Índice de contenidos
Número 195-196
Serie XX
- Textos Pontificios
- Estudios
- Actas
- Información bibliográfica
- Ilustraciones con recortes de periódicos
-
Crónicas
-
En la hora de comenzar la restauración de la Universidad: I Seminario de formación para la acción
-
Crónica de la Festividad de San Fernando de 1981
-
Discurso de Leonor Vegas Latapie [San Fernando 1981]
-
Discurso de Javier Urcelay [San Fernando 1981]
-
Discurso de Francisco José Fernández de la Cigoña [San Fernando 1981]
-
Autores
1981
Manuel García Morente: Ensayos sobre el progreso
INFORMACION BIBUOGRAFICA
García Morente, Manuel: ENSAYOS SOBRE
EL PROGRESO (*)
Dice mucho dcl valor intrínseco de un pensador el que a los
cincuenta años de
haber publicado un escrito de actoa!idad en su
época se reedite, y, lo que es más, pu<® ser leído por la juveo,tud
actual con el mismo provecho y deleite con que lo hicieron fas dos
generaciones precedentes. Esto sucede hoy con el opúsculo Em:a,yos
sobre
el Progreso
que, publicados en 1932 como discurso de in
greso en la Academia de Ciencias
Morales y
Políticas, ve hoy nueva
luz en
Blitcirial Dorca.s, precedido de
un bello
pr6logo del
profesor
don Juan Miguel Palacios.
Corresponden estos
En,,iyos al período cercanamente anterior a
la conversión de García Morente a'! catolicismo y a su ordena
ción
sacerdotal.
La influencia de Bergson ha despegado su espirito
de sus p'.rim.eras posiciones neokantfan.as para abrirlo a un vitalismo
más metafísico que biológico. Ahora, bajo la más cercana inspira
ción
die Ortega y Gasset, se adentra nuestro autor en fa ax,ología
de Max Scheler, movimiento que recoge una herencia de la ética
kantiana
y también secuencias de Brentano
'Y de la fenomenología.
Con
el estilo sobrio, diáfano, "cartesiano" que Je caracterizó,
ckstaca Morente fa importancia que ba tenido la idea del progreso
en la
formación de
la mentalidad moderna y en su "dinamización"
hacia las
ciencias
y la técnica. Sin embargo, el concepto mismo de
progreso -nos dice- no ha sido
debidamente analizado ni
defi
nido,
ya que las nociones clásicas de progreso (la die Spencer y la
de
Hegel) nos
dicen aspectos de su desarrollo o realización prácti
ca, pero no su esencia
misma. La solución a este enigma se la brinda
la teoría
de la
preferibilidad objetiva
de
Brentano y,
sobre
todo,
la axiologia o doctrina de los valores propuesta en su tiempo por
Max Scheler. De ella hace Morente una luminosa expooición, se
guramente la más breve y rigurosa que pueda encontrarse. Concluye
de ella que el progreso es "la realización
del reino
de los valores por
(*) Presentación de Juan Miguel Palacios. Ed. Dorcas, Madrid, 1980,
108 págs.
779
Fundaci\363n Speiro
INFORMACION BIBUOGRAFICA
el esfuerzo humano". La historia es progreso en la medida en que
realiza valores
y guarda su jerarquía objetiva.
La axiología tuvo un indudable significado en la evolución del
pensamiento filosófico en una época en que éste reencontraba la
metafísica, durante la primera mirad de nuestro siglo. No ha con
tado, sin
embargo, con mayor .porvenir, quizá porque contraría el
viejo principio de
economía del
pensamiento
-hoy más
que nuoca
reivindioado----según
el
cual "ios seres no .han de multiplicarse sin
necesidad"
(enda non ,unt multiplicand,, ,ine necesitate), o, en su
otra
formulación,
"no expliques
por lo
más lo que puedas explicar
por.
io menos". La axiología recurre a una duplicación de la reali
dad y de los medios cognoscitivos que aparece innecesaria si se com
para con
el
bom,m de la filooofía clásida, es decir, ron 1a conside
ración
del ser como
perfeccio1'adr,r de otro en virtud de la ley ge
neral de armonía que .preside
el cosmos. Esto explica no sólo la
captación del va1or inherente a las cosas, sino también la compren
sión del "valor para
otro", aunque
lo
veamos como
contravalor
para nosottos mismos, y ello Sin recuirir a un trasmundo axioiógiro
ni
a una
"intuición vra:loral".
Mayor vigencia teorética posee -por más original del autor
la
seguoda parte de estos
Em•yu,, aquella en que se pregunta Gar
cía Morente por el origen
· de la creencia progresista (creencia ea
rodo caso, puesto que nadie· biL al<;aiizádo, ni por principio ~lcan
zará,
el
término o cumplimiento del ·progreso). Moren
te concluye
que el origen de esta idea y d.e su larga vigencia en la Modernidad
se
encuentra
en Kru!t. "Kant ,.,.-dice--al distinguit y contraponer
el conocimiento de lo empírko y la idea de io absoluto, recluye lo
a!,soluto, lo. perfectamente bueno, a lejanías inaccesibles, que orien
tan el esfuerzo humano y le señalan · dirección, rumbo y sentido.
