Índice de contenidos
Número 333-334
Serie XXXIV
- Textos Pontificios
- Noticias
-
Estudios
-
La integración del este en el vacío occidental
-
Consecuencias jurídicas aplicables a los delincuentes de conciencia
-
El ayer y el hoy de la mujer cristiana
-
La cruz en México
-
La eutanasia: sus modalidades y figuras afines. Terminología desde la perspectiva jurídica
-
La finalidad del poder
-
Los límites del poder
-
Proyección sociopolítica de los Congresos Católicos en España (1889-1908) (I)
-
Freud: ¿qué epistolario?
-
-
Crónicas
-
Revista Cristiandad: nuevo director y número extraordinario
-
La doctrina política de la Iglesia y la política de los católicos. Presentación del libro de Luis María Sandoval, La catequesis política de la Iglesia
-
Una política católica [En la presentación del libro «La catequesis política de la Iglesia»]
-
La doctrina política del Catecismo [En la presentación del libro «La catequesis política de la Iglesia»]
-
-
Información bibliográfica
-
Geraldo Bezerra de Menezes: A vida substancial do espirito
-
Manuel Fernández de Escalante: Los imperantes y su séquito
-
Alain Touraine: Crítica de la modernidad. ¿Qué es la democracia?
-
Alexandra Wilhelmsen: La formación de la doctrina política del carlismo (1810-1875)
-
Romano Amerio: Iota unum. Estudio sobre las transformaciones de la Iglesia Católica en el siglo XX
-
Ángel Maestro: La corte de los milagros ¿existe aún España?
-
Álvaro d'Ors: Derecho y sentido común (Siete lecciones de Derecho Natural como límite del derecho positivo)
-
Arnaud de Lassus: La liberté religieuse. Trente ans après le Vatican II (1965-1995)
-
Autores
1995
Manuel Fernández de Escalante: Los imperantes y su séquito
INFORMACION BIBLIOGRAFICA
Manuel Femández de Escalante: LOS IMPERANTES
Y SU SEQUITO
(*)
El desaparecido Leo Strauss, profesor, que fue de la Universi
dad de Chicago y uno de los más influyentes filósofos de la políti
ca de la segunda mitad del siglo, en su Persecution and the art of
writing, indagó las razones que alimentán la irrefrenable tenden
cia a la criptografía a que
es tan dada la intelligentzia. La agudeza
de la captación -ilustrada con ejemplos notables que exhuma
de
la historia del pensamiento político-aparece potenciada sin
duda por la significación biográfica que porta el escrito, pues
en
tre los intersticios despunta con ironía amarga la propia expe
riencia del autor,
y no sólo en la Alemania de entreguerras, sino
incluso en la
América de posguerra.
,E] origen de esta escritura
secreta ha podido radicarse en el temor a los poderosos o en la
postura agnóstica en su fondo respecto de la ortodoxia pública
vigente en
la sociedad y aparentemente adherida y aun entusiásti
camente profesada. Nada de esto ha de buscarse en el estilo que
el profesor Feruández de Escalante viene cultivando desde sus
primeras escaramuzas en las lides intelctnales y más ,llamativa
mente en las últimas de
sus obras. No moja su pluma en el temor,
el resentimiento o el disimulo, sino que, antes al contrario, en
cuentra la savia para sus escritos en la hidalgnía, el contemptus
mundi
y la fidelidad. Así, si la criptogra{ía de Leo Strauss es la
del judío alemán, exiliado
y naturalizado americano, el barroquis
mo
y la ironía que acompañan todas las tomas de posición inte
lectuales de Fernández de Escalante, tienen el sello de
las fides
hispanica. Los imperantes
y su séquito -en realidad lleva por título
completo
Los imperantes (y su séquito) y el imperio de la -«su»
ley (Con un discurso de circunstancias
«sopra il Goberno Misto»)
constituye una muestra admirable de cuanto se acaba de decir. La
que llama «desencantada y eterna perífrasis de Estado», genial
creación de Jakob Burckardt, le sirve para enhebrar un discurso
demoledor contra
las tendencias histórico-sociológicas del poder
político en su epifanía contemporánea.
