Índice de contenidos
Número 341-342
Serie XXXV
- Textos Pontificios
-
Estudios
-
Deberes y derechos de las naciones. Comentario al discurso de Juan Pablo II en la ONU
-
El nacionalismo, entre la patria y el estado
-
Democracia y aristocracia
-
La autoridad y la obediencia
-
Poder político y religión: ¿una aporía?
-
Del «socialismo sin rostro» a la «hegemonía liberal». A vueltas con la sociedad civil
-
Observaciones sobre un comentario
-
Deconstrucción, comprensión y explicación. A propósito de la sociedad civil
-
Moralidad, pluralismo y bien común
-
España, tierra de María
-
El conocimiento analógico de Dios. El humanismo cristiano de Victorino Rodríguez
-
-
Actas
-
Dios y la naturaleza de las cosas. Crónica de la XXXIV Reunión de Amigos de la Ciudad Católica
-
Homilía del P. Agustín Arredondo, S. J. en la Misa del 9 de diciembre [XXXIV Reunión de Amigos de la Ciudad Católica]
-
Homilía del P. José María Alba, S. J. en la Misa del 10 de diciembre [XXXIV Reunión de Amigos de la Ciudad Católica]
-
Plática del P. Manuel Martínez Cano, M. C. R. en el acto litúrgico final [XXXIV Reunión de Amigos de la Ciudad Católica]
-
- Crónicas
-
Información bibliográfica
-
Marquesa de La Rochejaquelein: Memorias. La Revolución Francesa y las Guerras de la Vendée
-
Emilio Silva de Castro: La Virgen de Guadalupe, Reina de México y Emperatriz de las Américas
-
La población y sus problemas: Gérard-François Dumont. El festín de Cronos. El futuro de la población de Europa; Patricio H. Randle (ed.). La población. Respuestas a una doctrina de la seguridad demográfica
-
Álvaro Maortua Pico: España. Una conciencia histórica para la esperanza
-
Javier del Hoyo Calleja: Profeta de nuestro tiempo. Tomás Morales, S.J. (1908-1994)
-
AA.VV.: Jaime Eyzaguirre. Historia y pensamiento
-
España, la Iglesia y la Revolución en la historia de la guerra: John Keegan. Historia de la guerra
-
Andrés Caso Sanz: Un kilo de versos
-
Autores
1996
Dios y la naturaleza de las cosas. Crónica de la XXXIV Reunión de Amigos de la Ciudad Católica
CRONICAS
DIOS Y LA NATURALEZA DE LAS COSAS
Crónica de la XXXIV Reunión de amigos
de la Ciudad Católica
Durante los días 8, 9 y 10 de diciembre del pasado año 1995,
celebramos en Barcelona la
XXXIV Reunión de amigos de la
Ciudad Católica, en el Seminari
vez más,
la acogida fue espléndida y el entorno resultó suma
mente adecuado pata el buen desarrollo de
la Reunión.
Como en otras ocasiones
en que nos reunimos en la Ciudad
Condal, hay que destacar
la elevada patticipación de los amigos
catalanes. Más de doscientas personas procedentes de toda Es
paña acudimos a esta cita anual, que sin interrupciones
ha alcan
zado su trigésimo cuarta edición. En su mayoría los asistentes per
tenecían al Principado. Cristiandad, Nord y especialmente la Unión
Seglar
de Barcelona, aportaron el mayor número de participantes.
