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Número 427-428

Serie XLII

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Familia y derecho de familia

CRÓNICAS
plazó desde la prevista como cuarta sesión la intervención del
profesor Juan Cruz, de la Universidad de Navarra, "Sistematización
hegeliana de la libertad secularizada: familia, sociedad, Estado". Y
en verdad que la sesión resultó particular1nente instructiva, pues se
vio la divergencia entre el pensanllento clásico, que a partir de la
politicidad natural del hombre, que cala en todos sus estratos ónti­
cas, compuesto de ahna y cue1po, concluye la significación reli­
giosa de la con1unidad política, y el moderno, sistematizado por
Hegel, y que excluye la dimensión religiosa de la comunidad.
Tras la Santa Misa y el alinuerzo, se agruparon el resto de las
inte1venciones en una tercera sesión. El profesor Evaristo Palo-
1nar, de la Universidad Complutense, a partir de un guión que le
hizo llegar el doctor Pablo Cervera, ausente por enfermedad,
desarrolló el tema "Dichoso el pueblo cuyo Dios es el Señor:
Jesucristo, Señor de los Pueblos
en la oración litúrgica de la
Iglesia". Mientras que el profesor Eudaldo Formen!,
de la Univer­
sidad
de Barcelona, trató de "La definición de España en la obra
de Torras i Bages: Conjunt de pobles units perla Providencia".
JUAN CAYÓN
FAMILIA Y DERECHO DE FAMILIA
Durante los días 8 a 10 de octubre de 2004 ha tenido lugar
en Córdoba el Congreso sobre "Familia y Derecho de familia"
convocado
por la Sección Española de la Sociedad Internacional
Tomás de Aquino
(SITAE). El Presidente de la citada Sección,
P. Gallego Salvadores, O. P., presidía el Comité Organizador, del
que formaban parte los miembros de la misma doctores Petit
Sullá, Ayuso Torres y Palomar Maldonado, actuando
como Secre­
tario Técnico el doctor Sevilla Bujalance.
El Comité Científico lo
integraban los doctores Cervera Barranco, Escandell Cucarella y
Ayuso Torres, por las vertientes respectivas de Teología, Filosofia
y Derecho. Entidad patrocinadora era la Obra Social de CajaSur,
uno de cuyos salones fue marco del Congreso. El te1nario pre-
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CRÓNICAS
visto abarcaba nueve Ponencias junto a varias Comunicaciones e
inteivenciones relacionadas-con los temas tratados o infor1nativas
de las actividades de la SITA.
Presidió la sesión de apertura el P. Gallego, quien en nombre
del
Comité Organizador dio la bienvenida a los congresistas. El
profesor Evaristo Palomar expuso los fines y el enfoque del
Congreso, señalando
que al escoger la Familia como tema gene­
ral, se había advertido la necesidad de centrarlo en el 1natrimo­
nio y que sobre éste "habría parecido oportuno retomar la cues­
tión de sus principios constitutivos, entre los
que figura, desde
luego, el
de serlo iodisoluble". A este propósito puso de relieve
Palomar que "de hecho la disolución familiar comienza
por la
disolución del vioculo", lo
que "siendo una negación explícita del
matrimonio, no deja de ser, al 1nismo tiempo, una carcoma
social". Y señaló el propósito de discutir a lo largo del Congreso
las muchas cuestiones implícitas
en todo aquello, con la espe­
ranza de réencontrar lo que la Familia y el Matrimonio, por enci­
ma de cualquier ideología, suponen a favor de la persona huma-
. na y de la sociedad.
En la
apertura también, el doctor Mario Iceta, Vicario de la
Diócesis
de Córdoba, transmitió a los congresistas un cordial salu­
do de bienvenida en no1nbre del señor obispo de la Diócesis e
impartió una lección magistral, con visión cristiana y to1nista, de las
cuestiones debatibles en el Congreso. Estudió el bien de la familia
y su percepción contemporánea, obseIVando que el hombre, inca­
pacitado para percibir el bien, ha renunciado a ello y prefiere una
verdad subjetiva. El hombre actual -dijo-está iomerso en una
realidad que él no se ha dado y tiene .una tendencia a "liberarse".
