Índice de contenidos
Número 195-196
Serie XX
- Textos Pontificios
- Estudios
- Actas
- Información bibliográfica
- Ilustraciones con recortes de periódicos
-
Crónicas
-
En la hora de comenzar la restauración de la Universidad: I Seminario de formación para la acción
-
Crónica de la Festividad de San Fernando de 1981
-
Discurso de Leonor Vegas Latapie [San Fernando 1981]
-
Discurso de Javier Urcelay [San Fernando 1981]
-
Discurso de Francisco José Fernández de la Cigoña [San Fernando 1981]
-
Autores
1981
En la hora de comenzar la restauración de la Universidad: I Seminario de formación para la acción
EN LA HORA DE COMENZAR LA RESTAURACION
DE LA
UNIVERSIDAD: "I SEMINARIO
DE FORMACION PARA LA ACCION"
"La Universidad, por su esencia espiritual -escribió C. A. Sa
Cheri (1)-, es precisamente la clave de toda la subversión inte
lectual, que ha descendido desde el nominalismo teológico hasta la
guerrilla urbana atravesando
la amplia zona de prácticamente cinco
siglos de histori~ de
la filosofía moderna, que no
han hecho sino
agravar progresivamente esta crisis hasta llegar a fo que hoy peno
samente nos es dado ver a diario: una confusión absoluta en el
plano de las ideas y una corrupción ,cada vez mayor en el plano de
las co.stumbres. Es decir, no hay corazones sanos porque no hubo
cabezas sanas, y no habrá orden social en la medida que no haya
un mínimo de núcleos dirigentes animados ron prindpi~ sanos y
sentimientos rectos."
Hasta aquí la cita de ese argentino ejemplar, modelo de uni
versitarios, que fue el doctor Sacheri. Sus palabras son suficientes
para comprender la importancia cabal que la acción en pro de la
restauración de la Universidad tiene dentro de la obra global de
testanración del Orden
Social CrisriJano, por el que
precisamente
Sadieri entregó
su vida un 22 de diciembre de 1974. No en vano
tampoco
orro gtan luchador
universitario,
el profesor Serrano Vi
l.lafañe, nos recordaba
en
el encnenrro
de universitarios de la última
Reunión de amigos de la Ciudad Católica la célebre
frase atribuida
a un revolucionario francés: "¡Dadme la Universidad, quedaos con
1o demás!".
La conclusión es grave: difícilmente podremos retomar a los
hombres y la sociedad a Cristo si antes no nos hemos preocupado
de formar
en
la verdad las inteligéncias de los que serán dirigentes
sociales
y polfricos. Es decir, si no hemos hecho lo posible por res
taurar la institución social que tiene aquel fin: la Uni~e!sidad.
No basta, sin embargo, la conciencia de este hecho, por otro
lado evidente, a la vista del uso que los marxistas han venido ha~
ciendo de él, para emprender la acción universitaria. Hay que con-
(1) Sacheri, C. A.: Considerariones acerca de la acci6n unitlersilaria,
separata núm. 4 de «Universidad», Buenos Aires, s/f, pág, 4.
803
Fundaci\363n Speiro
LA RESTAURACION DE LA UNIVERSIDAD
tar, además, con por lo menos dos Ieglas comunes de la acción
que, a pesar de su simpleza,
no deben
olvidarse:
- "Cada uno en su propio sitio" ( 2).
--'''el que
no trabaja no come" (3).