Como siempre, y fieles a
su vocación de difusión de la doc
trina social de la Iglesia en orden a
la instauración de la Ciudad
Católica
y la restauración de la civilización· cristiana, se trató es
pecíficamente de una cuestión esencial, no sólo para lograr el
establecimiento de fos mandatos de Cristo como leyes para el
vivir social, sino al menos para alcanzar una auténtica conviven
cia humana. En electo, en estos tiempos de creciente y alartnante
indiferentismo religioso -con manifestaciones de ateísmo e in
cluso de rechazo hacia Dios y la religión católica-, de «pasotis
mo» hacia
la verdad y el bien y de desprecio -tácito o expreso-
de la realidad natural, la Reunión giró en . tomo al tema general
de Dios y la naturaleza de las cosas, a fin de recordar que la
Revelación y
el orden natural que muestra la naturaleza que Dios
ha creado,
constituyen,.----eada una en su orden-los dos faros
luminosos con cuya luz pertnanente es posible descubrir los
ca
minos para el recto obrar humano, personal y social. Sólo retor
nando a Dios y
a su obra, en
la que los hombres actuamos como
causas segundas, será posible s..llr de la crisis, de la enfertnedad
crónica en la qu<> nos ha hundido la modernidad.
Como es habitual la Reunión se desarrolló
en una triple ver-
Verbo, núm. 341-342 (1996), 179-189
179
Fundaci\363n Speiro
CRONICA DE LA XXXIV REUNION DE AMIGOS DE LA CIUDAD CATOLICA
tiente. En primer lugar, los actos religiosos, con Misa --oficiada
por los padres Alba y Arredondo, S. J.-, Rosario y acto litúr
gico final con
exposición del Santísimo y plática final . del padre
Martínez Cano, M. C. R.
En segundo lugar las conferencias, en las que se desarrolla
ron diversos aspectos del
tema general. Así, tras la introducción
de Juan V
allet de Goytisolo, que habló sobre el orden de las
cosas creadas, MigudAyuso trató de la naturaleza de las cosas y
las leyes
humanas; la profesora titular de Filosofía del Derecho,
Consuelo Martínez-Sidnna, trató la cuestión de
la concepción
clásica y las concepciones modernas de la naturaleza de las cosas;
Francisco Canals, catedrático de Metafísica, de la teología y la
naturaleza de las cosas; el catedrático de Filosofía de la Natura
leza, José María Petit, de
la ley eterna y la ley natural; el profe
sor
titular de Filosofía del . Derecho, José Miguel Serrano, .de
ser y deber ser: ¿dos mundos distintos?; :Eudaldo Forment,
catedrático de Metafísica, de
.la naturaleza de las cosas y la filo
sofía;. el profesor de Filosofía del Derecho, Evaristo Pafomar, de
naturaleza. de las cosas y tradición; el magistrado José :M:aría
Juanola, de}a naturaleza de las cosas y la determinación del de
recho;
el profesor italiano de Filosofía Mpral y Política, Danilo
Castellano, de
la esencia 4e la política y el naturalismo politico
y Estanislao Cantero, de el orden de las cosas en la doctrina pon
tificia,
-. En tercer 1ugar, los foros,. que resultaron con interesantes y
animados debates tras la exposición
del ponente: Mateo Argerich,
la identida.d cultural, ob¡eto del derecho ; Javier González Blesa,
la adopción de menores por homosexuales; Araceli Herrera, Evan
gelium vitae;
Manuel María Doménech, Informática, física y 'Tri
nidad; Miguel Angel Belmonte, la naturaleza del poder politico:
errores modernos;
Juan Antonio Martínez Muñoz, Naturaleza del
derecho y Dios;
Santiago Milans del Bosch, el jurado; Jorge Soley,
el encuentro de culturas a finales del siglo XX, y Elisa Ramirez, la
transmisión de los valores a través de la enseñanza de la historia.
Para terminar esta reseña de la Reunión, cuyos foros princi
pales y conferencias se publicarán en el año ·en curso y · en un
número monográfico de
Verbo, quisiera destacar la parte final de
la intervención de Estanislao Cantero, en
la. que resaltó como
perteneciente al orden de las cosas relativo a
la doctrin,¡ católica,
el deber de trabajar intensamente
-mediante la aportación per
sonal, la propaganda, la cOntribución ·económica-"-, conforme a
nuestra condición de católicos militantes y tomprometidos, a ·fin
de que nuestra tarea y nuestra obra alcancen mucha mayor difu-
180
Fundaci\363n Speiro
CRONICA DE LA XXXIV REUNION DE AMIGOS DE L4. CJUD.A.D.·CATOLICA.
sión, para la mayor gloriá de Dios, bien de las almas, mejora de
nuestra patria
y nuestra propia santificación.