Al señalar estos hechos, el doctor Iceta los enmarcó entre los fru­
tos de la modernidad y estudió la crisis de ésta, que ha llevado al
hombre a la soledad y a la falta de sentido para percibir el bien
sobre el mal. Entre las posibles salidas a esta crisis, señaló la de
revitalizar Europa, superando el neoliberalismo, el paganismo y el
nihilismo del hombre actual,
y recordando que Santo Tomás ense­
ñó que lo más profundo de la naturaleza htunana es ver el rostro
de Dios. En las palabras finales advirtió que la Fe
no puede dialo­
gar con las ideologías sino con las personas.
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La Primera Ponencia, titulada Persona y comunión: "Serán
una sola carne", estuvo a cargo de Fray Abelardo Lobato, O. P.,
Presidente de la Pontificia Academia de Santo Tomás y de la
SITA. Señaló el ponente las posibilidades del estudio de la Fami­
lia sobre la base
de textos tomistas. A través de una sugestiva
exposición sobre la persona, se refirió a la naturaleza del alma y
a la materia del cuerpo humano, subrayando las inclinaciones
trascendentales del hombre y tocando el problema del mal,
que
puede prevalecer sobre el bien en una época. Aludió también a
la existencia de. la sexualidad en la persona. Y1 en el orden jurí­
dico, cotejó las contrapuestas concepciones de la ley en Rousseau
(como producto
de la voluntad de la mayoria) y en Santo Tomás
(como ordenamiento de la razón). Por su enfoque y profundidad,
la Ponencia constituyó
una sólida base para el inmediato estudio
de los temas programados.
La Segunda Ponencia, que llevaba el título de Nuestro Dios es
un Dios de vivos. Matrimonio y filiación para que el hombre viva,
fue expuesta por Fray Juan José Gallego, O. P., catedrático en la
Facultad
de Teología San Vicente Ferrer y Presidente de la Sec­
ción Española de la SITA. Co1no autoridad en el tomismo, estu­
dió en profundidad la noción del bien común y el tema de la ver­
dad a la luz de Santo Tomás, poniendo de relieve cómo la tradi­
ción cristiana
une verdad y libertad. Expuso que el eclipse de
Dios
en la sociedad conduce al materialismo práctico, donde la
"calidad
de vida" omite las necesidades espirituales, llegando el
hombre a no saber quién es, ni de dónde viene ni a dónde va.
Denunció el aborto y la eutanasia como atentado a la libertad con
el sometimiento de un hombre a otro. Del matrimonio habló el
P. Gallego como fuente de la vida humana.
La Tercera Ponencia, bajo el epígrafe Contra la Familia: ne­
gación de la paternidad, negación de la filiación, negación del
don,
agrupaba dos temas: el primero, Matrimonio y Familia en
Kant y en Hegel, fue desarrollado por el doctor Elio Gallego
García, profesor
de Filosofía del Derecho y Vicerrector de Inves­
tigación
de la Universidad San Pablo-CEU, quien a lo largo de
una brillante exposición fue resu1niendo los puntos ese_nciales de
las concepciones de los dos autores ale1nanes en las materias alu-
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elidas, así como las influencias ejercidas en autores posteriores. El
segundo tema, Matrimonio y Familia en Marx, fue expuesto por
el doctor Evaristo Palomar Maldonado, profesor titular de
Filosofía del Derecho de la Universidad Complutense de Madrid,
quien,
también de forma brillante, examinó el concepto del hom­
bre para Marx y resumió la concepción mancista del matrimonio,
analizando sus bases y sus consecuencias.