Es elemental. La
restauración de
la Universidad es responsabi
lidad
j)1'.imaria de
los
universivarios (docentes y alumnos), pues son
ellos quienes, normalmente, están mejor situados para conocer, para
reali•ar una acción universitaria. La segunda regla, deducible de
la sentenda del apóstol, no significa más que, como gráficamente
dice Sadieri {4), que "si uno quiere, por a.sí decir, universidad sana,
tiene que arremangarse y hacer ,algo en aros de esa universidad
sana, cristiana y mdonal". Porque, efectivamente, aquella "Univer
sidad Católica, Hispánica y Libre" que propugnara Menéndez Pe
layo
y que nosotros ahora defendemos no bajará de las nubes sino
que será
resukado de
una tarea inevitablemente a largo plazo. Ta
rea que presupone espíritu de sacrificio, voluntad de trabajo, cons
tancia en la acción. Y será a largo plazo porque es mucho lo
que hay que rehacer
y no caben improvisaciones; pero si queremos
empezar
a contar
el plazo antes debemos señalar
el momento de
su comienro, y eso bien puede estar en nuestras manos.
Surge entonces la eterna ruestión: "Muy bien ... , pero ¿cómo?".
Y aquí hay que contestar lo de siempre: no se trata más que de
aplicar los principios generales de la acción (de los que ya hemos
enunciado dos elementales) a un medio específico:
la Universidad,
cuerpo
social intermedio definido por una finalidad, por
tener una
naturale>a y
vida
patticulare<. Es decir, existe una metodología
propia de acción universitaria que pudiera referirse a cuatro grandes
aspecros (4):
l. Formación personal, en un doble sentido: doetrinal y para
fa acción.
2. Difusión de la
doetrina por
el ejemplo personal, el contactO
particular
y la docencia.
3, Acci6n en el medio
habitua:l: a
largo plazo, preparando
profesores y catedráticos
capaces y de buena doctrina, tomando en
serio el deber· de estudiar, actuando contra la
politización de
signo
malo o bueno,
creando grupos
que organicen
y plonifiquen la ac
ción y
a la vez sirvan para solucionar los problemas ordinarios del
(2) Ousset, J.: La A"/6n, Speiro, Madrid, 1969, pág. 72.
(3) JI Ts., 3, 10. ( 4) Cfr. Camps, E., Garat, P., Solá, C.: Misión dél Universitario Ca
lólico, separata núm. 6 de «Universidad», Buenos Aires, 1979, págs, 17 a 21.
804
Fundaci\363n Speiro
I SEMINARIO DE FORMACION PARA LA ACCION
ámbito universitario, etc. Todo, en fin, según una adecuada jerar
quía de valores
y teniendo en cuenta los tres elementos básicos de
cualquier acción: hombres-medios-circunstancias.
Estas son, en síntesis, las características generales de la meto
dología de acción universitaria
y hoy, gracias a Dios, ya puede de
ciriSe que han empezado a tomar cuerpo en iniciativas muy concre
tas, de las que hay que destacar, en lugar preferente, y dentro del
ámbito de las naciones hispanas, la labor realizada por
el "Conse
jo
Hispanoamericano de
Estudiantes"
(C. H. E.) que tiene ya el
aval de
dos importantes congresos internacionales (Puebla-México,
enero de 1979
y C6rdoba-Argentina, octubre de 1980).
El objetivo del
C. H. E. se cifra en "la concertación de las ac
tividades desarrolladas por
las distintas agrupaciones universitarias
católicas de todos los países hispanoamericanos, a
efectos de
promo
ver la Doctrina Social de
la Iglesia
en lo atinente a
la Universidad
como institución intermedia dentro de la sociedad. Asimismo, se
propone la consolidación de la "Universitas", verdadera comuni
dad de maestros y discípulos unidos por el amor a la verdad, como
basamento fundamental de la Universidad
en toda Hispanoamérica".
En nuestra patria1 y con una similar orientación, la asociación
estudiantil "Corporación Universitaria" organizó los días 7 y 8 de
marzo el I Seminario de Formación para la Acción, con el tema
general de "Subversión y Restauración de la Universidad".
En un albergne juvenil de Madrid más de den universitarios
católicos, pertenecientes a nueve distritos, se congregaron bajo la
protección de Santo Tomás para estudiar en ponencias, equipos de
tt1bajo y
mesas redondas la doctrina sobre
la naturaleza y vida de
la Universidad.