Finalmente, quisiera animar a aquellos de nuestros lectores
que
aun. no conocen nuestras reuniones anuales a que acudan a
la que, si Dios quiere, se celebrará en Madrid este mismo año.
Seguro que no quedarán defraudados.
c. E.
HOMILIA DEL P. AGUSTIN ARREOONDO, S .. J.
EN LA MISA DEL DIA 9 DE DICIEMBRE
Los caminos que nos llevan a nuestra definitiva felicidad son en sus
concretas y últimas consecuencias muy distintos
y variados, cuantos son
les carismas del Esplritu de que cada uno está dotado para llegar al
fin todos a. confluir en la plenitud de la .infinidad divina.
Pero
distintos co1110 son en nuestro andar concreto, cuentan todos
con
una dirección y base común amplia en la _que todos caben.
Y
es que siendo Dios uno en su querer · y obrar, y siendo suya la
naturaleza de las cosas por El creadas, tal punto de partida resulta ser
mtstico fundamento de todo comportamiento social; y por ello, también
acertado tema de nuestras reflexiones en esta Reunión: DIOS
y· LA
NATURALEZA DE LAS COSAS.
Porque siendo Dios como
El e.s en St, y siendo tales como son las
cosas todas del Universo, es exige_ncia indeclinable para nuestro com
portamiento libre el ajustar libren-µmte toda nuestra . vida a ese dato
inamovible, Dios
y Creación, del que también no.sotros· formamos parte
inseparable, con
~nuestra propia naturaleza, h~mana también nosotros,
que reclama asimismo el total asenso de nuestra libertad.
• • •
Más aún: ese Dios infinit.o, árbitro de este. mundo determinado, tuvo
a bien hablarnos
y dirigir nuestra marcha hacia El por medio de. emi-.
sarios suyos durante siglos; y acabó p~r. venir P.l mismo y enseñarnos
a vivir. Con
su vida divina que nos. comunicó nos abrió horizontes que
ni hubiéramos sido capaces de sospechar;
y que en nada invalidan, sino
que aclaran
y perfeccionan, aquellas exigencias qu_e intimaban de siem
pre a nuestra libertad
la existencia de Dios y su autoria sobre todas
las cosas.
Porque capacidad para entender el lenguaje de la Creación toda, y
de su Autor, sin la cual la misma. Creación no resultaria explicable,
ya la tenla la razón humana sin otro adicional adoctrinamiento divino.
La tenía, sin duda; pero, de hecho, (Jpenas hubiera llegado el hombre
con
la razón natural a conoc.er ese lenguaje y a dar con su camino. Tal
se había mostrado a lo largo de los siglos la debilidad y la degeneración
de
los humanos, no sólo en la inmensidad apóstata del paganismo, sino
181
Fundaci\363n Speiro
DIOS Y LA NATURALEZA DE LAS COSAS
Crónica de la XXXIV Reunión de amigos
de la Ciudad Católica
Durante los días 8, 9 y 10 de diciembre del pasado año 1995,
celebramos en Barcelona la
XXXIV Reunión de amigos de la
Ciudad Católica, en el Seminari
la acogida fue espléndida y el entorno resultó suma
mente adecuado pata el buen desarrollo de
la Reunión.
Como en otras ocasiones
en que nos reunimos en la Ciudad
Condal, hay que destacar
la elevada patticipación de los amigos
catalanes. Más de doscientas personas procedentes de toda Es
paña acudimos a esta cita anual, que sin interrupciones
ha alcan
zado su trigésimo cuarta edición. En su mayoría los asistentes per
tenecían al Principado. Cristiandad, Nord y especialmente la Unión
Seglar
de Barcelona, aportaron el mayor número de participantes.