He ah! el resumen, en la
particular grafía de que se sirve el autor: «El increíble :ansia de
mandar de los imperantes, loádos por
el sékito, y el ovil placer,
ó resignación, de obedecer en "la mayoría" (de los imperados)
continúa intacto produciendo, inalterable, la conocida "relación
(•) Ed. Adhara, Granada, 1991, 118 págs.
411
Fundaci\363n Speiro
lNFORMACION BlBLIOGRAFIC.A
política" entre imperantes e imperados en cuyo desarrollo unos
cobran un tributo por mandar y otros lo pagan
por obedecer».
Son páginas que agavillan crudamente, envueltos eso
si en
fino humor
-a menudo guiños s6lo perceptibles por los iniciados
en los lares culturales o universitarios que enfoca bajo su lente,
lo que los anglosajones llaman inside ¡olees-, toda suerte de
embates contra los procesos sociales y culturales que
han conno
tado la contemporaneidad, dejando
al aite de modo inmisericorde
sus desnudeces.
De ahi que, transitar por ellas en tiempos satu
rados de conformismo, en tiempos
pr6digos en actitudes pastue
ñas, alivia y reconforta a
la vez. Cuando una espesa cortina de
t6picos impide orear las entendederas odiernas, instaladas en su
repetición
hipóctita y aprovechada, el realismo descarnado del
hoy catedrático vallisoletano, entre chanzas, extravagancias e in
geniosidades, nos devuelve a la seriedad, a la cordura, a la reali
dad. ¿Qué son
la dynamis -verdadera hyb?is-estatal, la «auto
poiesis» que anida en su sediciente derecho devorador e invasor,
la sociedad urnifacturada que imperantes y séquito
-semper
ídem-han urdido para hacer perenne su escisi6n respecto de los
imperados,
más que, bien miradas, sal gruesa y delitio?
No sólo frente a las apoteosis de la doctrina idealista
alema
na, sino también contra las sacralizaciones democráticas del nú
mero, el profesor Fernández de Escalante se mueve por momentos
entre la reactualizaci6n del anarquismo y una personal y aut6noma
aproximación al minimalismo estatal. De un lado reconoce que
el Estado, por su propio dinamismo, es «segura fuente de opre
sión», «miente en
todas las lenguas del bien y del mal, y posea
lo que posea lo
ha robado». De otro, adviene a considerar como
el menos indeseable el modelo mixto en
el que haya «menos po
liticos, es decit, menor imperantes, y por último y sobre todo,
menos séquito». No es tanto, sin embargo, una afirmación lo
que hay que buscar en sus páginas ; lo más importante es el cho
que frontal con muchas convenciones que los planteamientos sim
plemente sesudos o ponderados, por más que verdaderos, no
aciertan a veces a horadar.
Gonzalo Fernández de la Mora, siempre
ctitico agudo, ha es
crito a propósito de este mismo libro que comento, que su autor
es el jurista más anticonsensual de su promoción y qui2ás de toda
la Universidad española. Asombra -concluimos con él-que en
tiempos patrios de docilidad orgánica v plumas prebendadas,
apa
rezca, como especie de extinción, un intelectual en pura rebeldía.
MIGUEL Aruso.
412
Fundaci\363n Speiro
Manuel Femández de Escalante: LOS IMPERANTES
Y SU SEQUITO
(*)
El desaparecido Leo Strauss, profesor, que fue de la Universi
dad de Chicago y uno de los más influyentes filósofos de la políti
ca de la segunda mitad del siglo, en su Persecution and the art of
writing, indagó las razones que alimentán la irrefrenable tenden
cia a la criptografía a que
es tan dada la intelligentzia. La agudeza
de la captación -ilustrada con ejemplos notables que exhuma
de
la historia del pensamiento político-aparece potenciada sin
duda por la significación biográfica que porta el escrito, pues
en
tre los intersticios despunta con ironía amarga la propia expe
riencia del autor,
y no sólo en la Alemania de entreguerras, sino
incluso en la
América de posguerra.