Los simples títulos de las ponencias, expuestas con
rigor por
fos distintos
grupos participantes, pueden darnos una
idea del contenido e interés de
este Seminario:
"Misión de
la Uni
versidad", "Autonomía universit-aria", "Docencia universitaria", .. La
subversión de la Universidad", "Técnicas de la subversión marxis
ta en la
Universidad", "El proselitismo comunista
en las faculta
des", "Organización y
esrructura de la Universidad española", "Aná
lisis de fo. siru.aci6n actual de la Universidad", "La vocación del uni
versitario católico", "Consideraciones -acerca de
la acción universi
taria", etc.
Sobre la base de esta imprescindible formación en la doctrina,
el Seminario tuvo una incidencia fundamentalmente práctica -"for
mación para h acción" -y por medio del intercambio de expe
riencias y puntos de vista, qued6 delimitada una estrategia de ac
ción eficaz y coordinada de las diversas asociaciones cat61icas que
actúan en la Universidad ·espafi.Ola y ·habfan que'rido concurrir a este
805
Fundaci\363n Speiro
LA RESTAURACION DE LA UNIVERSIDAD
encuentro. Como conclusiones operativas más importantes, entre otras
iniciativas de acción cotidiana en B,cuclas y Facultades, hay que
destacar la formación del embrión de lo que puede llegar a ser
una coordinadora universitaria nacional que acabe con ,el monopo
lio del fantasmagórico "movimiento estudiantil" y sea, a la vez, ins
trumento útil para facilitar la formación doctrinal, la concertación
de acciones y el intercambio de información universitaria. Junto a
esto quedó propuesta la próxima convocatoria de un Congreso Na
cional de Universitarios Católicos, que pueda servir a su vez para
preparar el III Congreso del C. H. E., cuya sede fue asignada en
octubre pasado a nuestra patria.
El Seminario
-en el
que
no faltaron
los
aetos litúrgicos
y de
piedad- fue coronado con un solemne acto de
clausura, en el que
se puso de manifiesto el compromiso de los asistentes con la vo
cación de univ-ersitatios y con la tarea de restauración de la Uni
versidad en todos sus estatutos y actividades. Restauración de la
Universidad que
,será el
fruto de
la adhesión plena y sin reticencias
a
la doctrina de la Santa Madre Iglesia, a cuyo amparo nació.
JAIME U. ALONSO,
806
____ /~
Fundaci\363n Speiro
DE LA
UNIVERSIDAD: "I SEMINARIO
DE FORMACION PARA LA ACCION"
"La Universidad, por su esencia espiritual -escribió C. A. Sa
Cheri (1)-, es precisamente la clave de toda la subversión inte
lectual, que ha descendido desde el nominalismo teológico hasta la
guerrilla urbana atravesando
la amplia zona de prácticamente cinco
siglos de histori~ de
la filosofía moderna, que no
han hecho sino
agravar progresivamente esta crisis hasta llegar a fo que hoy peno
samente nos es dado ver a diario: una confusión absoluta en el
plano de las ideas y una corrupción ,cada vez mayor en el plano de
las co.stumbres. Es decir, no hay corazones sanos porque no hubo
cabezas sanas, y no habrá orden social en la medida que no haya
un mínimo de núcleos dirigentes animados ron prindpi~ sanos y
sentimientos rectos."
Hasta aquí la cita de ese argentino ejemplar, modelo de uni
versitarios, que fue el doctor Sacheri. Sus palabras son suficientes
para comprender la importancia cabal que la acción en pro de la
restauración de la Universidad tiene dentro de la obra global de
testanración del Orden
Social CrisriJano, por el que
precisamente
Sadieri entregó
su vida un 22 de diciembre de 1974. No en vano
tampoco
orro gtan luchador
universitario,
el profesor Serrano Vi
l.lafañe, nos recordaba
en
el encnenrro
de universitarios de la última
Reunión de amigos de la Ciudad Católica la célebre
frase atribuida
a un revolucionario francés: "¡Dadme la Universidad, quedaos con
1o demás!".
