Al capitán Etayo

LA Nl'GA 111 Y EL CAPITAN ETAYO
AL CAPITAN ETAYO
POR
LUIS HERNANDO DE LARRAMENDI
El mundo debe su futuro a los que sueñan.
A quienes escudriñan el cielo y ven más lejos.
Y persiguen· altos ideales, que
son siempre reflejos
del Grial, en cuya busca la vida toda empeñan.
Etayo,. el capitán, tiene en sus
ojos un velero.
En sti pecho arde el fuego sagrado de la Fe. ··
Su alma, a ella asida, no puede perder pie.
Tampoco, vetenµ10, sq norte el ~arinero.
En las serenas noches sin luna, sobre el cielo,
ve el antiguo mapa de la América española
que trasciende
gigante, en mágica aureola,
la sombra de la. Cruz clavada en aquel suelo ..
Siente que la sangre palpita de ilusiones.
Sueña con servir de nuevo a un ideal.
Renueva
entre sus canas aquel brío vernal.·
Arrostra que
le esperen que anda entre visiones.
En un mundo ~. tratos, mentiras y dineros,
proclama con su vida la luz de
su verdad:
sentir en
caballero, obrar en caridad;
rezar a un solo Dios, desbaratar contrafueros.
Cou otros once héroes hacia la mar
Se hace,
aventando las vel~s con ígnea pasión, .
que conduce a la Niña en la estela de .Colón
al Mundo Nuevo en que la Gloria vive y nace.
Al zarpar· hoy en pos· de revivir una hazaña,
al tiempo que pedimos a Cristo que os proteja,
le rogamos que ampare esta tierra que
os deja,
guiando vuestro· rumbo, guiando nuestra España.
( septiembre de 1992)
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