Como siempre, y fieles a
su vocación de difusión de la doc
trina social de la Iglesia en orden a
la instauración de la Ciudad
Católica
y la restauración de la civilización· cristiana, se trató es
pecíficamente de una cuestión esencial, no sólo para lograr el
establecimiento de fos mandatos de Cristo como leyes para el
vivir social, sino al menos para alcanzar una auténtica conviven
cia humana. En electo, en estos tiempos de creciente y alartnante
indiferentismo religioso -con manifestaciones de ateísmo e in
cluso de rechazo hacia Dios y la religión católica-, de «pasotis
mo» hacia
la verdad y el bien y de desprecio -tácito o expreso-
de la realidad natural, la Reunión giró en . tomo al tema general
de Dios y la naturaleza de las cosas, a fin de recordar que la
Revelación y
el orden natural que muestra la naturaleza que Dios
ha creado,
constituyen,.----eada una en su orden-los dos faros
luminosos con cuya luz pertnanente es posible descubrir los
ca
minos para el recto obrar humano, personal y social. Sólo retor
nando a Dios y
a su obra, en
la que los hombres actuamos como
causas segundas, será posible s..llr de la crisis, de la enfertnedad
crónica en la qu<> nos ha hundido la modernidad.
Como es habitual la Reunión se desarrolló
en una triple ver-
Verbo, núm. 341-342 (1996), 179-189
179
Fundaci\363n Speiro
CRONICA DE LA XXXIV REUNION DE AMIGOS DE LA CIUDAD CATOLICA
tiente. En primer lugar, los actos religiosos, con Misa --oficiada
por los padres Alba y Arredondo, S. J.-, Rosario y acto litúr
gico final con
exposición del Santísimo y plática final . del padre
Martínez Cano, M. C. R.
En segundo lugar las conferencias, en las que se desarrolla
ron diversos aspectos del
tema general. Así, tras la introducción
de Juan V
allet de Goytisolo, que habló sobre el orden de las
cosas creadas, MigudAyuso trató de la naturaleza de las cosas y
las leyes
humanas; la profesora titular de Filosofía del Derecho,
Consuelo Martínez-Sidnna, trató la cuestión de
la concepción
clásica y las concepciones modernas de la naturaleza de las cosas;
Francisco Canals, catedrático de Metafísica, de la teología y la
naturaleza de las cosas; el catedrático de Filosofía de la Natura
leza, José María Petit, de
la ley eterna y la ley natural; el profe
sor
titular de Filosofía del . Derecho, José Miguel Serrano, .de
ser y deber ser: ¿dos mundos distintos?; :Eudaldo Forment,
catedrático de Metafísica, de
.la naturaleza de las cosas y la filo
sofía;. el profesor de Filosofía del Derecho, Evaristo Pafomar, de
naturaleza. de las cosas y tradición; el magistrado José :M:aría
Juanola, de}a naturaleza de las cosas y la determinación del de
recho;
el profesor italiano de Filosofía Mpral y Política, Danilo
Castellano, de
la esencia 4e la política y el naturalismo politico
y Estanislao Cantero, de el orden de las cosas en la doctrina pon
tificia,
-. En tercer 1ugar, los foros,. que resultaron con interesantes y
animados debates tras la exposición
del ponente: Mateo Argerich,
la identida.d cultural, ob¡eto del derecho ; Javier González Blesa,
la adopción de menores por homosexuales; Araceli Herrera, Evan
gelium vitae;
Manuel María Doménech, Informática, física y 'Tri
nidad; Miguel Angel Belmonte, la naturaleza del poder politico:
errores modernos;
Juan Antonio Martínez Muñoz, Naturaleza del
derecho y Dios;
Santiago Milans del Bosch, el jurado; Jorge Soley,
el encuentro de culturas a finales del siglo XX, y Elisa Ramirez, la
transmisión de los valores a través de la enseñanza de la historia.