La conclusión es grave: difícilmente podremos retomar a los
hombres y la sociedad a Cristo si antes no nos hemos preocupado
de formar
en
la verdad las inteligéncias de los que serán dirigentes
sociales
y polfricos. Es decir, si no hemos hecho lo posible por res
taurar la institución social que tiene aquel fin: la Uni~e!sidad.
No basta, sin embargo, la conciencia de este hecho, por otro
lado evidente, a la vista del uso que los marxistas han venido ha~
ciendo de él, para emprender la acción universitaria. Hay que con-
(1) Sacheri, C. A.: Considerariones acerca de la acci6n unitlersilaria,
separata núm. 4 de «Universidad», Buenos Aires, s/f, pág, 4.
803
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LA RESTAURACION DE LA UNIVERSIDAD
tar, además, con por lo menos dos Ieglas comunes de la acción
que, a pesar de su simpleza,
no deben
olvidarse:
- "Cada uno en su propio sitio" ( 2).
--'''el que
no trabaja no come" (3).
Es elemental. La
restauración de
la Universidad es responsabi
lidad
j)1'.imaria de
los
universivarios (docentes y alumnos), pues son
ellos quienes, normalmente, están mejor situados para conocer, para
reali•ar una acción universitaria. La segunda regla, deducible de
la sentenda del apóstol, no significa más que, como gráficamente
dice Sadieri {4), que "si uno quiere, por a.sí decir, universidad sana,
tiene que arremangarse y hacer ,algo en aros de esa universidad
sana, cristiana y mdonal". Porque, efectivamente, aquella "Univer
sidad Católica, Hispánica y Libre" que propugnara Menéndez Pe
layo
y que nosotros ahora defendemos no bajará de las nubes sino
que será
resukado de
una tarea inevitablemente a largo plazo. Ta
rea que presupone espíritu de sacrificio, voluntad de trabajo, cons
tancia en la acción. Y será a largo plazo porque es mucho lo
que hay que rehacer
y no caben improvisaciones; pero si queremos
empezar
a contar
el plazo antes debemos señalar
el momento de
su comienro, y eso bien puede estar en nuestras manos.
Surge entonces la eterna ruestión: "Muy bien ... , pero ¿cómo?".
Y aquí hay que contestar lo de siempre: no se trata más que de
aplicar los principios generales de la acción (de los que ya hemos
enunciado dos elementales) a un medio específico:
la Universidad,
cuerpo
social intermedio definido por una finalidad, por
tener una
naturale>a y
vida
patticulare<. Es decir, existe una metodología
propia de acción universitaria que pudiera referirse a cuatro grandes
aspecros (4):
l. Formación personal, en un doble sentido: doetrinal y para
fa acción.
2. Difusión de la
doetrina por
el ejemplo personal, el contactO
particular
y la docencia.
3, Acci6n en el medio
habitua:l: a
largo plazo, preparando
profesores y catedráticos
capaces y de buena doctrina, tomando en
serio el deber· de estudiar, actuando contra la
politización de
signo
malo o bueno,
creando grupos
que organicen
y plonifiquen la ac
ción y
a la vez sirvan para solucionar los problemas ordinarios del
(2) Ousset, J.: La A"/6n, Speiro, Madrid, 1969, pág. 72.
(3) JI Ts., 3, 10. ( 4) Cfr. Camps, E., Garat, P., Solá, C.: Misión dél Universitario Ca
lólico, separata núm. 6 de «Universidad», Buenos Aires, 1979, págs, 17 a 21.
804
Fundaci\363n Speiro
I SEMINARIO DE FORMACION PARA LA ACCION
ámbito universitario, etc. Todo, en fin, según una adecuada jerar
quía de valores
y teniendo en cuenta los tres elementos básicos de
cualquier acción: hombres-medios-circunstancias.