Desde este momento la idea
de. evolución
progresiva
.hace presa
de
todos los órdenes
del pensa,o;úento y se adueña al fin del alma ac
tual". Será precisamente
el Yo
puro
y la idea de autonomía moral
en Kant lo que expandirá
en su tiempo la idea de progreso, y lo
que, incluso, alimentará el progresismo de nuestros.
dias y el "hu
manismo" o culto
al hombre en que vemos hoy culn;únar el racio
nalismo moderno.
Particular-interés
·reviste _dentro de
estos
Ensayos su.parte- final,
de carácter crítico, sobr" los efectos negativos de la idea progresista,
sobre todo
ea la, polariaación · hada las ciencias particulares y la
técnica que ha ocasion-ado. Li especialización, que cierra horizontes
a
muchas,. JllC:ntes pted.~a~, . l~ prisa. o __ ;apr,csur~iento en_
el
viyir,
la cobardía meotal ante procesos supuestámente ineluctables, .. son
780"
Fundaci\363n Speiro
INl'O.RMACJQN BLBUQGRAF{CA
::a!!t'nre efectos _ pertw;badores para la vid.a espiritual_ de _ los
O>nstituye un acierto de Editorial ·Dorcas --y de Jua11 ~el
Palacios a cuyo cuid
estos Ensayos-la reviviscencia de una obra como ésta, y de _ un
estilo de
pensar y de escribir, que a1-mbo de medio siglo conser
van
todo su
rigor y su fresciu:a intelectual. Un acierto tambi_én la
pulcra
presentación del libro y
Ja elección para: su portada del cua:
dro de Brueguel "La construcción de la Torre de Babel", eomo
símbolo del Progreso Indefinido, de
.su fracaso final
y de la
can:
fusión y disgregación de las almas, que fueron sus frutos.
RAF ABL GAMBRA,
P. H. RaruJle, editor: LA CONI'AMINACION AMBIENTAL:
BIOFISICA., PSICOSOMATICA,
PSLCOSOOI.AL, CULTURAL,
ESPIRITUAL(•¡
Ha sido una ideá excelente la que ha tenido el arquitecto argen-:
tino Patricio H. R.and!e de rennir én nn ·solo volumen diversas con
tribuciones sobre la idea de la contaminación, como resultado de on·
simposio
celebrado recientemente en Buenos
Aíres.
-En efecto, el concepto de contaminación no se refiere según el
Diccionario de la Real
Academia Española, ni según su etimología,
únicamente a una reaiidad física
del mundo
material. Son
cinco,
según este Diccionario, las acepciones CJ,ue tiene la voz ermtmntfklT
y como consecuencia su derivadá contaminación. La primera aceix;ión·
es la meramente física que es a la que se· !'efieren casi_ exclusivamente
lós medios de comunicación actuales que tantas veces hacen iefeten-·
cia a ella. Pero también tiene un significado de oomagiar o infit;itmar
lo que no es exclusivamente físico; de corromper, viciar o r:ilterar
un texPo; de f_JeNJertir o ()()f'1'0mper la pur;z,, áe 1" fe o de lar co,
tumbres
y finalmente también se dtá otra aa,pción referente a q11ec
branttlr o profanar la ley de Dios. En estas diversas acepciones' se
sintetiza, eb. -cierto -modo, él prógr,al)la • dél simposio reseñado -en la
obra
que trata
del
concepto de - conramiru\d6n en un sentidó_ amplio
y diverso. Reconoce, con' moy biten :adertb el , arquitecto Randl_e
en la introducción. que, si bien es importante la contamina'Ció~ _ dei
medio físico en -que vivimos, :tanto ·o· más ilnj:>Otfañtes 'y graves
' ,,· . '
· . .- (•>: Blleno1_· m,e1,· bíKOS '"AsociaCión'j!,tra·':ra '.Promoci·6n ·:de Íos ')!s:tu:
dios Teúitm;falts · y : Ambienttilet ~ :( 1979) 1, ,;3o · pig5.i ,::-·.: >-' · -<. ·· < !l ·
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Fundaci\363n Speiro
García Morente, Manuel: ENSAYOS SOBRE
EL PROGRESO (*)
Dice mucho dcl valor intrínseco de un pensador el que a los
cincuenta años de
haber publicado un escrito de actoa!idad en su
época se reedite, y, lo que es más, pu<® ser leído por la juveo,tud
actual con el mismo provecho y deleite con que lo hicieron fas dos
generaciones precedentes. Esto sucede hoy con el opúsculo Em:a,yos
sobre
el Progreso
que, publicados en 1932 como discurso de in
greso en la Academia de Ciencias
Morales y
Políticas, ve hoy nueva
luz en
Blitcirial Dorca.s, precedido de
un bello
pr6logo del
profesor
don Juan Miguel Palacios.
Corresponden estos
En,,iyos al período cercanamente anterior a
la conversión de García Morente a'! catolicismo y a su ordena
ción
sacerdotal.
