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Número 255-256

Serie XXVI

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San Fernando 1987

SAN FERNANDO 1987
Como todos lo saños llegó el 30 de mayo y los amigos de la
Ciudad Católica se reunieron
para celebrar

la festividad- de su
parrón San Fernando. En primer lugar asistimos a la Santa Misa
que ofició don Tomás Marín en la iglesia del Espíritu Santo.
En la homilía, don Tomás hizo especial hincapié en las vir­
tudes humanas (valor, caballerosidad, generosidad ... ) que son
complemento de las virtudes fundamentales.
Recordó a los héroes del medievo que se entregaban a
.la lu­
cha

sin escatimar sacrificios, sostenidos por su fe en Dios y su
amor a la Virgen. Y entre tantas grandes figuras señaló a San Fer­
. nando como paradigma de todas ellas. Destacó el papel de
_doña
Berenguela

en la educación de su hijo y cómo· infundió en su
alma, con

su propio ejemplo, el amor a la Santísima Virgen ·que
sería
el norte

de toda su vida.
Fue San Fernando uu rey muy popular, del que podría decir­
se como de
Fernán González: «Al

paso de mi caballo se va ex­
tendiendo Castilla». Devoto de la Virgen, alférez.mayor del·após­
tol Santiago, con grandes
éidtos en

política tanto interior como
exterior, San Femando deja,
como recordaba

el ilustre celebran­
te, una historia llena, y se convierte en la figura señera de la
Edad Media· española.
Terminó la homilía pidiendo a Dios el milagro de devolver
a esta Patria nuestra tan abatida hombres de la categoría y el
temple de San Fernando.
Después de recibir al Señor y darle gracias nos dirigimos al
resaurante Jai-Alai don9-e, mientras cenábamos;. se mantuvo una
animada charla en medio de uu ambiente de agradable distensión.
Llegada. la hora de los discursos tomó
la. pá!abra, en primer
lugar, Teresa García Noblejas, que ensalzó a
San Fernando
como
modelo de caballero cristiano y destacó la vocación política de
la mujer en la sociedad actual. Una sociedad que, como Teresa
nos recordaba, se
halla alejat{a de la fe católica y en la qne es
necesario restaurar el orden temporal y enfocarlo a
Crfsto, lo
que conseguiremos, según. sus propias pahthras;-si ponemos nues­
tra confianza· en María, modelo de· fe y fideliclad.
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Fundaci\363n Speiro

FESTIVIDAD DE SAN FERNANDO 1987
A continuación, Agustín Losada Pescador comenzó diciendo
que hay que buscar lo mejor para la Iglesia y para España, y
afirmó que

si San Fernando viviera se lanzaría de nuevo a la con­
quista de
la sociedad. Afirmó que «Speiro», siendo una minoría
selecta, debe hacer fructificar los talentos que ha recibido, y tam­ bién aludiendo a las frases del Evangelio, debe ser la sal de la
tierra. Terminó diciendo que hay que fomentar
la formación de los
católicos
·según la Doctrina Social de la Iglesia.
Poor último,

nos
dirigió la

palabra Miguel Angel L6pez Zava­
leta, que puso de manifiesto
la actualidad de San Fernando. En­
salzó su santidad. de vida, su prudencia y valor y lo puso como
ejemplo no
sólo a
los jóvenes si no
.a toda la sociedad. Habló de
la necesidad de mirar antes
la· causa de Dios que la propia y re­
calcó la confianza en El que tenia San Fernando con una cita del
mismo santo ante el cerco de Sevilla. Terminó su intervención
pidiendo
la intercesión de San Fernando para salvar a España y
reconstruir la civilización cristiana.
Los tres oradores fueron muy aplaudidos, y después de que
terminaran la charla se prolongó durante largo rato en un am­
biente de franca hermandad, basada en la comunión de ideas en las
qu.e los

más veteranos enseñan continuamente a los más inex­
pertos de una manera que hace del aprendizaje un placer. Como
siempre, los jóvenes agradecemos esa magnífica labor que está
llevando a cabo «Speiro».
MARÍA DEL CARMEN FERNÁNDEZ DE LA CIGOÑA CANTERO.
DISCURSO DE TERESA GARCIA NOBLEJAS SANTA­
OLALLA
Queridos maestros, compañeras y-compañeros de la Oudad Católica.
Cuando venimos a actos tan importantea como el de esta noche
todoa esperain.os escuchar a oradores de primera fila, capaces, de darnos
lecciones magistrales. Pero he aquí que, posiblemen~e debido a un error
involuntario,

he sido designad.a para dirigirme. a un· público selecto.
Procuraré, de cualquier
/arma, salvar el e"ar y no decepcionaros de­
masiado.
l. S~ Fernando, m_odelo de político católico.
Los amigos de Ciudad Católica no podíamos tener otro patr6n que
el rey San Fernando de Castilla. Es el· mode'lo de caballero cristiano
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