Para terminar esta reseña de la Reunión, cuyos foros princi
pales y conferencias se publicarán en el año ·en curso y · en un
número monográfico de
Verbo, quisiera destacar la parte final de
la intervención de Estanislao Cantero, en
la. que resaltó como
perteneciente al orden de las cosas relativo a
la doctrin,¡ católica,
el deber de trabajar intensamente
-mediante la aportación per
sonal, la propaganda, la cOntribución ·económica-"-, conforme a
nuestra condición de católicos militantes y tomprometidos, a ·fin
de que nuestra tarea y nuestra obra alcancen mucha mayor difu-
180
Fundaci\363n Speiro
CRONICA DE LA XXXIV REUNION DE AMIGOS DE L4. CJUD.A.D.·CATOLICA.
sión, para la mayor gloriá de Dios, bien de las almas, mejora de
nuestra patria
y nuestra propia santificación.
Finalmente, quisiera animar a aquellos de nuestros lectores
que
aun. no conocen nuestras reuniones anuales a que acudan a
la que, si Dios quiere, se celebrará en Madrid este mismo año.
Seguro que no quedarán defraudados.
c. E.
HOMILIA DEL P. AGUSTIN ARREOONDO, S .. J.
EN LA MISA DEL DIA 9 DE DICIEMBRE
Los caminos que nos llevan a nuestra definitiva felicidad son en sus
concretas y últimas consecuencias muy distintos
y variados, cuantos son
les carismas del Esplritu de que cada uno está dotado para llegar al
fin todos a. confluir en la plenitud de la .infinidad divina.
Pero
distintos co1110 son en nuestro andar concreto, cuentan todos
con
una dirección y base común amplia en la _que todos caben.
Y
es que siendo Dios uno en su querer · y obrar, y siendo suya la
naturaleza de las cosas por El creadas, tal punto de partida resulta ser
mtstico fundamento de todo comportamiento social; y por ello, también
acertado tema de nuestras reflexiones en esta Reunión: DIOS
y· LA
NATURALEZA DE LAS COSAS.
Porque siendo Dios como
El e.s en St, y siendo tales como son las
cosas todas del Universo, es exige_ncia indeclinable para nuestro com
portamiento libre el ajustar libren-µmte toda nuestra . vida a ese dato
inamovible, Dios
y Creación, del que también no.sotros· formamos parte
inseparable, con
~nuestra propia naturaleza, h~mana también nosotros,
que reclama asimismo el total asenso de nuestra libertad.
• • •
Más aún: ese Dios infinit.o, árbitro de este. mundo determinado, tuvo
a bien hablarnos
y dirigir nuestra marcha hacia El por medio de. emi-.
sarios suyos durante siglos; y acabó p~r. venir P.l mismo y enseñarnos
a vivir. Con
su vida divina que nos. comunicó nos abrió horizontes que
ni hubiéramos sido capaces de sospechar;
y que en nada invalidan, sino
que aclaran
y perfeccionan, aquellas exigencias qu_e intimaban de siem
pre a nuestra libertad
la existencia de Dios y su autoria sobre todas
las cosas.
Porque capacidad para entender el lenguaje de la Creación toda, y
de su Autor, sin la cual la misma. Creación no resultaria explicable,
ya la tenla la razón humana sin otro adicional adoctrinamiento divino.
La tenía, sin duda; pero, de hecho, (Jpenas hubiera llegado el hombre
con
la razón natural a conoc.er ese lenguaje y a dar con su camino. Tal
se había mostrado a lo largo de los siglos la debilidad y la degeneración
de
los humanos, no sólo en la inmensidad apóstata del paganismo, sino
181
Fundaci\363n Speiro