,E] origen de esta escritura
secreta ha podido radicarse en el temor a los poderosos o en la
postura agnóstica en su fondo respecto de la ortodoxia pública
vigente en
la sociedad y aparentemente adherida y aun entusiásti
camente profesada. Nada de esto ha de buscarse en el estilo que
el profesor Feruández de Escalante viene cultivando desde sus
primeras escaramuzas en las lides intelctnales y más ,llamativa
mente en las últimas de
sus obras. No moja su pluma en el temor,
el resentimiento o el disimulo, sino que, antes al contrario, en
cuentra la savia para sus escritos en la hidalgnía, el contemptus
mundi
y la fidelidad. Así, si la criptogra{ía de Leo Strauss es la
del judío alemán, exiliado
y naturalizado americano, el barroquis
mo
y la ironía que acompañan todas las tomas de posición inte
lectuales de Fernández de Escalante, tienen el sello de
las fides
hispanica. Los imperantes
y su séquito -en realidad lleva por título
completo
Los imperantes (y su séquito) y el imperio de la -«su»
ley (Con un discurso de circunstancias
«sopra il Goberno Misto»)
constituye una muestra admirable de cuanto se acaba de decir. La
que llama «desencantada y eterna perífrasis de Estado», genial
creación de Jakob Burckardt, le sirve para enhebrar un discurso
demoledor contra
las tendencias histórico-sociológicas del poder
político en su epifanía contemporánea.
He ah! el resumen, en la
particular grafía de que se sirve el autor: «El increíble :ansia de
mandar de los imperantes, loádos por
el sékito, y el ovil placer,
ó resignación, de obedecer en "la mayoría" (de los imperados)
continúa intacto produciendo, inalterable, la conocida "relación
(•) Ed. Adhara, Granada, 1991, 118 págs.
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Fundaci\363n Speiro
lNFORMACION BlBLIOGRAFIC.A
política" entre imperantes e imperados en cuyo desarrollo unos
cobran un tributo por mandar y otros lo pagan
por obedecer».
Son páginas que agavillan crudamente, envueltos eso
si en
fino humor
-a menudo guiños s6lo perceptibles por los iniciados
en los lares culturales o universitarios que enfoca bajo su lente,
lo que los anglosajones llaman inside ¡olees-, toda suerte de
embates contra los procesos sociales y culturales que
han conno
tado la contemporaneidad, dejando
al aite de modo inmisericorde
sus desnudeces.
De ahi que, transitar por ellas en tiempos satu
rados de conformismo, en tiempos
pr6digos en actitudes pastue
ñas, alivia y reconforta a
la vez. Cuando una espesa cortina de
t6picos impide orear las entendederas odiernas, instaladas en su
repetición
hipóctita y aprovechada, el realismo descarnado del
hoy catedrático vallisoletano, entre chanzas, extravagancias e in
geniosidades, nos devuelve a la seriedad, a la cordura, a la reali
dad. ¿Qué son
la dynamis -verdadera hyb?is-estatal, la «auto
poiesis» que anida en su sediciente derecho devorador e invasor,
la sociedad urnifacturada que imperantes y séquito
-semper
ídem-han urdido para hacer perenne su escisi6n respecto de los
imperados,
más que, bien miradas, sal gruesa y delitio?
No sólo frente a las apoteosis de la doctrina idealista
alema
na, sino también contra las sacralizaciones democráticas del nú
mero, el profesor Fernández de Escalante se mueve por momentos
entre la reactualizaci6n del anarquismo y una personal y aut6noma
aproximación al minimalismo estatal. De un lado reconoce que
el Estado, por su propio dinamismo, es «segura fuente de opre
sión», «miente en
todas las lenguas del bien y del mal, y posea
lo que posea lo
ha robado». De otro, adviene a considerar como
el menos indeseable el modelo mixto en
el que haya «menos po
liticos, es decit, menor imperantes, y por último y sobre todo,
menos séquito». No es tanto, sin embargo, una afirmación lo
que hay que buscar en sus páginas ; lo más importante es el cho
que frontal con muchas convenciones que los planteamientos sim
plemente sesudos o ponderados, por más que verdaderos, no
aciertan a veces a horadar.
Gonzalo Fernández de la Mora, siempre
ctitico agudo, ha es
crito a propósito de este mismo libro que comento, que su autor
es el jurista más anticonsensual de su promoción y qui2ás de toda
la Universidad española. Asombra -concluimos con él-que en
tiempos patrios de docilidad orgánica v plumas prebendadas,
apa
rezca, como especie de extinción, un intelectual en pura rebeldía.
MIGUEL Aruso.
412
Fundaci\363n Speiro