt e
del Pino (gran amigo del profesor Francisco Elías de T e j a d a ,
q.s.g.h.), ha organizado el simposio “Ba rtolomé H e r rera y su
t i e m p o ”, coordinado por Fernán Altu ve - Fe b res, profesor de la
U n i ver sidad de Lima.
La primera de la sesiones se ha desarrollado en el Congreso del
Perú, que Ba rtolomé H e r rera presidió, y en ella el profesor Altuve
y el padre Jorge Putnam trazaron la panorámica de la vida de
He r rera. La segunda y última, por su parte, tuvo lugar en la
U n i ver sidad Ma yor de San Ma rcos, la más antigua de América, en
c o n c r eto en su maravillosa Capilla de Lo re t o. Vicente Ug a rte del
Pino, también ex-decano de su Facultad de De recho, dio la pala-
bra a los dos invitados de honor: S. A. R. Don Sixto Enrique de
Borbón y el Vi c e p residente del Perú Almirante Luis Gi a m p i e t r i .
Previamente Don Sixto había realizado una ofrenda floral ante la
estatua de Herrara que se halla en el P a rque Un i ver sitario de
L i m a .
J
O S É D EAR M A S
LA ACCIÓ N DEL PENSAMIENTO
Con este título, completado por el subtítulo de “Contribu-
ción de las ideas para la instalación de un nuevo sentido común ” ,
se ha desarrollado a lo largo del presente curso en el p re s t i g i o s o
Instituto de Filosofía Práctica de Buenos Aires, un seminario diri-
gido por su vicepresidente Ge r a rdo Palacios Ha rd y.
Esta es la explicación del sentido del curso:
“Tan conocido como ve rd a d e ro es aquel principio de natur a l e z a
filosófica, según el cual todo desorden en el plano de la acción,
comienza por ser un desorden en el plano de la inteligencia. El
Ca rden al Pie ha dicho que ‘las acciones del hombre son hijas de su
p e n s a m i e n t o ’, añadiendo que “todos los bienes igual que todos los
males de una sociedad son el fruto de las máximas buenas o malas que
ella pr o f e s a”; por lo que concluye: ‘... no hay ninguna herida, nin-
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