La influencia de Bergson ha despegado su espirito
de sus p'.rim.eras posiciones neokantfan.as para abrirlo a un vitalismo
más metafísico que biológico. Ahora, bajo la más cercana inspira
ción
die Ortega y Gasset, se adentra nuestro autor en fa ax,ología
de Max Scheler, movimiento que recoge una herencia de la ética
kantiana
y también secuencias de Brentano
'Y de la fenomenología.
Con
el estilo sobrio, diáfano, "cartesiano" que Je caracterizó,
ckstaca Morente fa importancia que ba tenido la idea del progreso
en la
formación de
la mentalidad moderna y en su "dinamización"
hacia las
ciencias
y la técnica. Sin embargo, el concepto mismo de
progreso -nos dice- no ha sido
debidamente analizado ni
defi
nido,
ya que las nociones clásicas de progreso (la die Spencer y la
de
Hegel) nos
dicen aspectos de su desarrollo o realización prácti
ca, pero no su esencia
misma. La solución a este enigma se la brinda
la teoría
de la
preferibilidad objetiva
de
Brentano y,
sobre
todo,
la axiologia o doctrina de los valores propuesta en su tiempo por
Max Scheler. De ella hace Morente una luminosa expooición, se
guramente la más breve y rigurosa que pueda encontrarse. Concluye
de ella que el progreso es "la realización
del reino
de los valores por
(*) Presentación de Juan Miguel Palacios. Ed. Dorcas, Madrid, 1980,
108 págs.
779
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INFORMACION BIBUOGRAFICA
el esfuerzo humano". La historia es progreso en la medida en que
realiza valores
y guarda su jerarquía objetiva.
La axiología tuvo un indudable significado en la evolución del
pensamiento filosófico en una época en que éste reencontraba la
metafísica, durante la primera mirad de nuestro siglo. No ha con
tado, sin
embargo, con mayor .porvenir, quizá porque contraría el
viejo principio de
economía del
pensamiento
-hoy más
que nuoca
reivindioado----según
el
cual "ios seres no .han de multiplicarse sin
necesidad"
(enda non ,unt multiplicand,, ,ine necesitate), o, en su
otra
formulación,
"no expliques
por lo
más lo que puedas explicar
por.
io menos". La axiología recurre a una duplicación de la reali
dad y de los medios cognoscitivos que aparece innecesaria si se com
para con
el
bom,m de la filooofía clásida, es decir, ron 1a conside
ración
del ser como
perfeccio1'adr,r de otro en virtud de la ley ge
neral de armonía que .preside
el cosmos. Esto explica no sólo la
captación del va1or inherente a las cosas, sino también la compren
sión del "valor para
otro", aunque
lo
veamos como
contravalor
para nosottos mismos, y ello Sin recuirir a un trasmundo axioiógiro
ni
a una
"intuición vra:loral".
Mayor vigencia teorética posee -por más original del autor
la
seguoda parte de estos
Em•yu,, aquella en que se pregunta Gar
cía Morente por el origen
· de la creencia progresista (creencia ea
rodo caso, puesto que nadie· biL al<;aiizádo, ni por principio ~lcan
zará,
el
término o cumplimiento del ·progreso). Moren
te concluye
que el origen de esta idea y d.e su larga vigencia en la Modernidad
se
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en su tiempo la idea de progreso, y lo
que, incluso, alimentará el progresismo de nuestros.
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rigor y su fresciu:a intelectual. Un acierto tambi_én la
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Ja elección para: su portada del cua:
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símbolo del Progreso Indefinido, de
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RAF ABL GAMBRA,
P. H. RaruJle, editor: LA CONI'AMINACION AMBIENTAL:
BIOFISICA., PSICOSOMATICA,
PSLCOSOOI.AL, CULTURAL,
ESPIRITUAL(•¡
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tino Patricio H. R.and!e de rennir én nn ·solo volumen diversas con
tribuciones sobre la idea de la contaminación, como resultado de on·
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Aíres.
-En efecto, el concepto de contaminación no se refiere según el
Diccionario de la Real
Academia Española, ni según su etimología,
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material. Son
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según este Diccionario, las acepciones CJ,ue tiene la voz ermtmntfklT
y como consecuencia su derivadá contaminación. La primera aceix;ión·
es la meramente física que es a la que se· !'efieren casi_ exclusivamente
lós medios de comunicación actuales que tantas veces hacen iefeten-·
cia a ella. Pero también tiene un significado de oomagiar o infit;itmar
lo que no es exclusivamente físico; de corromper, viciar o r:ilterar
un texPo; de f_JeNJertir o ()()f'1'0mper la pur;z,, áe 1" fe o de lar co,
tumbres
y finalmente también se dtá otra aa,pción referente a q11ec
branttlr o profanar la ley de Dios. En estas diversas acepciones' se
sintetiza, eb. -cierto -modo, él prógr,al)la • dél simposio reseñado -en la
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que trata
del
concepto de - conramiru\d6n en un sentidó_ amplio
y diverso. Reconoce, con' moy biten :adertb el , arquitecto Randl_e
en la introducción. que, si bien es importante la contamina'Ció~ _ dei
medio físico en -que vivimos, :tanto ·o· más ilnj:>Otfañtes 'y graves
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Fundaci\363n Speiro