Martirián Brunsó Verdaguer: España sin rumbo

INFORMACION BIBLIOGRAFICA
Martirian Brunsó Verdasuer: ESPANA SIN RUMBO (1)
El sacerdote
Brunsó se
ha propuesto una gran tarea que pre­
tende desarrollar en una «cuatrilogía».
Señalar el

verdadero rum­
bo de la España de hoy para que nuestra patria pueda seguir de
nuevo las andaduras que la hicieron grande a lo
largo de su his­
toria. Su rumbo eclesial y político.
El primer volumen de su ambicioso proyecto es puramente
histórico. Y bueno es asentar futuros sobre las enseñanzas del
pasado para no repetir errores, hecbo en el que tantas veces
reinciden los españoles. Abarca un dilatado período histórico que va desde
la Paz de
Westfalia hasta 1833, fecba en la que muere Fernando VII, si bien los casi ciento cincuenta años que van de la Paz de West­
falia a la Revolución francesa son despachados en breves pági­ nas que apenas son una pincelada sobre tan interesante época
(págs. 19-48 ).
Son los dos periodos siguientes: 1789-1814 (págs. 51-116)
y 1814-1833 (págs. 119-197) los que ocupan extensamente la atención del autor bajo los epígrafes de
La for;a de la Tradición
española y La Tradición española al roio vivo. Y ello es la parte
más interesante del libro por cuanto da una
visión de la historia_
muy distinta de la que es costumbre en los textos no
sólo de
hoy

sino también del pasado siglo
xrx.
Porque

la historia, con contadas y notables excepciones, la
escribieron y falsearon los libelares.
Brunsó la

relata desde la
tradición y a no pocos les parecerá asombrosa. Y. sin embargo,
es la
realidad.
Entiendo

que este es el mayor mérito del libro de Brunsó.
Dar a los españoles una visión coherente y verdadera de su pa­ sado más reciente que tanto ha influido en los acontecimientos
de nuestro vivir actual.
Por ello lo recomendamos muy sinceramente a todos los lec­
tores, señalándoles que no encontrarán en el libro una monogra­
fía farragosa
sino una exposición geoeral, de fácil lectura y llena
de instructivas en·señanzas. No es obra para especialistas en his­
toria sino para el público en general y tiene la virtud de poner
al alcance de todos lo que en estos momentos saben muy pocos.
Hay pues que felicitar muy sinceramente a Martirian
Brunsó
(!) Editorial Speiro, S. A., Madrid, 1983, 206 págs.
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por este libro que, si bueno en términos generales1 resultará ex­
celente para los jóvenes que se acercan a la historia de España. Sólo hay que lamentar en
él una poco afortunada corrección
de pruebas, causa de errores sobre todo en nombres propios. Con
vistas a una futura reedición, que sería muy deseable, señalo al autor en un apresurado repaso las páginas
25, 34, 46, 59, 125,
141, 145
y 160.
No es este el momento de señalar algunas discrepancias de
matiz con el autor sobre puntos muy concretos de historia. To­
das ellas de carácter secundario y más propias de estudiosos que
del público en general. La valoración es pues absolutamente
po­
sitiva.

Si se hubieran escrito más libros como el que comentamos
muy otra sería la idea que de España tendrían nuestros conciuda­
danos de hoy. Muy otra y mucho más exacta.
FRANCISCO JosÉ FERNÁNDEZ DE LA CIGOÑA.
Alvaro del Portillo: DESCUBRIMIENTOS Y
EXPLORACIONES EN LAS COSTAS DE CALIFORNIA(*)
«El honor de dar América al mundo pertenece a España;
no solamente el honor del descubrimiento, sino el de una
ex-.
ploración

que duró varios siglos
y que ninguna otra nación ha
igualado en región alguna». Estas palabras del gran hispanista Carlos F. Lummis, en sus
libros de vindicación de la acción española en América, vienen a mi pensamiento al terminar la lectura del libro del Dr. D.
Al­
varo

del Portillo. Presentado como resis doctoral de Filosofía
y Letras en la Universidad de Madrid, el año 1934, ha sido
reeditado
a' finales

de 1982, una vez ampliado considerablemente
en
.las notas

(desde 1934 a hoy, se
han editado estudios sobre
el tema tan importantes como los de Aschman, Davis,
León
Portilla, Valadés y Velázquez) e introducido en el texto varia­
ciones importantes. Al autor -hoy Prelado, en primera prela­
tura, del Opus Dei- le pareció este camino «el mejor, el más
adecuado que servía a los ruegos de muchos amigos que querían
tener en sus manos una obra agotada hace al menos un cuarto
de siglo».
La raz6n española de esta obra, en !!nea con los ideales que
inspiran esta Revista, no es otra que la propia de la hispanidad,
es decir, la cifra de lo mejor de la historia de todos los pueblos
hispanos, con un sentido geográfico intercontinental -que los
descubridores de los siglos
XV, xvr y XVII ensancharon hasta
limites asombrosos-, que habla de promoción a
la cultura, y
un sentido ético que recoge el alto ideal, que Menéndez y Pe­
layo

reflejó con maestría singular en su célebre Epílogo a la
(*) Ed. Rialp, Madrid, 1982, 500 p,igs.
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