La Cuarta Ponencia, sobre ¿Modelos plurales de Familia? Inte­
gración
y desestructuración social, estuvo a cargo del doctor
Javier Barraycoa Martinez,
profesor de Sociología de la Universi­
tat Abat Oliba, quien realizó una interesante exposición crítica de
los distintos modelos de Familia que se ofrecen en la Sociología
actual
con sus respectivas consecuencias. A la luz también de la
Sociología analizó
muchas de las situaciones que ofrece la reali­
dad actual y puso de relieve la paradoja de que algunos colecti­
vos
que hasta hace poco luchaban contra el modelo tradicio­
nal de 1natrimonio, al que suponían "generador·de neuróticos",
hoy piden precisamente la posibilidad de matrimonio para sus
miembros.
La Quinta Ponencia versaba sobre Familia y Matrimonio en
el Derecho histórico de los pueblos
de España y estaba enea-'
mendada al autor de esta crónica. Al cumplir el mandato recibi­
do,
me esforcé por resumir la evolución producida a lo largo del
extenso período comprendido entre 589 (año del III Concilio de
Toledo) y 1978 (año de la Constitución vigente). Sucesivamente
fueron estudiados co1no temas de necesaria atención: la Familia
en los siglos VI a xrn (con especial consideración de la regulación
del matrimonio en las Partidas); la Familia en los regúnenes fora­
les;
el matrimonio y el Concilio de Trento; las influencias de la
Ilustración y
la Revolución; y el matrimonio en los Proyectos de
Código civil, en la Constitución de 1869, en la ley de 1870, en la
Constitución
de 1876, en el Código civil, en la legislación de la
II República y en la legislación de 1938 a 1978.
La Sexta Ponencia se titulaba El matrimonio católico, ¿incons­
titucional?
y fue defendida por la doctora Consuelo Martinez­
Sicluna, profesora titular
de Filosofía del Derecho de la Univer­
sidad Complutense
de Madrid, quien, entrando ya en el examen
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de la legislación española vigente en materia matrimonial, cotejó
el sistema acogido por el Código civil con el adoptado por la
Constitución de 1978, y sostuvo que el primero fue mejor. Puso
de relieve
la ambigüedad constitucional en tema de matrimonio,
que permite que hoy se invoque la aconfesionalidad del Estado
en un sentido contrario al artículo 32 de la Constitución. La ambi­
güedad -observó-lleva a que prevalezca la interpretación que
interese al pattido en el poder. Estudió el matrimonio como
sacramento y como contrato, defendiendo la indisolubilidad.
La Séptima Ponencia tenía por tema los Principios Jurídico­
naturales de
la relación conyugal: contrato, unidad e indisolubi­
lidad y por ponente al doctor José Luis de los Mozos, Catedrático
Emérito
de Derecho civil de la Universidad de Valladolid y Magis­
trado del Tribunal Constitucional.
El ilustre civilista pattió de la
convicción
de que ahora más que nunca todo jurista debe acudir
al
Derecho natural y observó que la Humanidad, sin saberlo, está
volviendo a él. Puso de relieve que el Derecho natural no nece­
sita ni siquiera declaraciones, estando siempre presente en los
principios generales del Derecho; a este respecto estudió la natu­
raleza de las cosas. y el concepto del Derecho natural en Santo
Tomás, afir1nando que con éste el Derecho común llegó a su ple­
nitud en el siglo XIII. En la concreta materia matri1nonial, aludió a
ciertas situaciones actuales_
que -co1110 el concubinato, la unión
ho1nosexual y el ménage a trois-se vienen presentando como
paradig1na. Respecto al matrimonio verdadero, analizó su natura­
leza y sus propiedades a la luz de la doctrina católica.