Estas son, en síntesis, las características generales de la meto
dología de acción universitaria
y hoy, gracias a Dios, ya puede de
ciriSe que han empezado a tomar cuerpo en iniciativas muy concre
tas, de las que hay que destacar, en lugar preferente, y dentro del
ámbito de las naciones hispanas, la labor realizada por
el "Conse
jo
Hispanoamericano de
Estudiantes"
(C. H. E.) que tiene ya el
aval de
dos importantes congresos internacionales (Puebla-México,
enero de 1979
y C6rdoba-Argentina, octubre de 1980).
El objetivo del
C. H. E. se cifra en "la concertación de las ac
tividades desarrolladas por
las distintas agrupaciones universitarias
católicas de todos los países hispanoamericanos, a
efectos de
promo
ver la Doctrina Social de
la Iglesia
en lo atinente a
la Universidad
como institución intermedia dentro de la sociedad. Asimismo, se
propone la consolidación de la "Universitas", verdadera comuni
dad de maestros y discípulos unidos por el amor a la verdad, como
basamento fundamental de la Universidad
en toda Hispanoamérica".
En nuestra patria1 y con una similar orientación, la asociación
estudiantil "Corporación Universitaria" organizó los días 7 y 8 de
marzo el I Seminario de Formación para la Acción, con el tema
general de "Subversión y Restauración de la Universidad".
En un albergne juvenil de Madrid más de den universitarios
católicos, pertenecientes a nueve distritos, se congregaron bajo la
protección de Santo Tomás para estudiar en ponencias, equipos de
tt1bajo y
mesas redondas la doctrina sobre
la naturaleza y vida de
la Universidad.
Los simples títulos de las ponencias, expuestas con
rigor por
fos distintos
grupos participantes, pueden darnos una
idea del contenido e interés de
este Seminario:
"Misión de
la Uni
versidad", "Autonomía universit-aria", "Docencia universitaria", .. La
subversión de la Universidad", "Técnicas de la subversión marxis
ta en la
Universidad", "El proselitismo comunista
en las faculta
des", "Organización y
esrructura de la Universidad española", "Aná
lisis de fo. siru.aci6n actual de la Universidad", "La vocación del uni
versitario católico", "Consideraciones -acerca de
la acción universi
taria", etc.
Sobre la base de esta imprescindible formación en la doctrina,
el Seminario tuvo una incidencia fundamentalmente práctica -"for
mación para h acción" -y por medio del intercambio de expe
riencias y puntos de vista, qued6 delimitada una estrategia de ac
ción eficaz y coordinada de las diversas asociaciones cat61icas que
actúan en la Universidad ·espafi.Ola y ·habfan que'rido concurrir a este
805
Fundaci\363n Speiro
LA RESTAURACION DE LA UNIVERSIDAD
encuentro. Como conclusiones operativas más importantes, entre otras
iniciativas de acción cotidiana en B,cuclas y Facultades, hay que
destacar la formación del embrión de lo que puede llegar a ser
una coordinadora universitaria nacional que acabe con ,el monopo
lio del fantasmagórico "movimiento estudiantil" y sea, a la vez, ins
trumento útil para facilitar la formación doctrinal, la concertación
de acciones y el intercambio de información universitaria. Junto a
esto quedó propuesta la próxima convocatoria de un Congreso Na
cional de Universitarios Católicos, que pueda servir a su vez para
preparar el III Congreso del C. H. E., cuya sede fue asignada en
octubre pasado a nuestra patria.
El Seminario
-en el
que
no faltaron
los
aetos litúrgicos
y de
piedad- fue coronado con un solemne acto de
clausura, en el que
se puso de manifiesto el compromiso de los asistentes con la vo
cación de univ-ersitatios y con la tarea de restauración de la Uni
versidad en todos sus estatutos y actividades. Restauración de la
Universidad que
,será el
fruto de
la adhesión plena y sin reticencias
a
la doctrina de la Santa Madre Iglesia, a cuyo amparo nació.
JAIME U. ALONSO,
806
____ /~
Fundaci\363n Speiro