La Octava Ponencia versaba sobre El fracaso del divorcio en
Europa
y en España, estando encomendada al doctor Gabriel
García Cantero, Catedrático Emérito
de la Universidad de Zara­
goza y miembro
de la Academia de Derecho Comparado de La
Haya. Con su reconocida autoridad en Derecho de familia y su
dominio especial del tema del divorcio, García Cantero
expuso la
amplia problemática
de la indisolubilidad. Recordó la achnisión
histórica del divorcio
en el Derecho francés, donde por cierto no
merecía demasiada atención a los autores del Código civil, intro­
duciéndose
en Francia por el deseo de conservar algo de la
Revolución y por interés de Napoleón. Resumió la difusión pos-
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terior del divorcio en el Derecho comparado y observó que hoy
el Tribunal de Derechos Humanos no lo impone, considerándolo
como tema propio de cada Estado. Señaló que
en el mundo cada
sistema de divorcio responde a una filosofía del matrimonio. Se
detuvo en el sistema de divorcio culpable (que busca favorecer al
cónyuge inocente) y en el de divorcio unilateral (que lleva a la
desaparición del matrimonio). e hizo
una critica de este último sis­
tema, que evoca el
repudio histórico con la diferencia de que éste
lo ejercía sólo el varón. Describió los efectos del divorcio, dete­
niéndose
en los que afectan a los hijos y destacando el trauma
que éstos sufren generalmente. En definitiva, a su juicio, el divor­
cio constituye un atentado al n1atrimonio desde dentro.
Por la vía de las Comunicaciones se aportaron también al
Congreso interesantes datos y opiniones acerca de los temas en
él estudiados. Las expuestas fueron las siguientes: Persona, Fami­
lia
y Derecho, del doctor Juan Luis Sevilla Bujalance, profesor de
Derecho civil de la Universidad de Córdoba; La Familia, razón
de fa vida y razón de fa sociedad, de don José María Femández
Peña, Presidente de Acción Familiar en Córdoba; Familia y
sexualidad, de doña Maria Victoria Palop Molto, Vocal de Acción
Familiar
en Córdoba; No es Jo mismo, de don Juan Jurado Ballesta,
del Foro Andaluz de
la Familia; y Sentido del matrimonio frente
a
fa unión homosexual, del P. Vicente Cudeiro González. Todas
ellas, al igual que las Ponencias, fueron seguidas de animados
debates, caracterizados por el rigor y libertad de las interven­
ciones.
Dentro del Congreso pronunció una conferencia sobre las
actividades de la
SITA su Presidente, Fray Abelardo Lobato, O. P.,
quien recordó el nacimiento de la Sociedad (acaecido en el bri­
llante Congreso totnista
de 197 4, con asistencia de mil quinien­
tos congresistas y bendición de Pablo
VI) y resumió las activida­
des desplegadas desde entonces, aludiendo especialmente a los
varios
Incontri Cu!turaft habidos en Italia. Aludió también a la
Academia de Santo Tomás, que desde Roma proyecta sus inves­
tigaciones sobre todo el n1undo.
En relación asimismo con los estudios tomistas en la hora
actual, Fray Juan José Gallego, O. P., informó sobre la Sección
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Española de la SITA, que preside. Y el doctor Miguel Castillejo
Gorráiz, Presidente de CajaSur, impartió
una conferencia brillan­
te sobre el tomismo, cotejándolo especialmente con el krausismo;
de este último resumió su introduc.ción
en España por Sanz del
Río e hizo una crítica muy documentada de su pensamiento.
También puso de relieve Castillejo la importancia filosófica de
figuras como Santo Tomás, Averroes y Maimónides.
En resumen, cabe afirmar
que el Congreso de Córdoba, pro­
gramado con sentido de la oportunidad y desarrollando con
libertad y altura,
ha constituido una seria reflexión (que podrá
conocerse mejor en elcaso previsible y deseable de que se publi­
quen las Actas), a la luz de la doctrina católica y especialmente
del pensamiento tomista, sobre los peligros
que en la hora pre­
sente acechan
-en todo el mundo y, por supuesto, en España­
ª la Familia y al Matrimonio.
Jos8 M.' CA.sTÁN VAzQUEZ
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